La Tercera Raíz

A todas las mujeres

Siempre ha estado ahí. Desde que eramos niñas, estaba palpitando. Con el paso del tiempo se ha ido acentuando. Ese poder resolutivo y esa capacidad de aguante, aunque flaquehemos, ahí esta. Constante, con fuerza, llevando a cabo varias cosas al mismo tiempo, físicas y psíquicas sin el menor esfuerzo. A veces no somos conscientes ni que lo hemos hecho. Está ahí. Nos hace levantarnos a pesar de haber caído. Nos empuja a secarnos las lagrimas y coger aire. Nos hace apreciar la vida a pesar de un día que no tenía solución. No importa las veces que caigamos , siempre algo aprendemos. Obtenemos la experiencia.
Esa intuición, que casi nunca falla. Ese presentimiento que nos hace parar una milésima de segundo para darnos cuenta que no fallaba.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS