I. LA LLEGADA A MADRID (2007)

El terror que se creía que jamás se acabaría por diez años y regresaría por un mes-empezó hasta donde lo puedo decir-con la familia Brown mudándose de Quito a la ciudad de Madrid. En aquella ciudad de Madrid, pasaban un montón de cosas extrañas, millones de acontecimientos bastantes aterradores. En Madrid, posiblemente habite ahí un demonio. Espavento es una criatura mitológica, que es muy probable de que haya estado en la ciudad de Madrid desde 1766, porque desde ese año pasaron cosas totalmente espantosas. Madrid sería una de las ciudades más terroríficas. Los chicos de esta familia: Bertino Brown, Iván Brown y Adrián Brown, ya sabían de aquella ciudad estaba maldita y los padres no lo sabían y desde luego no querían ir. Los tres hermanos investigaron sobre la ciudad antes de mudarse. Los tres hermanos advirtieron a sus padres: Gloria Brown y Jeremy Brown, pero ellos no les quisieron creer.

  • ¿Qué están diciendo? ¿Acaso se volvieron locos? Por favor, dejen de decir estupideces y suban a la camioneta y no quiero oír ninguna babosada más-exclamó Gloria, la madre.

Los tres hermanos se sentaron en la parte de atrás. Se pusieron a leer un libro cada uno. No les gustaba perder el tiempo.

Los tres hermanos iban a estudiar en el mismo colegio, porque los hermanos tienen casi la misma edad. Bertino tiene catorce años, Iván tiene trece, mientras que Adrián tiene doce, y los tres ya están en colegio.

Estos hermanos no estaban tan felices de ir a Madrid lo que ellos querían era ir a Italia o a Nueva York, pero para ir allá, necesitan dinero y es que Madrid está alado de la ciudad que por entonces ellos vivían. Detuvieron la camioneta por un momento, era solo para coger gasolina ya que la camioneta iba lento. El papá salió a rellenar la gasolina y era muy de noche, más o menos que entra las doce y la una de la mañana. A esa hora, Gloria y los tres hermanos dormían muy cómodos. Gloria dormía en todo el asiento de atrás mientras que Los tres hermanos dormían en la cochera de la camioneta. Y al día siguiente ya habían llegado a Madrid en más o menos a las seis de la mañana. Gloria y los tres hermanos se despertaron a las ocho de la mañana. Gloria al ver que estaba ya en Madrid, reventó de la emoción mientras que Bertino, Iván y Adrián ya estaban tragando saliva por el miedo profundo. Los tres hermanos respiraron profundo y pensaron que lo que investigaron no era real y que nada de eso existía. Se relajaron por un minuto pensando las cosas buenas que podría pasar en Madrid y se tranquilizaron. Jeremy que es el padre, compró una casa propia que costaba veinte dólares, era demasiado barato, pero es que la casa era demasiada grande y tenía como diez habitaciones. Es muy extraño que costara veinte dólares así no más. La familia entera pensaba que era una estafa pero Jeremy dio los veinte dólares, y le vendieron así como si nada. La familia entró a la casa, el señor que les vendió la casa les estaba explicando donde iba cada cosa en la casa. El piso era madera sólida, las paredes pintadas de blanco eran de igualmente madera pero también entre ladrillos. La casa tenía doce habitaciones en total. Le indicó la cocina a Gloria y a Jeremy. También indicó las demás habitaciones como el baño, sala e incluyendo los cuartos de privacidad. En uno de esos cuartos había uno que en la cual estaba desocupada y Jeremy lo utilizó para poner ahí su estudio de música. Puso su guitarra, su piano, parlantes, una computadora. Esa habitación también estaba pintada de blanca pero en un rincón la pintó decorándola como fondo. También puso ahí una cámara de vídeo y además de eso, puso un micrófono y una luz muy fuerte. Y es que Jeremy es cantautor, músico y compositor de canciones de pop y de baladas románticas. A parte de eso, Bertino y sus hermanos les gustan practicar las artes marciales. Practican karate, win-chun y boxeo chino. Practican hasta con el ve de madera del win-chun y con los chacos como lo hizo varios artistas marciales como Bruce Lee. Los tres hermanos empezaron a jugar a las escondidillas como si fueran niños pequeños. Contaba Iván y cuando salió a buscar encontró a Bertino en un armario vacío. El armario estaba oscuro y no había forma de que lo viera pero Bertino suspiró haciendo que Iván lo empuje y se rompa una tabla de atrás. Pero ahí había un hueco y Jeremy lo empezó a desarmar, dando entender que tenían un sótano muy amplio. Al entrar al sótano, les salió un viento negro y que olía a muerto y daba asco a pesar de que ahí no se había muerto nadie. Al día siguiente, los tres hermanos van al colegio y los demás chicos no les tratan muy bien por ser nuevos. Se les acerca tres chicos que parecían ser bravucones ya que llevaban camiseta con mangas rotas, pulseras con pinchos y collares de cuero y además de eso también tenían tatuajes en los brazos. No les conocían pero ya sabían qué clase de personas eran.

  • Miren quienes nomás son, los nuevos del colegio-exclamó Jack Hornest. Uno de los bravucones.

Verán, nosotros nosotros mandamos aquí y para que nos conozcan, somos los tres pandilleros de este colegio y entre esos estamos: yo, Jack Hornest, mi amigo Matt Carvelín y mi otro amigo Benjamín Theurtoll-dijo Hornest con cara de quererles golpear la cara hasta que solamente quede un rostro lleno de sangre con ojos, nariz y boca y un tanto de pelo. O es al menos lo que se podía imaginar Jack Hornest. Hornest tiene problemas mentales a pesar de que su padre, Alán Hor nest trabaja mucho para poder mantenerle mientras a que él anda sin estudiar fugándose a donde quiera con sus amigos. Su padre es todo lo que tenga que ver con seguridad, y a eso se refiere a que es bombero, guardia de seguridad y policía. Berino y sus hermanos se morían de miedo pero al rato se les hacercó un chico de trece años llamado Carson Kennedit y les dijo que no se preocupen, él siempre va asustando y molestando a la gente. Carson era el líder de un grupo de amigos llamado “los inservibles” y resulta que Carson y su grupo eran del mismo curso de Bertino y sus hermanos. Fueron al curso a conocer a los otros chicos. Entre esos estaban Geremy Zambrano, Dylan Ushiña, Mateo Macanchi y Jason Carter. La clase ya iba a empezar con matemática. Pero para la mala suerte de Bertino y sus hermanos, es que Jack Hornest y su grupo estaban en esa misma clase. Bertino ya estaba que se ponía pálido del susto ya que se sentó a lado de él. Así que Bertino y sus hermanos no tuvieron el mejor y primer día en Madrid. Pero por lo menos, Carson les preguntó que si querían estar en el grupo de los inservibles y los tres hermanos, sin duda le respondieron que sí. Mientras que en el sótano encontrado por Iván y destruido la madera por el papá de los hermanos, había encontrado varias cosas como un piano viejo, un espejo roto, una silla con la pata casi rota y más cosas viejas como un hacha oxidada y desecha. Se quedó sorprendido por lo que encontró allí.

II. LA PRIMERA APARICIÓN

El grupo de amigos salían tranquilos del colegio en cuanto se aparece Jack queriendo matar a Carson por algo que le había hecho y les empezó a corretear por la calle, Jack mandó a Matt a seguir a Bertino mientras que los otros corrían. Jack quería seguir a Carson, pero éste lanza unas bolas de tenis haciéndolo caer. Carson en el suelo ya creía que era su fin y que posible iba a morir porque Jack era muy malo que si era capaz de matar a una persona ya que asesinaba a cachorros y gatos pequeños. Y para su mala suerte, Jack había sacado un cuhillo que tenía, el mismo cuchillo con el que mató a muchos animales. Carson ya estaba que se le salía las lágrimas. Mientras que Bertino corrió hacia un lugar sucio y lleno de mierda. Era una alcantarilla grande y aparte de estar abierta. Bertino se escondio a un lado del lugar y Matt entró a buscarlo. El también tanía problemas mentales. Sacó un cuchillo para atacar a Bertino y una linterna porque estaba muy oscuro y no se veía nada. Caminó hasta llegar a lo profundo de la alcantarilla, pero parecía que se alargaba más y más, y ya no se veía la luz de la puerta. Matt se resvaló y cayó sobre una mancha de orinas.

  • Maldito Bertino, ¿En dónde mierda estás?-Gritó enojado Matt. Se levantó, quiso prender la luz de la linterna pero no encendía y se empezó a preocupar. Camino hasta poder encontrar a Bertino, pero jamás lo encontró. Matt siguió caminando angustiado y golpeando a la linterna para que funcione. Miró hacia al frente y vió una luz blanca. Se alegró porque creía que ya encontró la salida, pero mientras corría, esa luz se empezó a mover viéndole a él y a su paso, la luz sacó otra luz a lado como si fueran dos ojos brillantes y a su vez, una sonrisa negra se empezó a formar. Matt dio un paso atrás asustado mientras que Aquel cosa se le acercó corriendo muy rápido.
  • Hola… ¿Cómo te llamas?-preguntó aquel criatura.
  • Matt, me llamó Matt-respondió
  • Y qué es lo que haces aquí
  • Estoy buscando a alguien
  • ¿A Bertino?
  • Si… ¿Cómo lo sabes?
  • Yo lo sé todo
  • ¿Qué pasó con Bertino?
  • Nada, él está bien.
  • ¿Qué cosa eres?
  • Me llamo Espavento
  • ¿De dónde vienes?
  • ¿Por qué tantas preguntas?
  • Por nada, pero solo es una pregunta.
  • Tienes razón, te lo responderé.
  • La linterna de Matt que estaba apuntando al suelo, se encendió de repente y misteriosamente. Matt bajó la mirada y alumbró a la criatura, pero aquella criatura había crecido mucho y su sonrisa tenebrosa tenía manchas de sangre. Del infierno, dijo la criatura. La criatura abrió su boca y le escupió sangre a la cara. Matt gritó asustado y supuso que Bertino murió y echó a correr. Encontró la salida. Matt regresó a ver atrás y cuando miró al frente, la salida se había cerrado y Matt se chocó con la puerta de la salida golpeándose. Cayó sentado al piso y se levantó en seguida. La criatura ya estaba parada detrás de él. Matt volvió a gritar y Espavento le arrancó y se comió la cabeza. Luego puso sus manos en los brazos de Matt y lo alzó y en el aire le arrancó los brazos dejando solamente el torso con las piernas. Después, le abrió una parte de atrás y se le comió los pulmones y luego le metió la mano en el pecho sacándole el corazón y se lo comió de un bocado, luego abrió su boca hasta que la quijada toque el piso y se comió el torso y las piernas. Bertino salió de su escondite y vio la criatura comiéndose los brazos y con un brazo de Matt, la criatura le saludó mientras le sonreía. Bertino se asustó y sintió el mismo terror que tuvo Matt antes de morir y Bertino salió corriendo. Bertino corrió alejándose de aquella alcantarilla y dirigiéndose a ayudar a Carson. Todo el grupo se volvió a reunir para ayudarlo aunque Dylan y Geremy no estaban. Tal vez estaban siendo perseguidos por otro de los bravucones de Jack. O eso era lo que pensaba Bertino por un segundo. Jack parecía que iba a matar a Carson con aquel cuchillo sangriento. Pero Carson era muy astuto y pateó la pierna de Jack haciéndolo caer y luego pateó el cuchillo haciendo que se caiga en un alcantarillado. Jack se enfureció mucho.
  • Carson maldito, no necesito el cuchillo para matarte, puedo hacerlo con mis puños.
  • En ese preciso momento, cuando Jack pegaría a Carson, llegó el grupo junto con la policía, pero con el padre de Jack. Jack se paró firme y alzó las manos mientras que su padre lo llevaba en el carro de la policía a su casa.
  • Bertino casi se había traumado después de ver tan aterradora cosa, la muerte de Matt Carvelín.
  • Todo el grupo ya se había ido a su casa, menos Bertino. Quiso ir a la biblioteca a investigar una cosa. ¿Qué era lo que vi? Se preguntaba. Buscó en la biblioteca un álbum de fotos que pasaron los últimos cien años en Madrid. Bertino no se sintió muy bien en la biblioteca y prefirió irse al sótano. Vio algunas cosas que le atemorizaron como el cuerpo de una persona desmembrada, sin ojos, sin pulmones, sin corazón y sin riñones. También algo que decía: ¿Por qué pasa esto en Madrid cada diez y años, y por qué desaparece en un mes? Pues es una pregunta que ni Bertino mismo puede responder con sinceridad. No obstante cuando Bertino veía tranquilamente en una de las sillas viejas del sótano, vio que algo se movió a la izquierda de él. Cerró el libro cuidadosamente y volteó a ver, no había nada, solamente una rata inquieta, moviéndose de un lugar a otro sin parar. Bertino regresó la mirada al libro y lo abrió, pero en ese momento, salió un montón de sangre del libro. Le embarró la cara y la camiseta de sangre y empezó a gritar. En ese momento salió del libro aquella criatura malévola asustando a Bertino. Corrió lo más rápido que pudo, pero se le apareció una aterradora entidad con cuerpo negro, ojos rojos, una boca totalmente abierta, dientes de sangre y era muy alto. Bertino volvió a gritar, subiendo al piso general de la biblioteca con el álbum de fotos y manchado de sangre, la bibliotecaria lo detuvo y lo sacó de la biblioteca lanzándolo por hacer bulla. Pero cuando Bertino regresó a ver, la biblioteca era un lugar abandonado. Miró su mano y resulta que ni siquiera tenía el álbum de fotos, se topó la cara y no estaba manchado de sangre, ni su camiseta y del miedo corrió hacia su casa.
  • Al día siguiente, Bertino hizo un descubrimiento. Detrás de su casa había un bosque gigante. Aprovechó que su padre sabía de carpintería y construcción y se puso a hacer con él un escondite secreto para él y todos sus amigos. Cavaron hasta el fondo y pusieron tablones de madera como pared al igual que el piso y el techo. Pusieron también fusibles de luz y electricidad. Conectaron internet ahí dentro y pusieron una computadora vieja pero funsionable. Pusieron también un librero lleno de libros de aventuras, de ciencia ficción y terror. Más tarde, Bertino llamó a todos sus amigos para que fueran a su casa y vean aquel escondite. Sin duda y obviamente fueron todos. No se querían perder aquel momento de tener una guarida secreta. Nadie de ellos se lo esperaba así de repente.
  • Pero los demás también hicieron algo en el escondite. Algunos pusieron mesa mientras que otros pusieron las sillas y los sillones viejos.
  • Ya todo estaba listo en aquel escondite secreto que construyeron Carson y su padre. III. EL TERROR ACECHA 1 Después de que ellos estuvieran en su escondite secreto, ya se hacía de noche y tenían que ir a sus casas. Pero empezando por ahí, con Dylan Ushiña. El terror se acercaba cada vez más a él. Era fin de semana y eso explica que a Dylan le gustaba escribir libros de terror por la noche en su computadora. Pero casi estaba pasando por un bloqueo creativo y no pensaba en qué nuevos terrores iba a escribir. Él siempre ha querido hacerse un excelente escritor de terror como Edgar Allan Poe o Lovecraft. Jack cogió su computadora y empezó a escribir en su habitación de forma rápida. Estaba escribiendo un libro llamado: Sangre infernal. Estaba ya por las últimas páginas de acabar el libro. Posible mente acabe hoy. Pensaba en su cabeza. La madre de Carolina sabía que ella era la que controlase ese monstruo. El monstruo ya iba a atacar a Carolina pero la madre de Carolina lo distrae y ella se apunta con la pistola en la cabeza y se dispara despidiéndose de su hija. Si la madre de Carolina muere, el monstruo desaparece en polvo. Y así fue. Carolina se quedó algo traumada por ver aquella escena perturbadora de su madre disparándose…Ya a pocas letras de acabar el libro, Dylan escucha algo detrás de él que venía de su armario de su colección de títeres viejos, usados y nuevos. Se acercó a ver lo que pasaba, miró a uno de sus muñecos más aterradores, Mr. Coaplín es como lo llamaba. El muñeco de ventrílocuo tenía un traje muy elegante, con un moño color rojo oscuro y una parte rota que parecía que se le estaba saliendo la pintura del rosto. Eran como rasgones. También tenía unos zapatos cafés. Dylan se le quedó viendo al muñeco por unos dos minutos. El muñeco movió su pie y lo pateó en la cara con una fuerza tremenda que Dylan cayó al piso con la nariz y boca sangrando. El muñeco saltó de su armario mientras que Dylan se levantaba con dolores a la silla del monitor. El muñeco era muy aterrador y demasiado violento para su altura. Este muñeco vomitó en sus propias manos para sacar tan solo una navaja haciéndose el gracioso. El muñeco armado con la navaja saltó y cortó la rodilla de Dylan y se estaba desangrando. Dylan estaba hincado sobre una rodilla mientras que se sobaba la otra. Dylan reaccionó rápido y pateó al muñeco antes de que él terminara muerto. El muñeco estaba en el suelo y Dylan no creía lo que veía. El muñeco se sentó y se empezó a reír alocadamente mientras que salía sangre de su boca y sus ojos se volvían rojos fuegos. Dylan reaccionó y volvió a patear al muñeco en la cara pero esta vez le destrozaba la cabeza y salía mucha sangre como si el muñeco fuera una persona. Dylan miró al frente de suyo y veía un viento negro y se dio cuenta que salía del mismo muñeco. Vio como el viento traspasaba la ventana de la habitación de Dylan. Dylan dio un paso atrás y regresó la mirada al muñeco. Él se imaginaba que el muñeco seguía ahí con la cara destrozada. Pero al verle al muñeco desapareció de la nada. Como si hubiera sido de su imaginación. Se vio la rodilla lastimada y no tenía ni un rasguño de la navaja. Se tocó la nariz y la boca y no tenía ni un rastro de sangre.
  • ¿Qué era esa cosa? ¿Me salió de mi imaginación?
  • Se preguntaba Dylan. Se sentó en su silla del computador y siguió escribiendo hasta que lo acabó. 2 En la casa de Carson, Carson dormía en su habitación. Pero algo extraño le despertó. Sintió que algo le goteaba del techo a la cara. Se tocó la cara para ver que era y vio que tan solo era una gota de tinte rojo y siguió durmiendo. Carson soñó algo aterrador. Soñó que él y sus amigos peleaban con una criatura junto a alguien extraño que llevaba un abrigo negro y grande, llevaba un sombrero, un chaleco elegante, tenía pelo largo que le llagaba hasta los hombros, tenía una barba con un bigote elegante, y llevaba un arma de fuego pero con tecnología avanzada. Se llamaba Frank River, o eso era lo que escuchó en su sueño varias veces. El tinte rojo seguía goteando a la cara de Carson y eso le molestaba un poco. Fue al taller de carpintería de su padre y cogió una tabla de madera delgada, cuatro clavos grandes y un martillo. Iba a poner eso para que no sigua goteando y él dormir a gusto. A la primera pidió ayuda a su padre pero él también estaba durmiendo con su esposa en la sala mientras que la televisión estaba prendida. En la habitación de Carson, Carson ya estaba poniendo la tabla pero cuando apenas se subió a la cama a poner la tabla, el techo se hizo un gran agujero mientras que el tinte rojo salía en montones, bañando a Carson. Carson se dio cuenta que el tinte rojo no olía a tinte, sino a sangre, el olor azufre y eso explicaba por qué se secaba rápido. Carson gritó muy fuerte que hizo que despertara a sus padres. Sus padres corrieron hacia la habitación de Carson para ver qué es lo que pasaba. Pero cuando entraron, no notaron nada grave. Solo Carson veía la sangre mientras estaba sentado apoyado en la pared a lado de su cama. Su madre se le acercó pero no notaba nada extraño. Carson agachó su cabeza cerrando los ojos pero cuando volvió a mirar a sus padres, la sangre había desaparecido de la nada pero vio que unos demonios estaban detrás de su padre en la cual, le rompieron la mandíbula y cayó al suelo sangrando. Carson volvió a gritar pero esta vez llorando. Cerró los ojos con una pálida tristeza de llanto. La madre no se daba cuenta aún pero Carson vio a su madre, y miró al mismo demonio que mató a su padre, detrás de su madre pero con un cuchillo en la mano. Este demonio apuñaló a su madre en la parte de arriba de la cabeza. Carson se quedó callado mientras lloraba y estaba muy pálido. Miró al suelo y cerró los ojos pensando que se quedó sin padres. Miró hacía delante, y su padres aparecieron otra vez y los que desaparecieron eran los demonios. Todo estaba en su cabeza y llegó a pensar que tenía un tumor cerebral o solamente era de su imaginación y nada más. Contó a sus padres de lo que vio y de lo que soñó pero no le creyeron nada de lo que decía. Lo único que lo creyeron fue lo del sueño pero lo demás, ya lo creían loco. Hasta ya quería llevarle al psiquiatra pero ver que es lo que le estaba pasando pero Carson mejor se quedó callado sin decir ni una sola palabra de lo ocurrido. 3 En la casa de Bertino y sus hermanos, Bertino y sus hermanos estaban haciendo deberes junto a Mateo Macanchi y a Geremy Zambrano, mientras que los padres de Bertino salieron al centro comercial a comprar algunas cosas y de paso, van por el mercado. Bertino y los demás acabaron por fin su tarea y la televisión estaba prendida dando una película clásica de terror. Bertino y sus hermanos empezaron a desempacar cosas. Pusieron una pintura que había comprado en la carretera, en un lugar cerca de la sala. La imagen de la pintura que compraron era aterradora. Tenía un niño con ojos negros o por lo menos era una sombra. El niño llevaba una camiseta celeste y unos bermudas azul marino y a lado del niño estaba una muñeca de ventrílocuo de pie y sostenía algo en las manos como si fuera un vaso con alambres. La muñeca tenía un vestido rosa y un cabello marrón. El niño y la muñeca estaban arrimados a una puerta de vidrio donde se puede ver que detrás está oscuro y también están unas manos apoyadas a las ventanas que en la cual, es lo que da bastante miedo. La pintura estaba en una caja junto a unos par de papeles como si fuera una advertencia. En la caja decía el título de la pintura. Se llamaba, Las manos lo resisten. Debajo de la caja en letras pequeñas decía: Pintura original. La pintura era original pero Bertino y sus hermanos no se lo creyeron por mucho ya que la pintura les costó un dólar. Tenía que haber costado mucho más como unos cien dólares siquiera. Abrieron la caja para ver si no era una especie de estafa pero no, la pintura si estaba ahí y con la firma del pintor y la fecha en que se terminó de pintarla. Iván colgó la pintura en la sala mientras que los otros leían los papeles. En los papeles decía: Historia de la pintura… Ellos sin más que decir, empezaron a leer la historia. En febrero de 2000, una pareja no identificada de California colocó un anuncio para la venta de pinturas surrealistas en la subasta en línea de eBay. La imagen muestra a un niño y una niña de pie frente a la puerta. Detrás de la puerta en la oscuridad, las manos de los niños hacen señas desde la nada. Pero algo está mal con la chica. Sus manos, como las de muñecas viejas de películas siniestras, sostienen un objeto con alambres sobresalientes. ¿Es esto un arma? Bill Stoneham – Las manos lo resisten (Bill Stoneham – Las manos lo resisten)

Pero la imagen no parecía gótica o algo aterradora y espeluznante. Las historias de los vendedores a continuación fueron mucho peores.

La pintura fue encontrada por ellos detrás de una vieja cervecería abandonada. Decidieron colgar la foto de dónde venían en la habitación de su hija de cuatro años. Una mañana, la hija se quejó de que los dos niños representados en la imagen «cobran vida» y «salen a la habitación a pasar la noche». Un padre alarmado, decidió poner una cámara de seguridad, que funcionaba, reaccionando a los movimientos, en La habitación para las próximas tres noches. La cámara trabajó varias veces y produjo fotografías, una de las cuales capturó a un niño «aparentemente saliendo de la imagen».

Las fotos, que también se publicaron en el sitio, están envueltas en un horror inexplicable y dan libertad de interpretación. Si usas tu imaginación, puedes ver cómo el niño emerge de la imagen, mientras que la muñeca, que recuerda a la famosa muñeca asesina Chuckie, está disparando armas extrañas al niño.

«Decidimos que la pintura debe venderse», escribe el vendedor y agrega que no serán responsables de ningún «evento que ocurra después de la venta».

Así que la pintura se unió a los recursos de la red de Internet. Al menos 30,000 personas hicieron clic en los enlaces a esta imagen de la página web, algunos incluso informaron sensaciones extrañas y aterradoras al ver esta imagen desde su computadora.

Uno de los que vieron la imagen dijo que había escuchado algo así como las lecturas de oración de un exorcista, y también sintió una explosión de aire caliente. Otro informó que se enfermó mientras miraba la foto y tuvo que quemar la hierba de salvia blanca para limpiar su casa después de eso. Otro usuario informó «nubosidad de la razón y pérdida de control».

El vendedor, por la rápida venta de la pintura, decidió retirarse y escribió: “No hay fantasmas ni poderes sobrenaturales en la imagen, es solo pintura. Y para la mayoría de lo que sucedió, hay una explicación: un juego de luces. «

Pero apenas ayudó a frenar a los verdaderos creyentes. Numerosos sitios web y chats están dedicados a la legendaria imagen fantasma de la subasta de eBay.

Pero nadie estaba tan impresionado con esta leyenda como Bill Stoneham, de 55 años, un artista que trabaja para Cyan Worlds, la compañía que creó los juegos de computadora más vendidos, Myst y Riven. Verás, Stoneham fue el tipo que escribió este trabajo hace 30 años.

La imagen fantasma de la subasta de eBay fue vendida por Stoneham Gallery en California en 1973, después de lo cual no la vio.

Al menos hasta agosto de 2001, cuando el dueño de la galería en Grand Rapids, Michigan, envió un correo electrónico a Stoneham. La galería compró la pintura de un par de California en eBay por 1200 USD, y el propietario la rastreó según la información de la etiqueta en la parte posterior de la pintura. Aconsejó a Stoneham que navegue por las páginas web que describen la leyenda de su pintura.

Stoneham estaba asustado.

«Esta es mi cara en la imagen», dijo. «Ahora, este es un sentimiento extraño».

Él era este niño pequeño en una imagen que pintó de una vieja y desvaída fotografía familiar que lo representaba con la niña de un pequeño vecino.

El artista comenzó a leer leyendas sobre fantasmas, supuestamente viviendo en la imagen. Su primer pensamiento fue: «¿Por qué colgaron una foto en la habitación del niño?»

Su segundo pensamiento fue: «Me pregunto cómo la imagen podría causar una reacción tan violenta». Más tarde, el artista dirá que utilizó deliberadamente el simbolismo junguiano y metafísico. La puerta está representada por las puertas de la oportunidad, y las manos representan «otras vidas».

Nunca tuvo la intención de hacer que la imagen fuera espeluznante, sobrenatural, o incluso crear ansiedad en las mentes de las personas. En cuanto al «arma», dijo que era una batería de celda seca con cables que se extendían desde arriba, como los que usaba de niño para crear modelos de aviones.

Desde entonces, la pintura ha cambiado su vida de muchas maneras. Esto lo inspiró a crear su propia página web y comenzar a escribir nuevamente, por primera vez en muchas décadas. Según él, la reacción violenta a su pintura, por supuesto, no es lo que esperaba, pero aun así es halagador para él.

Disfruta de su fama no solo en Internet. En la radio, varios programas de entrevistas en Dallas, Jesse Jessup en KDGE-FM, tienen la rúbrica «Essay Ghost Painting Competition». Un concurso en el que los oyentes envían ensayos sobre una pintura. Las participaciones de la competencia fueron juzgadas por «horror creativo», los ganadores fueron determinados en Halloween.

Stoneham fue uno de los jueces y leyó con alarma los registros encontrados accidentalmente.

«La gente era muy adicta, diciendo que el niño en la foto era abusado por los padres que bebían», dijo Stoneham. «Es como si estuvieras en coma, en una habitación estrecha, cuando todos intentan especular sobre tu vida».

Mientras tanto, llegó a un acuerdo con una galería para la venta de copias de The Hand resistirlo a $ 450 cada una o una versión más pequeña por $ 185.

Una vez se le preguntó a Stoneham si conocía los casos extraños asociados con las revisiones de la imagen: «Bueno», dijo Stoneham, pensando por un momento. ““ Cuando nos mudamos aquí desde mi antiguo departamento, el auto U-Haul se descompuso. «

  • Después de la historia que habían leído, no les importó lo que decía aquel papel. Pensaron que tan solo era una leyenda urbana y era para asustarles nada más. Cogieron el papel y lo botaron a la basura sin importar lo que decía. Mateo, Geremy, Iván y Adrián se sentaron a ver la película de terror que daba en la televisión. Bertino vio la pintura y se sintió un poco mal y fue al baño a vomitar. Se miró un rato en el espejo y vio que algo estaba detrás de la puerta del baño. Estaba un niño muy similar a la de la pintura. Bertino sin duda regresó a ver pero no había nada. Volvió a ver en el espejo, al niño lo veía más cerca pero seguía detrás de él. Regresó a ver nuevamente, igual no había nada. Miró nuevamente al espejo, y vio que el niño ya estaba enfrente de él, con unos ojos con sombra negra y unas pupilas rojas alucinantes y brillantes. El niño estaba detrás del espejo y sacó sus manos para arrastrarle a Bertino. Bertino se logró liberar de sus manos pero no por mucho tiempo ya que el piso estaba mojado y Bertino resbaló dándose un fuerte dolor. El niño desapareció del espejo, lo único que estaba eran sus manos que cada vez se alargaban más y más mientras que arrastraba a Bertino hasta meterle al espejo haciéndole desaparecer a él también.
  • Ya pasó treinta minutos de que Bertino no regresara del baño ¿Qué a deber pasado? Pensaba Iván y fue a verle al baño. No le encontró en el baño y fue a buscarle a todos los lugares de la casa. Por fin lo había encontrado pero no era el mismo. Iván se acercó a verle, pero cuando Bertino se volteó, se transformó en algo que no se pudo imaginar, en el mismo niño de la imagen. Éste atacó a Iván mientras que Mateo iba a la habitación al escuchar los gritos de Iván. Entró de prisa a la habitación y vio solamente al niño. Ya no estaba Bertino y tampoco Iván. Algo malo ha deber pasado. Pensaba Mateo. No veía a nadie más que al niño de la pintura. El niño se iba a lanzar sobre Mateo, pero Mateo fue más rápido y logró cerrar la puerta a tiempo, antes que el niño lo desapareciera a él también. El corazón de Mateo latía muy fuerte. Las luces empezaron a parpadear mientras que Mateo estaba asustado. Las luces se apagaron en la cual, Mateo no veía nada. Las luces se volvieron a prender y estaba la muñeca de la pintura queriendo atacar a Mateo. Mateo sale corriendo pero las manos del niño se le vuelven a estirar y cogió los pies del Mateo haciéndolo caer mientras que la muñeca y el niño se acercaban muy lentamente pero a su vez tele transportándose haciendo que Mateo también desaparezca. Adrián y Geremy escucharon también los gritos de Mateo y fueron a revisar que todo esté bien. O que por lo menos, no sea una broma de Bertino e Iván, Adrián ya los conocía bien y sabían que eran muy bromistas. Adrián y Geremy se dividieron para buscarlos. Adrián en el baño que era el lugar donde fue Bertino, y Geremy fue al cuarto de Iván. Adrián al entrar al baño, no notó nada extraño. Revisó dentro de la bañera por si acaso estuviera ahí escondido y listo para darles un buen susto. Al ver que no estaba ahí, iba a salir del baño, pero se cerró la puerta de repente, después volvió a parpadear la luz, Adrián vio en el espejo a Bertino en la cual quiso meterle también al espejo y con la ayuda del niño lograron meterle a Adrián.
  • Geremy buscó a Iván en el armario pero no había nada. Buscó debajo de la cama y solo estaba el niño. Le hizo caer a Geremy pero Geremy le pateó en la cara al niño. Todo se volvió oscuro y estaba lleno de tinieblas alrededor de la casa. En la oscuridad salió unos dos círculos blancos pero cuando vio a Geremy, se pusieron rojos. Geremy se asustó pero en ese momento se salvó por lo que los padres entraron. Todo desapareció, las tinieblas, la oscuridad, incluso los dos ojos blancos que se hicieron rojos. Bertino y Adrián apareció en el baño e Iván en el cuarto. No recordaban qué es lo que había pasado. Solo Geremy sabía que pasó pero decidió no contarles porque también sabía que no les iban a creer. IV. UN NUEVO TERROR Ese terror que tuvieron aquel grupo, no sabían por qué lo estaban teniendo y cada uno estaba aterrado. Geremy estaba advirtiéndoles a Bertino y sus hermanos que votaran la pintura sin decirles por qué. Mientras que los demás no sabían qué es lo que les está pasando y por qué todos tuvieron esa alucinación de verle al demonio de la ciudad Madrid, Espavento. En el fin de semana, el grupo de amigos se reunieron en el bibliotecario principal de la ciudad. Iban a ir a buscar nuevamente el álbum de fotos de la ciudad. Iban a hacer la misma investigación que Bertino hizo el día en que el monstruo se comía a Matt en la alcantarilla. Buscaron el libro de fotos y se demoraron dos horas en encontrarlo. Buscaron el libro en el pasillo de libros antiguos. Cuando por fin lo encontraron, lo llevaron juntos a una mesa del lugar. El álbun pesaba más de tres kilos y era pesada para una solo niño. Abrieron el libro y vieron cosas peores de lo que Bertino había visto. Lo que estaba en ese libro era inexplicable. Había fotos de personas muertas. Las personas de las fotos estaban desmembradas y es que en realidad, parecía fotos de canibalismo o sacadas de una película de terror de Alfred Hitchcook. Realmente era aterrador. Aparte de eso había niños sin cabezas.

Carson cerró el libro con fuerza. Este grupo fue a la casa de Carson para seguir viendo el álbum. Al llegar a la casa de Carson. El grupo enceguida entró a la habitación de Carson. Abrieron el libro y siguieron viendo. Las fotos de algunos niños mutilados, estaban sin cabeza, sin piernas, sin brazos. Lo único que estaba era el torzo pero la mayoría estaban sin corazón y sin pulmones. A veces estaba la cabeza pero sin cuerpo y la mayoría de las cabezas estaban sin ojos. También había algo parecido a ojos humanos pero no se les distinguía porque estaban aplastados. Daba muchísimo miedo. Había mucha sangre. A demás de eso, había animales muertos como palomas, gallinas, conejos, gatos, perros y cachorros. Al parecer, la criatura Espavento ya existía desde hace mucho tiempo.

Carson y el grupo ya le dió asco de seguir viendo las fotografías. Estaba con ganas de vomitar y hasta de llorar por lo terrible que eran las fotografías y tuvieron que cerrar el libro.

En el armario de Carson se escuchó algo, como si se hubiera caído alguna cosa. Carson dijo que eran sus zapatos, y se caían a cada rato. Carson abrió su armario para que vean que era uno de sus zapatos. Al abrir, no se había caído nada de zapatos. Solo se había caído una caja de palanca. Lo curioso era que cayó de pie. Carson dió tres pasos atrás porque nunca había visto la caja. La palanca de la caja empezó a dar vueltas hasta que termine la canción. Cuando terminó la canción, La criatura salió de la caja y con una mano, alzó ahorcando a Bertino pero Carson actuó rápido y cojió una roca y golpeó a Espavento. Pero la roca al parecer no le hizo nada, Carson le lanzó la roca al ojo dejandole con un rostro aterrador. Espavento se iba a comer la cabeza de Bertino pero Carson volvió a cojer la roca y se lo lanzó directamente a la boca y Espavento desapareció de la nada. El grupo estaba aterrorizado y sobre todo Bertino que casi muere.

Los papás de Carson no estaban ahí y su hermano, Ryson que le gustaba la música rock y era un admirador del diablo, llegó a la casa con unos dos amigo. Nicolás y Luís. Rysn traía una tabla en las manos. Parecía que era un tablero, un juego de mesa. Ryson entró a la habitación de Carson diciéndole que va a estar en el ático de la casa.

Ryson se va al ático cada sábado con sus dos amigos. Era muy extraño porque siempre iba con aquel tablero.

Carson tenía cuatro mascotas, tres conejos y un perro.

Los conejos estaban en el baño mientras que el perro estaba entre las escaleras del ático.

Pasó casi treinta minutos de lo que Ryson subió al ático y a Carson con el grupo le dio curiosidad de qué estaban hciendo. Pensaron que estaban jugado Ajedrez o damas chinas mientras que otros pensaron que estaban jugando Parchís o Monopolio. El grupo subió al ático tan disimuladamente. Carson sabía que ahí había un escondite en el ático y también tenía una ventana. Se escondieron allí mientras que ellos estaban jugando. La habitación estaba muy oscura, apenas se les distinguía a las personas y eso que en el ático sí había luz. Ryson y sus dos amigos encendieron unas velas. Se pusieron en pose de meditar y el tablero estaba en medio. En el tablero decía, Ouija. Carson se asustó al ver a su hermano jugar la ouija y eso explicaba por qué en la casa pasaban espíritus negros aunque Carson pensaba que salía de su imaginación.

Ryson y sus amigos empezaron a levitar en el aire mientras que el grupo no dejaba de ver durante dos minutos. El grupo salió del ático temblando, como si hubieran salido del cine viendo una película de terror.

Carson iba ir al baño. Al entrar, vio que su perro se comió a los tres conejos. Los ojos del perro se pusieron rojos. Estaban los riñones ahí tirados en el piso y la sangre estaba por todos lados. Los demás se les acercaron a Carson y se asustaron junto con él. Se le veía clarito los ojos rojos del perro. Más bien eran las pupilas del perro. Los ojos del perro se le pusieron normales y luego se les puso blanco y murió. Mientras que Carson estaba con ganas de vomitar.

El grupo salió de la casa de Carson y se dirigieron al escondite secreto. Carson dijo que sabía que el demonio con el que se encontraron en su habitación y el que posiblemente poseyó a su perro.

  • Sé algo…sé que el monstruo que se nos apareció se llamaba Espavento.
  • ¿Espavento? ¿Qué significa?-preguntó Geremy.
  • Investigué lo que significaba y me salía que era una palabra italiana que significa atemorizante o miedoso-respondió Carson.

Desde el fondo del escondite secreto que era un lugar oscuro y atemorizante. No había luz y había muchos charcos de fango, se apareció unos ojos muy redondos blancos y con pupilas grandes negras.

  • Vaya Carson, al parecer sí sabes algo de mí-exclamó aquel cosa que estaba en la oscuridad.
  • ¿Quién eres?-preguntó Bertino.
  • Soy lo que dijo Carson, y al parecer ya saben cómo me llamo. SOY…ESPAVENTO
  • ¿Qué es lo que quieres?-preguntó Iván.
  • Quiero comerme sus cuerpos. Ustedes saben solamente cómo me llamo pero yo sé todo de ustedes.

La cosa que se les había aparecido entre la oscuridad se les empezó a acercar corriendo y haciendo sonar el piso y se acercó con la intención de atacarles o tal vez con la atención de asustar. La cosa estaba con una forma muy aterradora. Tenía brazos verdes y con garras negras, tenía pies de león y cuerpo de águila. Sobre todo tenía dos caras a la mitad del rostro. A la izquierda de la cara tenía un rostro negro con ojos blancos con pupilas grandes y negras, y a la derecha tenía la cara de un niño. Era demasiado aterrador.

El monstruo era algo gigante, Carson coge un hacha que tenía por ahí y golpea a la pierna del monstruo haciendo que caigan mientras que el grupo cerraba los ojos del miedo. Cuando abrieron los ojos no había nada pero seguía ahí los dos ojos blancos que daban mucho terror. Luego se alumbraron unos dos ojos más pero un poco pequeños y estaban a los pies de la criatura aquella en la oscuridad. Esos dos ojos pequeños se les acercaron. Resultó ser Matt Carvelín todo destruido, con las tripas sobre salientes y estaba caminando en cuatro patas. Éste saltó sobre ellos pero Carson actuó rápido y cogió un palo de metal con un pincho muy fino y puntiagudo. Matt saltó abriendo la boca como queriéndoles comer pero Carson le puso el palo de metal en la boca atravesándolo. El cuerpo de Matt se empezó a caer como Espavento lo había matado y comido mientras que Matt flotaba en el aire. Se le cayó primero la cabeza, luego el corazón con los pulmones, después el resto del cuerpo dejando solo los brazos pero igual se cayeron. El grupo estaban temblando del miedo que tenían. Luego la criatura se les vuelve a acercar corriendo y ellos cerraron nuevamente los ojos pero cuando los abrieron, el monstruo ya no estaba. Fueron arriba hacia el bosque y vieron que en uno de los árboles de allí estaba en una hoja de papel que decía:

Matt Carvelín, DESAPARECIDO. Se podría decir que en el papel estaba una foto de Matt.

El grupo fue a la casa de Bertino y prendieron la televisión para ver en las noticias algo que no se podían esperar. Encontraron en una alcantarilla unos tres dedos y un pie que aparentemente eran de Matt Carvelí y efectivamente, eran de él porque le hicieron una prueba de ADN a uno de los tres dedos. El grupo se quedó sorprendido por ver los tres dedos y un pie de Matt. Era un terror totalmente inesperado. Pero la policía seguía buscando el cuerpo pero jamás lo encontraron ya que Espavento se lo comió y el grupo si sabía qué es lo que le había pasado al resto del cuerpo pero no se lo dijo a la policía porque luego les ponen a ellos como sospechosos principales a pesar de que eran menores de edad y en vez de ellos de ir a la cárcel, tendrían que ir sus padres y eso es lo que ellos no querían así que se quedaron callados para no alertar mucho a la policía y correr ese riesgo.

V. DE VIDA O MUERTE (1)

De noche, en el centro comercial de Madrid, William Robinson y su mejor amigo, Carter Zambrano estaban ya por de cerrar su tienda. Carter decide irse dejando a William solo. Estaba arreglando algunas cosas antes de irse pero escucha algunos sonidos por ahí. William da la vuelta y mira a Carter con ojos rojos y con un cuchillo en la mano. Carter empieza a atacar a William pero William era más fuerte y le logra patear y salir corriendo. William corría mientras Carter lo seguía con el cuchillo afilado y ensangrentado en la mano. William se había dado cuenta de que Carter ya había matado a más personas. Carter logra apuñalar a William por la espalda haciendo que William caiga y Carter le meta el cuchillo por el ojo y luego darle varios golpes en la cabeza hasta abrirle sacándole el cerebro ensangrentado y luego aplastárselo. Un policía que estaba ahí le disparó desde lejos hacia la cabeza. El policía era Alán Hornest, el papá de Jack Hornest. Así fue esa aterradora noche en el centro comercial principal de Alikto Flanko.
Al día siguiente; domingo, el grupo se vuelve a reunir y leyeron un periódico que decía: Sobreviviente de la masacre del campamento “luz de luna” 2000. En la foto que estaba en el periódico estaba el chico sobreviviente y atrás estaba una cabaña del campamento y atrás de esa cabaña se notaba algo raro, algo tan aterrador. Era Espavento escondiéndose entre las plantas. El sobreviviente se llamaba William Robinson, el mismo al que le mataron la noche anterior. El grupo encendió la televisión y se enteraron en las noticias que William Robinson había perdido la vida la noche anterior junto al responsable del asesinato. El grupo quería preguntarle cómo había sobrevivido.

Tiempo después, el grupo se había enterado que había otro sobreviviente más. Se llamaba Frank River. Buscaron su número de teléfonoy le llamaron para que les cuente la historia y de cómo había sobrevivido.

  • Aló buenas tardes-dijo Frank
  • Buenas tardes, ¿usted es Frank River-preguntó y respondió Carson.
  • ¿Cómo saben eso?-preguntó Frank.
  • Suena como si fuera niño y es que en realidad si lo soy pero solamente quiero que nos cuente la historia de la masacre del campamento… ¿Usted estuvo allí? ¿No es cierto?
  • ¿Cómo saben eso?
  • Leímos un periódico del año 2000
  • ¿En qué ciudad o país están?
  • Estamos en Madrid
  • Está bien ya voy allá, queda cerca por el país en dónde vivo
  • Sí ¿En dónde está usted?
  • Yo estoy en Roma, Italia. Llegaré aproximadamente en una semana ya que voy en barco.
  • ¿Por qué no por avión?
  • Porque me sale muy caro.
  • Está bien pero llegue pronto para que nos cuente.
  • ¿Y por qué con esa impaciencia?
  • Es que sabe algo. Espavento volvió
  • ¿Quién es Espavento?
  • Se acuerda que usted estuvo en la masacre del campamento escolar.
  • Sí, sí me acuerdo ¿Por qué?
  • El monstruo que estuvo allí, en el campamento regresó.
  • Está bien, tocara enfrentarnos a él.
  • ¿Enfrentarnos?
  • Sí, yo les ayudo-Frank River cerró el teléfono misteriosamente. Dejando asustado al grupo.

Aquel grupo estaba en la casa de Bertino. Bertino los había invitado a bajar al sótano. Carson se sentó en una de las sillas que estaban a lado de un rincón. La silla en donde estaba sentado Carson se rompió una pata haciendo que Carson caiga. Carson por sostenerse, hace un agujero en la pared. Bertino se da cuenta que había un pasadizo. Él coge un hacha oxidada que estaba ahí y empieza a golpear varias veces la pared hasta que quede un hueco grande para poder entrar. Cuando entraron, era un lugar muy grande. Por donde estaban había una puerta donde Carson la abrió y vieron algo aterrador. Era algo muy similar a un cerebro. De hecho, era un cerebro pero gigante. Ese cerebro se llamaba el cerebro del diablo. Carson lo tocó y tuvo algo muy similar a la de una visión. En la visión estaba un chico que estuvo viendo la pelea de unos guerreros de época peleando con un monstruo muy aterrador. Era Espavento. Espavento estaba en su forma infernal. Estaba con cuerpo de león, su rostro era totalmente negro y con unos ojos rojos pequeños. También tenía unos dientes muy afilados y unos cuernos demoniacos que le salían por la frente. Era una criatura muy gigante y horrible. Muchas personas murieron esa noche aterradora y Espavento cogió a los guerreros y se los llevó. Nadie sabe en dónde están los cuerpos. En la visión también vio que Espavento llegó a la tierra abriéndose las puertas del inframundo saliendo junto al perro de tres cabezas y con cola de serpiente pero ese perro si regresó al inframundo en cambió, Espavento se quedó ahí ya que tenía demasiada hambre. Carson por fin despertó de la visión pero despertó en el aire. Cayó al suelo y no sabía qué es lo que había pasado. El lugar se empezó a caer junto con chorros de sangre y el grupo tuvo que salir de aquel lugar ya que se bañaron de sangre y posiblemente podían haber muerto si no salían de ahí. El grupo salió lanzándose al piso. Vieron al piso y cuando regresaron a ver, el hueco se había cerrado. Se miraron entre ellos y no estaban de sangre. Era muy extraño para ellos ya que no sabían qué es lo que estaba pasando. Una semana después, Frank River ya había llegado a Madrid junto con su amigo, Jeffrey. Fueron al lugar donde estaban estos chicos. Geremy los llevó a su casa para que los cuente la historia. Frank River se sentó en una silla de comedor y les empezó a contar. Los padres de Geremy no estaban, se habían ido a la casa de la abuela de Geremy ya que se había caído de las escaleras.

  • Señor Frank River, cuéntenos la historia
  • Está bien, se los voy a contar.

Frank River les contó la historia cómo es que sucedió en ese momento. Fue en el año 2000, estaban en el campamento y en ese tiempo, Frank River tenía dieciséis años. Frank había visto correr a una chica que estaba siendo perseguida por otros chicos diciéndole que ella es una estúpida sin ningún motivo alguno. Es por molestar. A esta chica le amarran en un lugar y como de castigo por haber nacido como dicen ellos, le lanzan agua hirviendo y después le cortan en los brazos con una navaja para luego poner alcohol en las heridas. Era muy terrible lo que ellos estaban haciendo. Frank River se le acerca y les habla luego le cura las heridas a la chica. La chica se llama Wendy Hornest y es la tía de Jack. De noche, el campamento estaba durmiendo, casi todos. Los que no dormían eran los mismos chicos que molestaban a Wendy. Pero Wendy también estaba despierta junta a Frank. Estaban despiertos para ver qué es lo que hacían aquellos chicos bravucones. Esos chicos encontraron un pasadizo secreto como en la casa de Bertino. Este pasadizo secreto estaba cerca del pozo en el campamento. A los chicos se les ocurre entrar al lugar. Encontraron algunas cosas muy aterradoras como el cerebro del diablo. Es decir que el campamento fue en la casa de Bertino. A uno de estos chicos se le ocurrió poner la mano en el cerebro del diablo haciendo que tenga él también una visión. Cuando acabó la visión, del cerebro del diablo salió Espavento. Bill Turthon es un chico que también estaba ahí era poseído por un alama doble de Espavento. En el lugar Mató a un chico y a una chica estrangulándoles y sacándoles el corazón junto con el cerebro. Bill salió del lugar ensangrentado. Espavento también anda por allí matando a más personas. La primera persona que mató a Espavento fue a Carl Dosson. Carl Dosson es un niño de catorce años que estaba buscando algo de comer pero Espavento se lo comió a él. Después en ese momento en qué un chico escuchó los gritos de Carl, entró a la habitación y después de ver al monstruo con la cabeza de Carl, el chico vomito-vaya, ahí se me fue hasta el almuerzo- dijo aquel chico pero comprendió que ese fue la última broma que hizo ya que el chico echó a correr pero Bill cogió un martillo doble grande y con eso le voló la cabeza de aquel chico. Frank River se dio cuenta de lo que estaba pasando y fue a esconderse junto a Wendy. Las demás personas estaban muriendo muy sádicamente incluyendo niños. Todo el campamento estaba muriendo. Estaba amaneciendo y Frank River igual Wendy pero a ella mientras parecía que se salvó, Bill le había apuñalado y cortado la cabeza. Era sádico pero el policía que era mismo el padre de Jack le logró disparar a Bill matándolo instantáneamente. Frank River dijo que él sobrevivió peleando con Bill y Espavento junto a Wendy y que casi muere. Frank River se reveló como un asesino de demonios ya que se ha enfrentado a demonios peores que Espavento. Un mes después, ya eran vacaciones y Frank les había invitado a que vayan con él a Navalcarnero porque Espavento se le había aparecido para decirle que si van a pelear con él, tiene que ser en Navalcarnero ya que en ese lugar se asomó por primera vez Espavento. El grupo sin pensarlo dos veces, se fueron y obviamente con permiso de los padres. Estos padres si les dieron permiso pensando que solamente se iban a la playa de vacaciones o que solo se iban a la piscina. Frank River preparó todo en el barco para ya irse. El viaje iba a ser dos o tres días hasta llegar a Navalcarnero. Ya en el barco Frank River y el grupo de amigos estaban viendo un libro que se había aparecido en el barco de la nada. En el libro decía la debilidad de Espavento, Espavento tiene un mico-chip en la parte de atrás de la cabeza pero él no es un robot, es un demonio y cuando un demonio viene a la tierra, viene con un micro-chip diciendo el tiempo que se quedará el demonio y si se le dispara en el micro-chip, éste se va a alterar regresando al infierno. Espavento se les asomó nuevamente para decirles que la pelea va a ser en su casa, en una cueva aterradora y oscura. Era entre las cuevas del Navalcarnero. Pasaron dos días y llegaron a Navalcarnero pero tenían que ir a la cueva en donde podía ser un viaje demasiado largo y podía hasta durar cuatro horas en ir a la cueva de Navalcarnero. Por fin llegaron a la cueva entraron hasta el fondo de la cueva y se empezaron a prender unas luces rojas haciendo un camino para que ellos lo sigan. Carson pensaba que era una trampa pero todavía no les hacía nada. Daba un poco de miedo en realidad. Frank River estaba con Jeffrey en aquel lugar aterrador. Frank River estaba armado con un arma de fuego llamado, Súper potente. Espavento hizo su aparición frente a ellos y estaba en forma como llegó a la tierra. Con cuerpo de león y su rostro en modo infernal. Rostro negro con ojos rojos pequeños y dientes afilados. El grupo de chicos estaba con un palo de fierro en manos y solo Frank con el arma.

  • Oh, vengan acá, perras-dijo Espavento. Frank River se asustó por lo inmenso que era Espavento.
  • No me quejo y acepto…PERRA-exclamó Frank.
  • Quieren morir ¿cierto?
  • La muerte para mi es una completa mierda.
  • Entonces te invito a que mueras junto a tus amigos maricas.
  • Ya te quiero ver-discutió Frank. Espavento se acercó muy rápido y empezaron a pelear.

Espavento lanzaba golpes totalmente mortales hacia el suelo queriendo aplastarlos pero Frank River los esquivaba fácilmente. Jeffrey decidió alejarse por si acaso le den a él. Espavento logró hacer caer a Frank River dejando su arma a un paso de él. Espavento decía que todo estaba perdido pero lo que Espavento no se dio cuenta es que el grupo estaba detrás de él y con los palos de fierro. Frank River les hizo una señal al grupo para que les apuñalara en la parte de atrás de la pierna de león para que Espavento se dé la vuelta. El grupo le apuñala en la pierna de león de Espavento y Espavento se dio la vuelta quedando los palos de fierro en atascados en la pierna de Espavento. Espavento se les acercaba con la intención de atacarles. Frank River se portó ágil y rápido y cogió el arma y disparó al micro-chip que tenía Espavento haciendo que Espavento se dé nuevamente la vuelta empujando a uno del grupo que era Adrián. Espavento corrió hacia Frank River saltando pero mientras estaba en el aire. Espavento desapareció haciendo polvo negro. El día se iluminó ya que Espavento murió pero posiblemente vuelva en diez años. Frank River les fue dejando a los chicos en Madrid que es en donde empezó todo y Frank River se regresa a Roma junto a Jeffrey.

VI. LA LLEGADA (2020)

El mismo terror que empezaría nuevamente en estos nuevos diez años y que el grupo de amigos que se enfrentaron a Espavento junto con Frank River, estos pensaron que ese miedo y parte de su vida ya había acabado por fin. Pero lo que no se esperaban fue que tuvieran un nuevo y gran terror durante sus vacaciones. El grupo ya eran personas de veintidós a veinticuatro años. Aquel grupo que son los llamados “inservibles” se van de vacaciones a una cabaña en lo profundo del bosque. Se iban de vacación en aquella cabaña porque Carson había comprado la propiedad a un amigo muy lejano y que casi no se hablaba ni se veía con Carson. Carson y los demás ya estaban listos para irse, excepto Bertino. Bertino era el único que no estaba tan listo, solo le faltaba peinarse y alistar unas cosas como ropa. Los demás estaban en la sala mientras que Bertino en su habitación. El grupo tenía unas dos nuevas amigas, Martina y Carolina. Bertino ya había bajado diciendo que ya está listo solamente empacó ropa y unos libros. Salieron todos de la casa de Bertino y fueron directamente a la buseta de Carson a ir a ver a otro amigo que era Jason. Pero Jason ya estaba llegando a la casa de Bertino. Traía una maleta donde llevaba ropa, libros y una laptop.

–Jason ¿qué es lo que lleváis ahí? –Preguntó Carson –Nada solamente llevo ropa, libros y una laptop–Respondió – ¿Para qué una laptop? –volvió a preguntar Carson. –Pues soy un escritor, necesito escribir–respondió. Después, el grupo se emocionó, pues ya estaban por irse a la cabaña. Algunos del grupo aprovecharon para leer algún que otro libro mientras que otros jugaban en el celular. Jason escribía un libro de ciencia ficción y de aventuras.

Ya pasaron dos horas del viaje y se les estaba gastando la gasolina de la buseta. Carson fue conduciendo a la gasolinera más cercana que pudo haber. La gasolinera parecía que estaba vacía. Martina se acercó a ver si había alguien pero no vio a nadie. Iván también se acercó a ver pero Iván sí que se llevó un gran susto. Estaba viendo dentro de la gasolinera en cuanto un señor se le aparece por detrás de Iván. El señor era una persona mayor, era demasiado viejo, tenía arrugas por toda la cara, era calvo y tenía una quemadura en el lado izquierdo del rostro. Este señor les dijo: váyanse, este lugar cerrado

–Solo queremos gasolina, le pagaré en efectivo–dijo Carson – ¿Cuánto? –preguntó aquel viejo. –Mil dólares en efectivo–respondió Carson. El señor aceptó y le llenó de gasolina a la buseta. Pero de repente, el señor se comportó medio extraño. Había insultado a la novia de Carson que es Carolina. –Verá señor… ¿sabía qué su novia es una PERRA? Después de lo que le había dicho, Carson iba a reaccionar golpeándole pero Bertino lo detuvo. Carson se tranquilizó y cogió los diez billetes de cien dólares envueltos y le pagó al señor pero Carson había lanzado los billetes al pecho del señor haciendo que esos billetes caigan al piso. El señor escupió en esos billetes mientras que Bertino veía.

–Bueno señor, posiblemente un tren venga por aquí ya que en esta gasolinera hay rieles y entonces, es será…eso será muy hermoso–dijo Bertino mientras se subía a la buseta. –…IDIOTA–exclamó Bertino. Ya estaban cerca de llegar a la cabaña y Carson seguía conduciendo. Pasaron por un túnel en la cual los llevaría directamente a la cabaña. Un pájaro que estaba por ahí volando cerca del túnel (pero no dentro), intentó pasar al bosque pero este se chocó con algo radioactivo, como una pared muriendo instantáneamente. Carson entró a la cabaña pero no había nadie dentro- Había mucha basura, unas sillas que algunas estaban rotas, Había unos sillones que estaban en buen estado, había u comedor y un mueble con una mancha de sangre. Ellos nos creían que era sangre, pudo haber sido cualquier qué otra cosa como pintura o tinte, o tal vez salsa de tomate ya seca o, por lo menos eso decía Carson. Según él, dijo que no hay nada con qué preocuparse. Fueron a las habitaciones y estaban eligiendo su habitación.

En la habitación de Jason, aparte de tener una cama y una mesita a lado, en uno de los cajones que tenía esa mesita tenía un arma de fuego, una pistola. Jason creyó que era de juguete al verla así nomás. Pero cuando lo cogió, vio que no era de juguete sino de verdad. Jason reaccionó y tiró la pistola nuevamente al cajón. En la habitación de Bertino y sus hermanos, había una pintura muy sádica y psicótica. La pintura se trataba de la edad media y unas personas estaban torturando y masacrando a un hombre desnudo en medio del bosque. Bertino se dio cuenta de que en la foto había una sombre negra escondiéndose entre los arbustos pero Bertino no le dio mucha importancia. En las demás habitaciones no había nada más pero lo que si tenían era una mancha de sangre en el piso y en las paredes. El grupo entró a la buseta y cogió sus maletas y empezaron a desempacar. Carson fue a estacionar la buseta y cogió un poco de comida que dejaron ahí dentro. Adrián se dio cuenta de que había un lago. Se quitó su ropa quedándose solamente en bóxer y fue a lanzarse. Los otros también se quitaron la ropa y fueron a lanzarse pero el único que no se lanzó era Bertino ya que él no sabía nadar. Jamás lo enseñaron. Lo único que hizo Bertino fue coger todas las toallas y las sandalias de los otros. Bertino se sentó a la orilla del lago solamente para mojarse los pies.

VII. VERDAD O RETO

En ese mismo día por la noche, el grupo estaba celebrando que ya llevan diez años siendo mejores amigos y lo celebraban tomando unas cuantas cervezas. Iván preguntó que si querían jugar verdad o reto. Los demás del grupo aceptaron y empezaron a jugar comenzando primero por Bertino. –Bertino… ¿Verdad o Reto?–preguntó Iván. –Verdad…–exclamó muy seguro. –Está bien…Dime, ¿Por qué no tienes novia? – ¿No pudo haber sido otra pregunta? –No…Responde. –Pues porque nadie me llama la atención y también porque no le gusto a nadie. Después de Bertino, siguieron por Carson. – ¿Verdad o Reto? –volvió a preguntar Iván. –. Verdad – ¿Por qué le tienes miedo a casi todo? –Tengo miedo a casi todo desde que nos enfrentamos a Espavento. Mi vida quedó con traumas. –Amigo, todos quedamos con ese mismo trauma desde pequeños. –Sí, lo sé. –Yo casi no me acuerdo de lo que había pasado ese día. –Ni yo…–exclamó Carson. Seguía con el juego pero esta vez preguntó a Martina. – ¿Verdad o reto? –Pido reto.

–No, no lo hagas–exclamó Bertino. – ¿Por qué no?

–Pues te va a retar algo que tú no quieras y vas a cambiar a verdad.

–No, si quiero reto–afirmó Martina. Iván pensó en qué reto le pondría pero justamente, ahí se abrió la puerta del sótano, extrañamente. Pensaron que era tan solamente el viento. –Martina…te reto a que bajes al sótano. –Martina se preparó para bajar, incluso cogió una linterna para poder ver qué hay en el sótano. Martina bajó aquel sótano oscuro y se tenía que quedar ahí treinta minutos. Martina comenzó a ver qué es lo que había ahí abajo. Vio un libro que decía: Daemones. Era una palabra en latín en la cual, Martina no sabía lo que significaba. Unos murciélagos que estaban ahí asustaron a Martina y ella pidió ayuda. Los otros bajaron y al ver que solo se había asustado por unos simples murciélagos, Iván pidió penitencia. Que se quitara la ropa. Martina le quedó viendo con ojos enojados pero luego regresó a ver a otro lado.

–Encontré este libro, pero tiene un idioma que no entiendo. –Presta…yo sé de idiomas–dijo Dylan. –Esto es latín. – ¿Qué significa? –preguntó Geremy. –Significa “Demonios” Martina le arranchó el libro y abrió en una página pero al abrir, sintieron un viento frío y oscuro. No les dio mucha importancia. Martina empezaría a leer lo que vendría a ser palabras en latín en una sola página. – Mortuna carne…et monstra imaginaria. Dylan volvió a traducir lo que decía. – Carne muerta y monstruos imaginarios… ¿Qué dices? – No lo sé, está escrito aquí en el libro. Dylan le quitó el libro y lo leyó. Parecía que era una broma. No le importó lo que decía pero Geremy sentía algo que los demás no sentían. Algo tan profundo que lo aterraba. No le dio mucha importancia ya que pensó que tan solo era su imaginación o que le había cogido mal aire. El grupo subió al piso normal saliendo del sótano. Dylan tenía aún el libro en las manos. Ya era muy de noche y se tenían que ir a dormir. Pero antes de irse a dormir, Iván y Martina decidieron salir a caminar en el bosque a oscuras. Los demás si se fueron a dormir excepto Carson y Carolina. Estaban en el sillón leyendo. Iván caminaba con Martina. Estos dos estaban seriamente enamorados. Carolina le tiró a Iván al suelo y ella se puso encima. Iván y Martina escucharon algo en lo profundo del bosque. Los dos se pararon e Iván fue a ver lo que estaba pasando. Pensaron que fueron uno de sus amigos. Un minuto después de que Iván fuera a ver qué es lo que estaba pasando, Iván regresó corriendo y muy asustado. Una cosa tan horrorosa lo seguía. Era un monstruo con un hacha en manos. Éste le lanzó el hacha a Iván pero el vio que el hacha estaba detrás de él, reaccionó rápido y esquivó el golpe, pero en cambio le llegó a la cabeza de Martina matándola instantáneamente. Iván corrió a la cabaña mientras que el monstruo lo veía correr. El monstruo cortó algunas extremidades de Martina incluyendo su cabeza. Una vez que Iván ya llegase a la cabaña, contó todo a sus amigos. La sangre de Martina le había llegado a la cara de Iván y estaba muy asustado preguntándose, qué es lo que había pasado. Iván explicó que Martina estaba muerta. De repente. La puerta se abrió. Se vio que el mismo monstruo que mató a Martina estaba ahí alumbrando con sus dos ojos blancos. Lanzó la cabeza de Martina al piso y luego se rió. El monstruo se alejó dirigiéndose hacia la izquierda. Carson corrió a cerrar la puerta asustado. No sabían nada de lo que estaba pasando. A parte de ese monstruo, también estaba algo muy similar a unos zombis. Estaban con la ropa rota, y tenían sangre por casi toda la cara. Estos zombis ya estaban atravesando las ventanas y ya casi derribaban la puerta. El grupo fue a esconderse en el sótano en lo cual, pensaron que era muy seguro esconderse abajo. Ya en el sótano, Bertino prende su linterna. Alumbró a todos lados. Dylan sacó el libro y lo volvieron a ver. Buscaron algo que les podría ayudar. No encontraron nada. Las páginas estaban completamente vacías. Solo dos páginas estaban con un escrito extraño en la cual, parecía que era de varios idiomas. Pero ellos no sabían cómo es que Martina había abierto el libro en una página que estaba escrita y no en una en blanco. Era muy extraño que cayese justo en la escrita. Bertino volvió alumbrar a las mismas direcciones porque había setido un escalofrío y un sonido a lado de él. Pero al alumbrar, vio que allí estaban algunas armas como un hacha, un cuchillo, un palo y un rifle. Algunos no querían salir y tratar de enfrentarse aquellos monstruos y si lo hacían, terminarían muriendo. Eso sí les quedaría bien claro. En cambio, otros querían hacer lo contrario. Querían salir y enfrentarse a esos tipos monstruos. Creían que si estaban listos y que si iban a poder. O es eso lo que pensaban. Carson, Bertino y Dylan salieron con las armas en manos. Carson levaba el hacha, Bertino el rifle y Dylan el cuchillo. Mientras que los otros esperaban en el sótano. Los del sótano subieron y despertaron a los demás. Al inicio no les creyeron. Geremy no les creyó y salió para que vean que no está pasando nada. Dejó la puerta para que vean pero en cuanto salió. El mismo monstruo que había matado a Martina, también asesinó a Geremy de una forma tan brusca y violenta. Le sacó los ojos. Los tres del grupo que habían salido, miraban a todos lados buscando monstruos y zombis. Se encontraron una gran cantidad de muertos que al paso, empezaron a pararse y seguirlos. Estos tres no eran tan estúpidos como parecían. Se lanzaron a atacar a los zombis. Cortaron las cabezas de los muertos y parecía que ya habían acabado pero tan solo era el inicio. Se pararon por diez segundos sobre la hierba. Y durante esos diez segundos, la tierra empezaría a crecer y de lo verde pasó a negro. Los tres chicos no tuvieron más opción que saltar. La tierra que había crecido se había convertido en un monstruo no tan grande, sino mediano. Los tres chicos estaban atrás del monstruo y cuando el monstruo se dio la vuelta, éste era muy similar a Espavento o eso era lo que recordaban. Se podría decir que era Espavento en su forma infernal ya que traía los ojos pequeños y rojos y dientes gigantes. Pero este monstruo no estaba con su cuerpo de león como cuando el grupo lo asesinaron hace diez años junto a Frank River, estaba con el cuerpo de una persona, es decir su cuerpo propio. Los tres salieron corriendo asustados. Carson y Bertino lograron salvarse pero Dylan no ya que el traía el cuchillo y no le podía tocar a Espavento. Espavento mataría a Dylan. Los dos chicos que lograron sobrevivir a Espavento llegaron nuevamente a la cabaña. –Chicos, Espavento regresó–exclamó Bertino. Carson sacó su celular ya que era el único que tenía datos. Sacó su celular para llamar a Frank River y decirle lo que está pasando. Llamó a Frank River, recordaba perfectamente el número. Al llamar un sacerdote había contestado. Preguntaron por Frank River pero éste ya se había muerto hace dos años. Preguntaron, por qué se había muerto y el sacerdote respondió que murió en medio de una misión. Tenía que ir a Salem y enfrentar a unas brujas que en la cual, supuestamente existían pero sí murió enfrentándolas. El grupo ya no sabía qué hacer y Carson cerraría la llamada. Parecía que todo estaba perdido y el grupo estaba solo, sin ayuda de nadie. Algunos del grupo como Mateo y Adrián, se sentaron a llorar pensando que esa iba a ser su última noche y que al amanecer estarían muertos. Buscaron en el libro que encontraron en el sótano, algo que si les ayuda y empezaron a ver cada página, si en alguna está escrita, buscar en el traductor de internet. Querían utilizar a Dylan para que traduzca todo pero Bertino se acordó que él ya había muerto. Siguieron buscando cada página hasta encontrar algún escrito en el libro. Lograron encontrar cuatro páginas. La página que leyó Martina, la siguiente página que estaba detrás de la otra página, una página intermedia y una al final del libro. En alguna de esas páginas estaban palabras como ¡cuidado! y no se acerquen demasiado. Pero lo verdaderamente aterrador era que en la última página decía: Van a morir. No sabían a qué se refería todas esas palabras y frases aterradoras y siniestras. El grupo estaba en el sótano pero los zombis y monstruos ya estaban dentro de la cabaña. El grupo estaba en el sótano con la puerta cerrada y ya se habían dado cuenta de que los monstruos aquellos ya estaban dentro. Un zombi que estaba por ahí cerca de la puerta del sótano golpeaba fuertemente. Los otros monstruos se acercaron y también empezaron a golpear pero el grupo había encontrado una salida en el sótano y por ahí salieron pero esa salida no llevaba al bosque sino a una habitación blanca con ascensor. En la puerta decía algo llamado El Thunque cerebral dando a entender que allí posiblemente esté el cerebro del diablo. Vieron algo muy referente a un cerebro tal igual como el cerebro del diablo. Fueron caminando y que a su vez se alejaban más del cerebro del diablo y aun así estaban asustados terriblemente. Mientras caminaban vieron a una persona dañando los fusibles del ascensor pero lo que realmente hacía era arreglarlo. Era Dylan Ushiña. El mismo Dylan que había muerto en manos de Espavento. No sabían cómo es que había sobrevivido al monstruo.

VII. DE VIDA O MUERTE (2)

El grupo se había quedado asustado al ver a Dylan , estaba vivo y definitivamente era él. No pudo ser Espavento que puede cambiar a otras formas. – ¿Por qué estabas dañando los fusibles del ascensor?–preguntó Mateo. –No, en realidad solamente los estoy arreglando. Yo también quise subir pero no valía. Aproveché que ustedes estaban en el sótano y que yo había estudiado maquinaría, no solo estudié lingüística–respondió. – ¿Y cómo es que sobreviviste a Espavento?…Vimos que te atrapó–exclamó Carson. –Vieron que me atrapó pero que jamás me mató. Lo que pasó en realidad es que, yo estaba en las manos de Espavento pero lo que él no sabía es que traía el cuchillo escondido. Creo que pensó que se me había caído o algo. Hice que se distraiga Espavento un rato en cuanto yo sacaba el cuchillo de donde tenía guardado y en el momento menos inesperado le apuñalé en la mano. Eso hiso que Espavento me soltara y cayera al piso en donde Espavento casi me aplasta como si fuera una pequeña hormiga. Salí corriendo y Espavento me seguía. Miré una tumba que estaba abierta y decidí saltar. Estaba con un muerto pero a ese muerto ya lo ataqué y le destruí cortándoles los brazos y piernas. Entré a este lugar y luego quise subir al ascensor pero no valía.

Después de que Dylan contara de cómo se salvó, el ascensor por fin valió. Subieron para ver a donde llevaba ese ascensor y vieron que los llevó al bosque. Bertino dijo que ya no había más opción y corrió a atacar. Bertino se había caído por accidente y cuando se levantó, los demás del grupo habían desparecido. Todo se había vuelto oscuro y tenebroso. A penas se podía distinguir las tumbas. Bertino continuó caminando y vio que unos dos zombis se le acercaban. Bertino reconoció a los dos. El primer zombi que estaba a la derecha era su hermano mayor, el primer hermano en la cual había muerto en un asesinato terrible. Se llamaba Dennis. Un loco asesino se había entrado a la casa de Bertino mientras que Dennis estaba solo en la casa, el asesino entró a la habitación de Dennis y lo asesinó de una forma tan brutal. Le rompió la cabeza y luego se la partió en dos sacando el cerebro y luego los ojos. Bertino era muy pequeño, tenía siete años. Bertino había llegado con su madre de comprar y cuando Bertino entró aquella habitación, su hermano mayor de catorce años estaba muerto y a lado estaba el asesino, riéndose. El otro zombi era Matt Carvelín, el chico que quería matar a Bertino con gusto pero Espavento lo había comido de una forma tan brutal. Los dos zombis conocidos de Bertino se le estaban acercando y Bertino retrocedía con miedo. Los dos zombis se metieron la mano en la boca. El hermano mayor de Bertino había sacado de su boca una serpiente, mientras que Matt sacaba un gato negro que estaba muerto. El gato y la serpiente se empezaron a mover y se unieron creándose un monstruo muy aterrador en la cual asustó mucho a Bertino e hizo que retrocediera si saber que atrás está un hueco y en ese hueco estaba un ataúd abierto. Bertino cayó en ese ataúd y el ataúd se cerró. El hueco de la tierra también se había cerrado. En el muro de la tumba decía: Bertino Brown, al fondo de esta tumba. Esto daba a entender que Bertino ya había muerto. Los demás del grupo estaban apagados. Es decir, con los ojos blancos y mirando hacia arriba. Cuando despertaron Bertino había desaparecido ya que ellos no vieron lo que pasó con él. Regresaron al lugar bajando nuevamente por el ascensor. Ahora si no sabían que es lo que debían hacer. ¿Por qué les pasa eso? Era lo que se preguntaban. ¿Por qué siempre les pasa un terror por encima? No lo sabían. Siguieron caminando para ver con qué se encontraban. Desde lejos se podía ver algo tirado en el suelo, era un libro. El mismo libro que había leído Martina. Carson lo recogió y lo abrió pero esta vez, el libro estaba escrito en la primera hoja. No estaba en los otros idiomas que está escrito sino que parecía que todas esas palabras se habían traducido. En ese escrito de la primera hoja decía: No están salvados, ahí abajo ay cosas peores. El grupo se asustó pero siguió caminando. Entraron a un lugar que parecía ser un ascensor. Ese ascensor era de vidrio algunos del grupo regresaron a ver al vidrio y vieron a la izquierda un hombre lobo. Atrás vieron un niño que parecía ser alguien normal pero cuando se acercó más al vidrio, su cabeza fue creciendo y además de eso, le crecieron cinco ojos en la frente. Pero lo que más terror les dio fue que ahí en alguno de esos estuviese Mr. Coaplín, el muñeco aterrador de Jason, y que también estaba el niño y la muñeca de la pintura, las manos lo resisten. Era algo bien aterrador para ellos. El ascensor subía cada vez más hasta que llegó a un lugar oscuro y siniestro, y lleno de sangre. En ese lugar había solamente una puerta. Abrieron esa puerta y salió una gran cantidad de sangre. La sangre caía y entres esa sangre salió monstruos que quisieron atacar a los del grupo. Había monstruos como zombis, demonios, aves muertas e insectos gigantes. El que daba más miedo era la mosca gigante llamada Sangre de mosca. Era sobrenatural. El grupo se logró esconder en un lugar cerca donde estaban los monstruos pero ellos no los veían. Ese lugar donde se escondieron parecía ser un centro de comunicación ya que estaba ahí una computadora y un teléfono de llamada y además, esa habitación tenía una ventana. El grupo se escondió debajo de la ventana pero esos monstruos estaban como locos en todas partes. Uno rompió la ventana donde estaban escondidos. Era un insecto con rostro de bebé llorando. Ese insecto con rostro de bebé vio al grupo y empezó a gritar. El grupo echó a correr lo más rápido que pudo pero Jason, Mateo y Adrián no lograron salvarse y murieron. Solo quedaba Carson, Dylan y Carolina. Los tres fueron nuevamente al ascensor pero éste no bajaba. Los monstruos se acercaban más y Carson aprisionaba el botón de bajar hasta que por fin se movió pero regresándoles al bosque casi por el cementerio. Dylan se fue alejando más para ver que encontraba. Encontró el lugar por donde habían entrado al principio pero se dio cuenta de que estaba cerrado y buscó otro lugar que fuese la salida se alejó más de la cabaña. Carson seguía teniendo el libro en la mano. Lo decidió abrir pero vio que el libro estaba escrito en la quinta página y decía: Un demonio solo puede entrar al mundo poseyendo a una persona. Se preguntaron, quién era esa persona que poseyó Espavento. Voltearon a ver a Dylan y él se transformaba en Espavento. Éste quiso atacarles pero ellos dos no se dejaron y salieron corriendo con miedo. Sus corazones latían muy fuertes y parecía que ya no iban a sobrevivir. Entraron nuevamente a la cabaña y se dieron cuenta de que ya no había nadie. El lugar se empezó a desmoronar y Carolina había sido golpeada por un pedazo de madera dejándola un poco inconsciente. Carson se enojó. Cogió un hacha y alzó a Carolina. Se subió a su buseta y se fue hasta la salida por donde habían entrado. Con el hacha empezó a romper todo hasta que salga nuevamente la salida. Una vez ya hecho esto, Carson volvió a subirse a su buseta y llevó a Carolina a un hospital de inmediato porque ya estaba que se moría. Carson y Carolina se habían salvado mientras que en la cabaña, La mano de Espavento había golpeado muy fuerte el bosque destruyendo la cabaña y el bosque entero, quedando solamente un bosque vacío y con un lago en frente.

Catorce años después de los acontecimientos, Carson tendría dos hijos con Carolina y al ver que todavía no pasaba nada con Espavento ya que pasaron catorce años, Carson decide irse con su familia a la cabaña a campar. La misma cabaña que sucedió aquella tragedia. Daniela, la hija menor de Carson se fue a jugar frente al lago. Pero no sabía lo que se esperaba. Espavento salía del agua. Carson empezó a buscar a su hija junto a Anderson, su hijo mayor y con Carolina. Llegaron al lago y vieron un peluche rosado de oso que traía su hija. Se acercaron más al lago y encuentran a su hija muerta, desmembrada y llena de sangre. Carson grita mientras Anderson y Carolina morían a la vez desapareciendo del mundo, y Carson gritaba diciendo: TODO ES MI CULPA. Espavento se le acercó en forma de líquido pegajoso y se metió dentro de la boca de Carson. Carson puso ojos blancos y mirando hacia arriba siendo atormentado. Resulta que Espavento nunca existió, sino que todo estaba en la cabeza de Carson y él fue el verdadero asesino de aquellas masacres y Es que Carolina existió pero Carson la mató, Anderson y Daniela jamás existieron. Carolina, Anderson y Daniela nunca habían estado allí, y es por eso que desaparecieron en polvo. Carson vuelve muy asustado y resulta que él siempre estuvo solo.

FIN.

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