INFINITA GRATITUD

Queridos míos,

Han sido muchos años transcurridos.

Hoy sentí un profundo llamado que no dio espera. Muchos hablamos de la imperiosa necesidad de vivir en el aquí y en el ahora como un acto de sabiduría para dejar atrás ese equipaje de recuerdos que limitan, que no dejan avanzar o que bloquean el caminar.

Sin embargo, hoy me detengo en el pasado.

Antes de que el tiempo siga implacable en su transcurrir y deje atrás lo que fuimos, antes de que los recuerdos se caigan por la escalera de la realidad, y se vuelvan borrosos, y ya no produzcan risas estruendosas, o sonrisas que sonrojan, o lágrimas de felicidad o tristeza, o suspiros de añoranza; deseo manifestar mi gratitud.

Gratitud, porque juntos fuimos felices.

Gracias por tantos y tan buenos momentos vividos. Gracias por haberme hecho parte de su familia. Gracias porque me sentí incluida con amor genuino. Gracias por los infinitos momentos de risas, disfrute, y por aquellos también de lágrimas, si alguna vez los hubo.

Gracias por los abrazos y las amorosas manifestaciones de cariño, gracias por las bienvenidas y las despedidas con las ganas siempre de volver a vernos. Gracias por los largos momentos pero nunca suficientes, junto al mar y en familia. ¡Como los extraño!

Amparito gracias por ser como una madre para mí, amorosa, cómplice, consentidora y alcahueta. Gracias por abrirme las puertas de su casa en todos y cada uno de los lugares donde ha trascurrido su vida. Gracias por la confianza depositada en mí. Gracias por ese maravilloso ser humano que me entrego con alegría y amor ese 14 de mayo. Gracias por su discreción y respeto hacia mi relación de pareja.

A Moni, gracias por ser como una hermana, por compartir conmigo tanta información de sabiduría, por sus detalles, por acogerme con amor, por escucharme cuando me permití abrir mi corazón. Gracias por haber sido siempre apoyo y bastón para Mauricio y para mí. Gracias por esa incansable y admirable persistencia en mantener la familia unida.

Tato querida, introvertida y silenciosa, y aun así, infinitamente amorosa. ¡Gracias! Siempre dispuesta a ser mi compañera de llegada y de partida. Siempre dispuesta a ser mí asesora de moda, siempre dispuesta a ir y a venir cuantas veces fuera necesario. Yo era Viviruchis o la negrita para ella. Gracias mi Tato. Espero que encuentres tus respuestas.

Lunita y Teito, maravillosos. Gracias por su juventud avasalladora que le dan a uno ganas de devolverse en la vida para vivir cada momento con esas ganas de comerse el mundo. Gracias por su calidez y afecto. Gracias por incomodarse con amor infinito cada vez que llegaba a invadir sus espacios. Verlos crecer fue un regalo de vida. Gracias por existir.

A Calochito, nuestro rey león, aguerrido, emprendedor, loco, “aventao”. Siempre lleno de energía para continuar como si el día nunca se acabara.

Gracias por tanta inspiración. Gracias por seguir siendo un adolescente. Gracias por recibirme desde siempre. Gracias por sus conversaciones. Gracias por creer siempre en mí y por verme en lo profundo de mi alma.

Los quiero con la simplicidad del querer sin más ni más. Siempre harán parte de mi vida. Siempre estaré para Ustedes

Ahora, ya no puedo seguir en el pasado; debo y quiero construir una nueva historia. Quiero seguir caminando para darle un nuevo sentido a mi hermosa vida.

Sin lugar a dudas habrá otros tesoros para mí en la vida. Sin embargo, ustedes serán uno de los más preciados.

Siempre Vivi

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