Giro, giro, giro, me hamaco hacia adelante y hacia atrás. Las nubes algodonadas se amontonan lejos del sol, no se atreven a hacerle sombra. Aún me chorrean los pies por la lluvia de anoche. Giro, giro, giro, me balanceo, izquierda, derecha. Esta rama está llena de hormigas, las siento caminar por mi cabeza y por mi cuello.Giro, giro, giro, me hamaco, hacia adelante y hacia atrás. Me golpeo con el tronco, se me engancha la camisa. Ya volvieron todos los pajaritos al nido, mis manos están más blancas que la luna. Giro, giro, giro, me balanceo, caigo, ruedo, pierdo un dedo. El pasto se mete en mis ojos, es raro sentirme desarmado, casi podrido. Debería haber usado esa cadena. Sin embargo, en un giro de la vida, la escena me esperaba lista, el árbol, la rama y la soga en el centro del paisaje que deseaba contemplar para toda la eternidad.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS