«Extrañar»

«Extrañar»

Joy Varón

12/06/2017

Supongo que es normal extrañar a alguien que ya no está, pero creo que vivimos todo el remordimiento de que pudimos haber hecho más o haber tomado otras decisiones que es lo más difícil que pasas después de terminar con alguien, y supongo que esa es la fuerza del verdadero amor, el hecho de que estemos locamente dispuestos a hacerlo todo incluso por volver a algo que creíamos que nos hacía feliz, o al menos, lo suficiente como para querer entregar el alma por alguien.

Y es que después de noches sin dormir, de tantas veces que ruegas no volver a recordarlo, llega esa noche nuevamente, en la que te hace abrir esa caja escondida entre tus cosas con esas fotos y recuerdos que te quedan de aquella relación que vivías antes, y tratas de nuevo de entender que fue lo que pasó o te preguntas si tu acaso jamás fuiste suficiente para esa persona, y tratas de recordar esos momentos malos que odiabas para tratar de compensar el hecho de que quisieras tener eso de vuelta, y ese primer recuerdo siempre es cuando empezó todo, esa conversación tan tonta que empezó por pura casualidad de saludarse y un mensaje, y es como te preguntas como es que algo tan fácil que haces con tantas personas, solo con una es la que te sigue quitando el sueño cada vez que piensas en algo de amor, y es como la depresión empieza a invadir cada parte de ti. Y que injusto, piensas: “¿No ya tengo suficientes problemas de mi vida, como para lidiar todavía con problemas del corazón?”, pero quizá es solo tu manera de expresar que te sientes solo y que quizá solo es un problema el que quieras estar con alguien.

Sigue siendo pregunta, tras pregunta, recuerdos más recuerdos, fotos con mensajes detrás, una flor seca, cartas, boletos de cine, una medalla que te dio, y miles de cosas que te hacen seguir pensando en aquella persona que pensaste que iba a ser por fin “ tú para siempre”.

Puedes comenzar a revivir cada momento con esa persona entre las sábanas y la obscuridad, y sentirlo en cada lágrima que recorre tu rostro sobre la almohada, y es ahí cuando tomas el móvil y deseas confesarle todo en un mensaje con la esperanza sobre tus dedos mientras en cada palabra vas dejando pedazos de tu corazón esperando a que entienda lo que sientes y crees que eso traerá de vuelta a esa persona, y es cuando terminas ese mensaje, listo para enviarlo y la razón entra para crear ese conflicto que hace pensar que está quizá mejor sin ti, empiezas a culparte por su partida, y sólo lo borras, te secas las lagrimas y te prometes que es la ultima vez que volverás a llorar, y tu corazón se burla en el fondo como si el mismo dijera :

-JA, hasta crees que te dejaré que lo olvides tan fácil.

Y tu mente solo responde con un simple:

-Ya veremos

Y dejas que pasen los meses persiguiendo ese recuerdo, hasta que vuelvas a verla (o) y te das cuenta que no queda más de ese amor que se notaba a kilómetros y entiendes que es mejor retirarte, así que cuando te vas, borras las fotos, quemas las cartas, y tiras todos esos recuerdos, lo eliminas de cada red social que aun te conectaba con esa persona…

Así que empiezas a avanzar y termina ese dolor que extrañaba sus besos, y empiezas a quererte a ti, lo dejas ir, y comprendes que jamás necesitaste eso, y el mundo se da cuenta de que eres feliz, así que es ahí cuando después de un tiempo, llega un nuevo amor, que problamente sea mejor, o sea una nueva lección.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS