Es imperativo que quede algún registro de todo esto. Lo que viví no puede ser real, al menos que se tratara de una pesada broma de los dioses, pero eso no quita las consecuencias reales de estos sucesos.
Cuando contemplo mis métodos en esa situación recuerdo que siempre he sido fiel a la filosofía del buen pastor. Yo como cualquier kiengiana soy plenamente consiente de la historia que ha seguido nuestra civilización como protectores, guías, creadores y destructores de vida, en base al sagrado buen pastor, pero esa situación indicaba un accionar diferente.
Me llamo Viento de Invierno, soy del dominio de los exploradores y soy conocedora de grandes flujos. He encontrado un cumulo de granes dominios humanos en el mundo conocido como Rios Profundos.
Estos humanos no son como los humanos de la tierra. Sus fenotipos son diferentes y los mas destacables son los que tienen ojos color violeta, pelo azul y piel pálida. Presentan algunas anomalías como un manejo y conocimiento sobre flujos y constructos que los humanos normales serian incapaces de ni siquiera contemplar, pero cada gran dominio tiene sus características y están en una guerra constante entre si, como si fuera una forma de selección natural.
Parecen que fueron sacados de su mundo natal ya que Rios Profundos no es su mundo natal pero fueron moldeados aquí, aparentemente por un dios.
Lo que me consterno al punto de no creerlo es que esos aparentes humanos utilizaban esos flujos y constructos impropios de los datos que había reunido y sus ritmo de desarrollos eran abrumador, impulsado por ese dios. Pronto me di cuenta de que son armas, soldados con un gran dominio propio.
Me intrigo el propósito de su creación y como continuaría, quien seria el ganador. Mire a los que tenían ojos violetas y parecían que ellos estaban dominando a los demás humanos.
En el día 1305 desde el estudio, mi compañero y segundo al mando llamado Voces de Otoño me informo de algo alarmante, los ojos violeta habían mutado y estaban evolucionando con el propósito de combatir el campo 0 que nosotros utilizamos. Según los datos el propósito de esas armas eran combatirnos. Según el protocolo de conservación le pregunte directamente al dios que los había creado sobre su propósito, su respuesta fue suficiente para actuar. Esas armas eran para nosotros.
Exterminamos a ese gran dominio y al cumulo de grandes dominios de humanos pero el dios que los había creado decían que iban a haber mas.
Estos son solo algunos de los ejemplos de los caprichos y crueldad de los dioses, mis datos y memorias también son ejemplos. Somos esclavos de los dioses.
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