EL VUELO DE LA MARIPOSA

EL VUELO DE LA MARIPOSA

Una pequeña mariposa se encontraba prisionera en un telaraña, intentaba con todas sus fuerzas liberarse para continuar el vuelo al horizonte, luchó y luchó para al fin escapar, se liberó y como muestra de su triunfo una ala lastimada la diferenciaba de las demás, mientras trataba de aletear para avanzar recordaba pasajes bellos de momentos únicos en su vida, como volar sobre las flores contemplando el paisaje y el suave perfume en el aire, en la estadía cerca de la tierra procuraba sonreír a pesar del dolor y el miedo.

En el camino hacia el sueño de volar, la pequeña mariposa tropezó con un gentil y tierno colibrí, la mariposa al sentir que podría ser confiable le pido ayuda y aunque se encontraba dubitativa le pregunto si podría darle refugio para descansar y respirar, el colibrí muy gentilmente acepto y la invito a su hogar en la rama de un gran árbol, la mariposa temerosa de aquel lugar nuevo y desconocido solo atino a estar en una esquina descansando el ala lastimada, pronto el calor de aquel lugar la hizo sentir más en confianza y relajaba el alma para descansar, después de unos segundos de haber cerrado los ojos sintió un calor peculiar, era el colibrí que estaba junto a ella ofreciendo una de sus alas para que pudiera descansar, curiosamente contra todo lo que creía ella cedió y acercó el ala lastimada junto a la de su protector, fueron minutos donde una conexión extraña invadía el alma de la mariposa, no dejaba de contemplar a aquel ave que sin conocerla la ayudo y brindo asilo en uno de su peores momentos.

Al día siguiente extrañada por lo sucedido, no podía ver los ojos del colibrí, sentía que la imagen de una mariposa perdida en el camino del bosque se confundiría con una de muchas aves que solo buscan engañar incautos, temerosa se acercó al colibrí quería explicar lo que sentía pero un gran nudo en la garganta no le permitía pronunciar palabra alguna, ella solo atino a posar su cabeza en el pecho del ave, estando ahí ella pudo sentir el latir muy fuerte de un corazón desconocido, pensó que era una linda melodía para alguien que solo sabía de los latidos de dolor, se sintió en calma, como se siente una brisa fresca en verano, fueron momentos únicos e inolvidables, pronto la mariposa sentiría hambre y el gentil colibrí fue a buscar bocado, ante la ausencia de este, la mariposa pensó en devolver de alguna forma el favor a su protector, así que busco unas hojitas y paja para barrer el lugar donde la acogieron, pronto volvió el colibrí y la mariposa sentía una extraña sensación y lo abrazo, se sentía protegida y en paz.

Llego el día en que la mariposa tenía que partir y continuar en el camino al horizonte, el colibrí por su parte decido emigrar y salió de la vida de aquella que en un extraño momento dentro de una burbuja era el protector de aquella desconocida sin saberlo, solo quedaron los momentos y recuerdos que marcan y forman parte de una historia secreta entre dos seres, la mariposa continuo feliz el su camino con la satisfacción de saber que existe personas que ven más allá de un ala lastimada y tienden la suya para salvarlas aun sin saberlo, soñó el día que pudiese mirar nuevamente a los ojos al colibrí y decirle, gracias, me salvaste cuando necesitaba de un brazo donde recostarme y descansar, gracias, por ver en mi algo que yo creía no podrían ver más.

Por última vez la mariposa contemplo el camino donde yacía los pasos del colibrí y sonrió contemplando temerosa el suyo, donde nadie sabe que depara, donde el destino es el principal escritor de líneas en el tiempo, ella con lágrimas en los ojos dijo; hasta que la vida nos muestre caminos donde podamos cruzar miradas.