El Jardín de los Sueños

En los rincones más profundos de mi ser, florece un amor que solo existe en la ensoñación. Un sentimiento que se teje entre las brumas de la imaginación y se nutre de los suspiros de mi corazón. En mi mundo de fantasía, ella es la musa que ilumina mis pensamientos y despierta las emociones más intensas. Es amor que solo contemplo desde mis pensamientos como a una estrella del cielo cuanto quisiera tenerlo y contemplar su belleza al lado de ella, pero mi cobardía es la distancia que me aleja de ella, siento que estoy condenado a vivir con este amor, que solo en las locuras de mis pensamientos podremos estar juntos, apartado del mundo cruel y viviendo en mil fantasías, con tantas cosas vividas y que faltan por vivir, a veces quisiera que no despertar de aquellos sueños que tengo.

Donde me encuentro junto a ti en aquel lugar donde te conocí, nos tomamos de la mano y empezamos nuestro viaje por el mundo conociendo los lugares más hermosos, aunque tengo que reconocer que junto a tu lado cualquier lugar es hermoso. Viajamos por lugares desiertos, bosques, ciudades y pueblos, en cada parada vivimos una experiencia nueva, a veces nos perdimos en otras hubo tormentas y en algunas tuvimos la gran fortuna de conocer aquellos lugares mágicos de la selva, en cada viaje me enamoré más de ti, mi recuerdo mas preciado es el día que Dios me dio la oportunidad de conocerte nunca pensé que te volverías en la persona más preciada de mi vida.

Fue aquel verano, un varano que según mi parecer iba a ser igual que los veranos pasados sin mucha emoción. Hasta que llegó aquel evento, donde asistí por una simple curiosidad, aquella tarde que te vi, Fue como un destello de emociones; de inmediato capturaste mi atención, te contemplaba y vi a la chica más hermosa que jamás había conocido. Los días seguían pasando mientras mi cobardía me seguía impidiendo hablar contigo. Sin embargo, rogaba a Dios que me brindara la oportunidad de entablar una conversación contigo. A pesar de ello, la situación no se presentaba y mi cobardía me paralizaba, impidiéndome dar el paso. Hasta que llego aquel mágico día en el que tú me hablaste, por fin tendría tuve la oportunidad de entablar una conversación contigo, Y así pasamos los siguientes días, los más increíbles e irrepetibles de mi vida. Pero Lamentablemente, esos días llegaron a su fin cuando tú tenías que volver. Aquella última tarde fue muy triste, ya que significaba la despedida de aquellos días mágicos.

Así como aquella tarde. La mañana cruel me indicaba que tendría que despertar de mi sueño y volver al mundo real, que todas aquello que vivimos solo era un sueño, pero en la realidad tu ya te fuiste y solo eran alucinaciones. Ahora solo espero que caiga la noche para poder encontrarte en mis sueños, “en mis sueños tu eres mi viva, y en mi vida tu eres mi sueño” en estos días interminables y las noches cortas.

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