EL FLORECER DE MI CEREZO

La floración de los cerezos suele aparecer cada año entre finales de marzo y principios de abril, de tal modo que tu floreciste en mi jardín.

Explorar un nuevo ser, olfatearlo, visualizar su delicadeza y entender su andar, son sensaciones que permiten reconocer tu alma de forma entrañable. Las almas no distinguen materia, se encuentran y vibran de la mano, de tal manera mi alma se unió de forma sublime y comprometida a la tuya.

El abril de mi vida llegó con tu partida, tus ojos me miraron con certeza, con seguridad de saber que lo que parecía una separación sería la promesa de que la eternidad nos tendría deparada nuestra unión. Hoy mi cerezo se encuentra florecido, en él estas tu, tus pequeñas patas y tu enorme energía lo rodean en mi mente, hoy tu eres quien estará eternamente en mi jardín. Porque no hay despedidas, solo flores que me recuerdan que siempre estarás ahí.

En memoria de Gustavo, mi hermoso dálmata que me acompañó trece maravillosos años y a quien le agradezco enseñarme el amor mas leal que he conocido.