“ Instalados en el Peristilo Ecléctico e invisible portal del Evangelista San Juan, iban levitando en su sacra caverna basáltica en Katapausis en el archipiélago de Patmos (Koumeterium Messolonghi, Capitulo 16/página 114. Editorial Palibrio-USA). Se encontrarían en su plenaria correspondencia con el arqueo clan que resemblaría ser su apropiado ectoplasma; así cada uno conformará parte única de la albañilería que les dictaminará redirigirles en sus labores mesiánicas en esta etapa de la ascensión de Vernarth siendo consciente que tendrá que ingresar a la caverna después de haber cesado sus labores en espera por tres meses. Descarnándose de las miríadas de guerras, y las regresiones parasicológicas iba obnubilado para dedicarse a los hermosos parajes abiertos hacia el horizonte, vecino a la pintura rupestre y astronomía en colores de su plegaria matemática captando la intensidad espiritual que inspiró a San Juan para construir el templo cerca de su caverna del Apocalipsis en la isla de Patmos. El santo aparece solo ciertos días mirándolo desde lejos para animarle en sus avances, se le ve como un bello lozano vestido con una túnica en delicados tonos rosados cuya delicadeza repite salmos del ángel que le acompaña normalmente a este Evangelista, rondándole con los sonrojos verdes y azules del paisaje en cuadrinomio del cielo que va apareciendo en redención más allá de la gloria de la resurrección más bien súper en inteligencia espiritual. En el agua de Skalá un naufragio indica la anarquía de los hombres en su profético luminar y en el suelo un pequeño demonio agujereado consigue desviar la atención de Etréstles abrumado y escarbándole, para no detener los movimientos del esplendor de las efusiones y tempestades en sagrada rogativa. Este demonio podría ser Tytillinus que según las leyendas provocaba diabólicos pensamientos en el clero durante los oficios religiosos, y es el que temía San Juan del que no les diera salvoconducto para ingresar y poder encomendarles la tarea que le habían vaticinado a él para los servicios en Katapausis después de tres meses. Vernarth que estaba con todos trabajando en la albañilería del Templo cerca del extramuros de la Caverna de San Juan, estaba Etréstles Eurídice Raeder, Petrobus y Alikanto embebidos con las flautas que sonaban sobre excitando sus orejuelas con regios denotes que siempre él tuvo de una especial cualidad, cuando permaneció en Kalimnos, sabiendo todos que el umbral de la proximidad a la caverna estaba inundada por el enigma de la lóbrega presencia de Tytillinus en donde todo se reordena hacia los polos de eterización tangible en los salmos del 120 al 132, así darían orden al antípoda de la Divina Misericordia para desagraviar la coronilla de las quince horas de la tarde, desintegrando así las que coinciden con la de las quince horas en la madrugada. De alguna manera absteniéndose de la confrontación del Vóreios con Tytillinus, centro de los garfios del desconcierto y malos pensamientos. Precisamente esta será la mejor forma; dejándose tragar por él y residir en su cáustico estomago haciéndole creer que consumido serás por él para luego caer cerca de él mismo al ser vomitado, confundiéndole así que tú mismo eres con una de sus paridas crías, Vernarth logra captar esta siniestra imagen advenediza cerca de la gruta viendo al Tytillinus donde todos atentos escuchaban las textuales palabras del santo ”
- Página 05 / Inter Paraps……………………………..Oblatum
- Página 08 / Inter Paraps…………………………….Dedicavit
- Página 09 / Inter Paraps…………………………….Thyatira
- Página 11 / Inter Paraps………………………………Prefacio Trilogía
- Página 19 / Paraps LIII Magnus Volumine I Códice Raedus
- Página 107 / Paraps LIV…………………………….Séptimo Cielo
- Página 116 / Paraps LV………………………………Vóreios en Prophytis Ilías
- Página 122 / Paraps LVI……………………………..Nigromancia de Leiak
- Página 141 / Paraps LVII…………………………….Salpinx Corpus Vivus
- Página 170 / Paraps LVIII Magnus Volumine II Thespis de Dyonisius
- Página 173 / Paraps LIX………………………………Anthropokairós
- Página 176 / Paraps LX……………………………….Marielle Meus Spiritus
- Página 182 / Paraps LXI………………………………Tomo VII – Spinalonga
- Página 192 / Paraps LXII…………………………….Apófphysi
- Página 198 / Paraps LXIII……………………………900 Años de Oscuridad
- Página 209 / Paraps LXIV……………………………Méga Seismós
- Página 223 / Paraps LXV……………………………..Anábasis Vernarth
- Página 227 / Paraps LXVI…………………………….Séptima Necrópolis
- Página 233 / Paraps LXVII……………………………Retóricas Thuellai
- Página 235 / Paraps LXVIII……………………………Kérata de Moshe
- Página 242 / Paraps LXIX……………………………..Batalla de Patmya
- Página 251 / Paraps LXX……………………………….Kabbalah Subclavia
- Página 257 / Paraps LXXI……………………………..Batalla de Patmya II
- Página 267 / Paraps LXXII………………………………Sustraigus Infierno Iblís
- Página 278 / Paraps LXXIII………………………………Batalla de Patmya III
- Página 282 / Paraps LXXIV……………………………….Lux
- Página 289 / Paraps LXXV…………………………….Éntasis
- Página 310 / Paraps LXXVI Magnus Volumine III Logos
- Página 315 / Paraps LXXVII…………………………….Symposium Opisthos
- Página 323 / Paraps LXXVIII………………………….Elegías Helénicas
- Página 347 / Paraps LXXIX ……………………………Deus Himation
- Página 360 / Paraps LXXX…………………………….Ependysi Imatos
- Pagina 362 / Paraps LXXXI……………………………Apokálypsis
- Página 383 / Paraps LXXXII…………………………….Duoverso Itheoi
- Página 391 / Paraps LXXXIII………………………….Mikaiyáh del Paraíso
- Página 397 / Paraps LXXXIV……………………………Genesí del Apokálypsis
- Página 421 / Paraps LXXXV……………………………Epylogos
- Página 440 / Paraps LXXXVI…………………………..Kideía Tou Vernarth
- Página 446 / Paraps LXXXVII………………………….Ékthesi Pericles
- Página 456 / Paraps LXXXVIII………………………….Odas Megarónicas
Oblatum
Juan es definido en su Evangelio como el discípulo a quien Jesús amaba (cf. Jon 13,23). Gracias a los signos especiales de predilección que Jesús le manifestó en momentos muy significativos de su vida, Juan fue estrechamente ligado a la Historia de la salvación. El primer signo que le demostró el grande afecto de Jesús consistió en que fue llamado a ser su discípulo junto con Andrés, el hermano de Pedro, por medio de Juan el Bautista que bautizaba en el río Jordán y de quien ya eran discípulos. En efecto, cuando Jesús pasaba, el Bautista se lo presentó como «el Cordero de Dios» y de inmediato lo siguieron. Juan se quedó tan impresionado por su encuentro personal con Jesús que nunca olvidó que fue hacia las cuatro de la tarde que Jesús los invitó a seguirlo (cf. Jn 1,35-41). La segunda señal de predilección fue el haber sido un testigo directo de algunos hechos de la vida de Jesús, que luego él reelaboró en el cuarto evangelio, en un modo teológico muy distinto a los evangelios sinópticos (cf. Jn 21,24). Y el tercer momento en el cual Jesús mismo le hizo sentir su amistad y su hermandad tan particular fue cuando Jesús, a punto de entregar su espíritu (cf. Jn 19,30), lo quiso asociar de un modo privilegiado al misterio de la Encarnación, confiándolo expresamente a su madre: «aquí tienes a tu hijo»; y encargándole expresamente a su madre: «aquí tienes a tu madre». (cf. Jn 19,26-27).
Las fuentes de las que se han extraído los datos de la vida de Juan como apóstol, como evangelista y como «hijo adoptivo» de María, no siempre coinciden. Algunas fuentes son más convergentes y otras son más dudosas o apócrifas. De los evangelios sabemos que junto con su hermano Santiago -que también será un apóstol- los dos eran pescadores originarios de Galilea, de una zona del lago Tiberíades, y que juntos fueron apodados «los hijos del trueno» (cf. Mc 3,17). Su padre era Zebedeo y su madre Salomé. A Juan lo encontramos en el círculo estrecho de los apóstoles que acompañaron a Jesús cuando realizó algunas de las «señales» más importantes (cf. Jn 2,11) de su progresiva revelación como un tipo de Mesías muy distinto del que el pueblo de Israel se esperaba (Lc 9,54-55). En efecto, cuando Jesús resucitó a la hija de Jairo (cf. Lc 8,51), cuando se transfiguró en el Monte Tabor (cf. Lc 9,28 ), y durante la agonía en Getsemaní (cf. Mc 14,33), Jesús trataba de hacerles entender que debían transformar su mentalidad ligada a la esperanza en un Mesías violento, semejante a Elías pues, en cambio, él era el Hijo amado del Padre (cf. Lc 9,35), él era el Mesías venido del cielo para comunicar la vida divina en abundancia (cf. Jn 10,10), y que también iba a sufrir el rechazo y las injusticias de parte de los jefes religiosos de su pueblo (cf. Mt 16,21). En el evangelio de Juan, Jesús aparece como el Maestro que también intenta, inútilmente, hacer comprender a los judíos la lógica paradójica del Reino de Dios (cf. Jn 8, 13-59). Los discípulos, por su parte, son invitados a nacer de nuevo (cf. Jn 3,1-21) para adorar al Padre en Espíritu y en Verdad (cf. Jn 4,23-24); Jesús ora por ellos para que permanezcan unidos por el Amor divino (cf. Jn 17,21) y para que sean alimentados por el Pan de la Vida (cf. Jn 6, 35).
Durante la Última Cena, Juan se había recostado sobre el pecho de Jesús y le había preguntado: Señor, ¿quién es el que te va a entregar? (cf. Jn 21,20). Juan fue el único de los apóstoles que acompañó a Jesús al pie de la Cruz con María (cf. Jn 19, 26-27). Juan fue el primero que creyó en el anuncio de la resurrección de Jesús hecho por María Magdalena (cf. Mt 28,8): corrió de prisa a la tumba vacía y dejó entrar primero a Pedro para respetar su precedencia (cf. Jn 20,1-8). La tradición añade que algunos años después se trasladó con María a Éfeso, desde donde evangelizó el Asia Menor. También parece que sufrió la persecución de Domiciano y que fue desterrado a la isla de Patmos. Finalmente, gracias al advenimiento de Nerva como emperador, (96-98) volverá a Éfeso para terminar allí sus días como ultra centenario, hacia el año 104.
El Evangelio atribuido a Juan fue llamado así por Orígenes. También ha sido llamado el «Evangelio espiritual» o «Evangelio del Logos». Su estilo y su género literario están lleno de «señales», de símbolos y de figuras que no deben ser interpretados literalmente. En el prólogo de su evangelio, Juan usa un refinado lenguaje teológico para mostrar como al inicio de la Nueva creación, en el Nuevo principio ya preexistía el «Logos» divino; logos que significa la Palabra eterna creadora del Padre, que luego fue traducida al latín como «Verbum». En el prólogo del cuarto evangelio Jesús es presentado como la «Palabra divina», la «Luz de la vida» y «la Sabiduría de Dios preexistente» (cf. Jn 1,1-18). Este evangelio invita a aceptar por medio de una fe llena de estupor y de agradecimiento, la sorprendente revelación que el Verbo de Dios, que nadie había visto, se hizo carne y ha puesto su morada en medio a su pueblo. (cf. Jn 1,14). Por ello, la palabra «creer» se repite casi 100 veces, pues Dios quiere que todos los hombres se salven (cf. 1Tim 2,4) y tengan vida abundante por la fe en Jesucristo, Dios hecho carne (cf. Jn 11,25).
El Evangelio de Juan también nos presenta en dos episodios muy emblemáticos la identidad de María y la especial relación de Juan como su «hijo adoptivo»: en las bodas de Caná y en el Calvario. En la narración de la señal del agua transformada en el Vino nuevo durante las bodas de Caná, se nos muestra a María como la potente intercesora que anticipa la hora de la revelación de Jesús a su Pueblo (cf. Jn 2,1-12). En el Calvario, en el momento de la glorificación de Cristo, María es presentada como la Mujer que es transformada en la Nueva Eva o Madre de los discípulos de su Hijo (cf. Jn 19,25-27). Si se considera la estrecha relación filial de Juan con María, no es difícil imaginar que la revelación de la figura del Mesías en el evangelio de Juan se haya nutrido también del directo testimonio de María, pues ella mejor que nadie, en sus últimos años de soledad, recogió en su corazón y en sus recuerdos las «señales», los «signos» y las palabras de vida de Jesús. Es pensable pues que las experiencias únicas que ella conservaba en su memoria, las haya compartido luego a los discípulos de Jesús, y en particular a Juan. Por ello, se puede considerar que también María misma fue acogiendo e interpretando progresivamente en la fe, la revelación de que el Hijo de sus entrañas era a la vez el eterno Hijo del Padre, (cf. Jn 10,30), el único Pan de la vida (cf. Jn 6,34), la Luz del mundo (cf. Jn 8,12), la Puerta (cf. Jn 10,7), el Buen pastor (cf. Jn 10,11), la Resurrección y la vida (cf. Jn 11,24), la Vid verdadera (cf. Jn 15,1) y el Camino la Verdad y la Vida (cf. Jn 14,6).
A la tradición de los discípulos de Juan se le atribuyen las tres «cartas», que tienen también un sabor de breves homilías. El Apocalipsis es un libro canónico, reconocido como inspirado que nació en los ambientes de las iglesias de tradición joánica que sufrían los ataques de las doctrinas gnósticas. Éste, que es el último libro de la Biblia, usa un género literario semejante al de algunos libros proféticos del Antiguo Testamento, como el libro de Daniel (cf. Dn 7), de Ezequiel o de Zacarías. La palabra apocalipsis es la transcripción de un término griego que significa revelación y no destrucción, como a veces se piensa. Juan dirige siete cartas a las siete iglesias (cf. Ap 1-3) para transmitirnos por medio de personajes y de símbolos muy fascinantes, un mensaje muy concreto de esperanza en que el Cordero degollado (cf. Ap 5,12), o sea, Cristo Salvador triunfará sobre todas las persecuciones y las oposiciones de las fuerzas del mal al Reino de Dios y hará nuevas todas las cosas. Esto sucederá cuando Dios establecerá su Reino de justicia, de amor y de paz al final de los tiempos. En este libro se muestra, con numerosos y sugestivos símbolos, como los siete sellos (cf. Ap 6-8,1), las siete trompetas (cf. Ap 8.6-11,19), los siete ángeles con las siete copas (cf. Ap 15,5-16,21), el fatigoso camino y la lucha que los creyentes de todos los tiempos tienen que afrontar para que un día se realice la edificación de la Nueva Jerusalén (cf. Ap 21-22), hoy diríamos la Civilización del Amor, de la fraternidad y del cuidado de la vida, cuando Jesús, el Alfa y Omega (cf. Ap 22,13), regrese al final de los tiempos. En este sentido, el Apocalipsis es también un libro profético que interpreta la acción de Dios en la historia, asegurando que el Testigo fiel y veraz (cf. Ap 3,14), regresará pronto (cf. Ap 22,20) y vencerá definitivamente al mal, al dolor y a la muerte (cf. Ap 22,1-5).
Dedicavit
El presente manuscrito está dedicado al Sauter Magistri Bernardino Edmundo Carreño Troncoso “ Primum Coniugem Alexandri Magnis ” del primero del Gamelión de Dionisio de Leneo, a su Adelfós de Etrestles de Kalavrita, a Alejandro III de Macedonia, conocido como Alejandro Magno (21 de julio del 356 a.C. – 10 u 11 de junio del 323 a.C.), Leónidas de Epiro, Lisímaco de la Acarnania, Aristóteles, Bucephalus, del sexto de Hecatombeón, el mes que lo Macedonios le llamaban con el apelativo Loios, el mismo día que el templo de Diana en Éfeso fue incendiado; que Hegesias de Magnesia hace ocasión de una presunción, Casandro, Ptolomeo, y Hefestión se convertirían en sus compañeros de toda la vida y generales en su ejército. Calístenes, otro amigo, era el sobrino de Aristóteles. Dedicado a la dignidad de Raeder de Kalymnos; hijo de Etrestles de Kalavrita, muy especialmente a San Juan Apóstol, distinguidos familiares de los Valles Transversales del Horcondising y Sudpichi. Finalmente a mis padres Luccica y Bernardolipo Monarcas del Horcondising. Y todos los personajes que vivirán eternamente en este colosal Magnus Volumine. “Gratias Ago Tibi Propter Heroismum Tuum Vernarth, Et Doce Nos Viam Messiae” ¡Gracias por tu heroismo Vernarth, y de enseñarnos el camino del Messiah!
“Debo deciros de mi gran admiración a mi corcel Alikantus, con el cual vendré a visitaros pronto, también a Kanti que habéis sido un gran precursor para llevaros a Atenas, Tesalia, Delfos y Lefkandi. Podéis veros que Bucéfalo se ha unido a nuestra lid; donde los “Hijos de Iaveh, tienen ojos como llama de fuego o Aish, y pies semejantes de ir bruñendo el tamo del bronce hacia Patmos”, que os instigará pro contricción de Thyatira, bajo la añagaza de mi Rabih San Juan Apóstol”
Thyatira
Ciudad reedificada a principios del siglo III a. E.C. por Seleuco Nicátor, uno de los generales de Alejandro Magno. Estaba situada a unos 60 Km. de la costa egea, a orillas de un afluente del Gediz (antiguo río Hermos), en Asia Menor occidental. La congregación cristiana de Tiatira recibió un mensaje escrito por el apóstol Juan según se lo reveló el Señor Jesucristo. (Apocalipsis 1:11) «Que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea».
A este respecto, el Señor declaró en tono reprobatorio: “Toleras a aquella mujer Jezabel, que a sí misma se llama profetisa, y enseña y extravía a mis esclavos para que cometan fornicación y coman cosas sacrificadas a los ídolos”. Esta “mujer” probablemente recibió el nombre Jezabel debido a su conducta inicua parecida a la de la esposa de Acab y a su obstinada negativa a arrepentirse. Sin embargo, parece ser que solo una minoría de los miembros de la congregación de Tiatira aprobaba esta influencia de Jezabel, ya que el mensaje continúa dirigiéndose “a los demás de ustedes que están en Tiatira, a todos los que no tienen esta enseñanza, a los mismísimos que no llegaron a conocer las ‘cosas profundas de Satanás’”. (Apocalipsis 2:18-29).
“Hijos de Iaveh, tenéis los “Ojos como llama de fuego o Aish, y pies semejantes de iros bruñendo del tamo del bronce” hacia Patmos que me ha desprendido de vuestro Xorki como decir y que no deciros; que mi voz ha balbuceado, haciéndome sentir que vez de Huir, debo ceñirme al fuego Eterno del Mayim, hijos de Iaveh cae sobre mi rostro el Mayim del Hydor y santo de agua, Molino de Viento y su triste Myloi”
Vernarth, Alexandri Magni Macedonis officer Primum
Prefacio Trilogía III
Después de seis años de conocer e introducirme en el área de Tecnología y Ciencia en industria del Turismo, hice mi presentación en Macromedia University, Berlín-Alemania. Por medio de esta gestión universitaria tuve la opción de presentar mi concepto, y proyectos de vanguardia, lo cual me condescendió a conocer el área de E-Tourism Perspectives de la Universidad de la Svizzera Italiana-Ticino, esto me permitió conocer e integrarme a un desafío de Estudio independiente con consigna de derivar toda gama de análisis y estudio dedicado Heritages Sites de Unesco, gracias a conformidad que me ha consagrado en ésta Tésis de Panthéon-Sorbonne Université, más concretamente con María Gravari-Barbas, Directrice de la Chaire UNESCO, Culture, Tourisme / Lorenzo Cantoni, como profesor en USI Universitá della Svizzera Italiana. Debido a esta gran circunstancia de Certificación con estas grandes escuela de enseñanza quiero contribuir a motivación, y propagación del magnífico ensoñador del campo de la UNESCO, que me ha motivado en gran parte a investigar, desarrollar, editar o de patrocinar una nueva área de Submitología Parasicológica, género literario que se debe a este gran arraigo, parte de esta catequesis al poder llevar a la realidad postulable de gran obra Vernarth Hellenic Trilogía, Literary Heritages Sites.
La universidad ha tenido aquí en Sudamérica en Chile un acucioso intrépido colaborador que ha tratado de interpretar los postulados de Ciencias de la Humanidad, exponiendo el carácter de que debe preservar e indagar en extraviada historia de Europa que tiene gran atingencia de Cultura que se ha ramificado por medio de la Tecnología del Turismo, y transformación Digital para tal efecto de entender la vida pública en disimiles campos que todavía se esconden en archivos intangibles, que deducen materia importante de estudio en las áreas de la Ciencia, Filosofía, Historia, Política, Geografía, Jurisprudencia que se adicionaría al mundo de conservación de los pueblos ancestrales con su valerosa identidad de prosopografía y demografía arqueológica.
The United Nations Educational, Scientific & Cultural Organization, conocida abreviadamente como Unesco de un organismo sumamente especializado de las Naciones Unidas. Se fundó el 16 de noviembre de 1945 con el objetivo de contribuir a la paz y a seguridad en el mundo mediante la educación, la ciencia, la cultura y comunicaciones. La constitución firmada ese día entró en vigor el 4 de noviembre de 1946, ratificada por veinte países. En 1958 se inauguró su sede principal en el distrito VII de París, su directora general es Audrey Azoulay, en especialización y búsqueda para la Cultura, Educación y Ciencia a manera de poder contribuir a la humanidad, pacíficamente otorgando seguridad por medio de toda la comunidad Internacional, por esto creemos que esta obra cumple con esa prerrogativa estrechándose como que va desglosándose con la prosa, y Parapsicología que es un campo muy ligado a intrínseca ligazón del todo el tesoro que se ha trasmitido por miles de años, dejando ante nuestra expectación lo que sus ruinas y obras han querido demostrar con sus fundaciones en loable dedicación, y ampliación de múltiples sitios en cavilaciones que han recorrido la historia con dicción y arquetipo de ciencia de la cultura, información, comunicación para crear conocimiento de que todavía permanece con nuestra realidad de sociedad que tiene su patrón de generación explosiva en la actual. Unas de las premisas más importantes de Vernarth es crear la raigambre de conocimiento sistemático; es decir proveer plataformas de sus árboles genealógicos, prosopografía y el arte de escribir Prosa Submitológica cuyo objetivo tiende a ocupar el ampliado de literatura universal que ha avanzado por miles de años, en cambio la submitología está libre de formato, anula muchas vertientes del formato temporal, creando una sujeción de relación entre lo académico y secular atrayendo infinidades de Culturas, hitos históricos, hibridez de lenguajes, sobre todo fusionar y re trasformar existencias del periodo Post-Clásico; donde fuente e interrogante personal no amilana distancias de lo heredable que nos alejaba por periodos Geológicos-Históricos, más hace viabilidad de un campo inexplorado hasta ahora como lo es Vernarth otorgando un jerárquico valor cosmopolita que retrasmitirá conocimientos, destrezas, decisiones y valores agregados a cultores de este novedoso neo género literario llamado Literary Heritages Sites of Submithology.
De este modo converge aglutinándonos en aquellos intersticios que no son visibles, calificables ni cuantificables, solo han de materializarse cuando los seres patrimoniales sean elegidos por otros que ya son hereditarios de una industriosa voluntad que ocupa soportes de una plataforma de herencia terrenal, y posteriormente diseminarlo por diferentes sectores del ámbito del saber e investigar, connotando que hay muchas variables que podrían ayudar a interpretar basamentos de patrimonios de la UNESCO, que por hoy están muy retirados de colectividades que quieran invertir tiempo indagando en más cuantía profundamente sobre ellos. Por esto que Europa central, oriental está a vanguardia generando multicanales que podrán velar por tratamiento de rutas tecnológicas o de florecimientos que se quieran reencontrar como el Qhapaq Ñan, o tal vez la ruta Jacobea, tal vez la Ruta de Patmos a Judah señalando en Vernarth al demostrar que la retrospectiva podría ir la perfectiva al visualizar hechos que no fueron testimoniados ni escritos como se deberían, V.G. la vuelta de regreso a Galilea de San Juan Apóstol en la Hégira a Judah, relegado a Grecia por el emperador Domiciano. La enmienda de tan merecido regreso ratifica la espera de un ser inmortal en el Portal Ecléctico por tres meses que significará lo ordinario que se subleva de lo fenomenal invirtiéndose de roles que muchas veces indica el dogma del baptisterio, señalando que podemos ser santos y apóstoles para preservar patrimonios que educan y retrasmiten valores a seguir. Las entidades educativas tendrán que tener en el futuro la manera de sustentar toda tendencia de elucubrar y manifestar lo que es tácito en materia de herederos de sus enseñanzas extraviadas, habrá de ser también de manifiesto los que tendrán en el futuro que retransmitir.
Vernarth Trilogía II en su final, es reiterante en deliberar que esta obra nunca termina debido a que cada capítulo de Paraps inaugura una nueva dimensión infinita regresiva como lo es en el caso de la Poielipsis; al ser licuefacción del parámetro de Poiere y Apocalipsis invertida para efectuar cambios trans-personales que logren impactar en los sucesivos episodios de alteración de periodos de Vida, como en esta caso Vernarth al ser legitimado de asistir a Gaugamela por Spílaiaus para hacer el sustentáculo a Alejandro Magno, no solamente por ganar las batallas sino por salvar y ganar las Almas de caídos Hoplitas, generado en ellos una prosa idílica que promueve y sublima la posesión de los principios de un Apocalipsis que sugiere amparar a los que debieran creer sin dolor de lo que les esperará más adelante por una muerte indefinida. Las Almas de Trouvere que se destacaran con su destacado baluarte de la entronización del estado de energía que movilizaría a Carlo Magno al llevarle al estrado de conquista de Europa coronado como emperador por el Papa León III llevando fuertemente arraigadas las lecciones, letras que suscribirían los vítores donde nada muere en el centro de su propio miedo pues es ahí donde pierde el valor el filo de una espada, que no pueda usar de la otra como arbitrario neologismo de solo reinar sin el sacrificio que apuesta todo régimen, incluso la corona cuando Carlo Magno asumió su gran legado a los veinte años después de expirar luego a los setenta y dos. He aquí donde mueren los miedos no consiguiendo del esperanzarse o de convalecerse en conceptos de la Energeia que vitalmente se movían del símil aspecto a Alejandro Magno en el mismo numeral par pero de treinta y dos.
En otro tópico, Vernarth después de presenciar el entreacto de Estratónice decide correr a sus pies descalzos porque destierran con sus necesidades en la parental escala de su gama, sucedido por la necesidad de Energeia hacia el sentido impúdico de arrobarse en posibilidades, denostando aquí también el principio de la ciencia cuántica con el spin de giro de partículas subatómicas, alambicando partículas atemporales que se podrían dejar fuera del núcleo la proporción de rotación del tiempo que podrían ser de hallazgo, y arraigo de las memorias en rectilíneos del imperturbable eje mental Helénico. Se podría enmendar aquí también toda la acción licenciosa de Seleuco por parte de Estratónice, cuando ella fracciona el umbral burdo de su hijo Antíoco, y Antígono I Monóftalmos, refiriéndose al progenitor de Estratónice de Macedonia de nunca desposarla con Seleuco. Todo esto genera la Epístola dirigida hacia Vernarth para solventar estridente impalpable de Diadocos que considerablemente afectó la descendencia femenina, recluyéndolas a avatares domésticos en imperios desleales donde estas vilipendias arrasan con parcialidad imperial a través de los siglos de una opresiva pujanza y desavenencia en sus entuertos morales. Desde esta cualidad queda presente la coordenada de las Almas de Trouvere siempre aliándose en salvadores de pueblos oprimidos abandonados que se esmeraran en neologismo del Épsilon o de la quinta dimensión de Vernarth, no restringiendo como lo afirma Aristóteles indagando el ente hacia un mono-sentido en este causal de tal alfa que dice lo paradójico demostrando diversidad de ópticas.
Previo a esta diatriba Vernarth decide su naturalidad que decide potenciar las Almas que son parte de ambos tópicos, para alivianar potencialidades de actos que se aprehenden en luz de genialidad que cohabita con ambas. Lo que nos justipreció en desdoblar de su entidad lo entregará por inteligencia divina para no reducir la libre potestad del Épsilon que se extractaba en la acogedora presencia de Estratónice en la (sustituta escala de emociones relativistas de Vernarth). Son pocos los segundos que se pueden extender más desde un selectivo argüir de las tendencias en ex pliegos que podrían atribuirse a las dimensiones del período de Almas de Trouvere, careciendo de quietud en simulados ambientes biológicos, como si deliberaran naturalidad de una expresión de quien no filosofa si algo tiene que desprenderse o asirse de la creación para privilegiar lo originario que va re arguyendo afección al profesarlo, si es que queda tiempo para expresarlo tal así se intuye lo que agencia la virtud de farfullar simultáneamente en lo laborioso, y lo que no progresa.
La dinámica de esta Poielípsis es ataviar el Voielípsis a manera de aditamento análogo de causalidad de cuántica y cristiandad atemporal, puesto que avala un conjugado mix deificado por Santo Tomas de Aquino enfilándose hacia el puntal en la mega absorción de ideales Aristotélicos Cristianos. Las Almas serán los residentes de mecánica espiritual indeterminada deponiendo efectos de incrédula versatilidad en ellas mismas, en profundidades sub-acuáticas que conviven con la geológica estructura de la caverna de San Juan Apóstol, más sub-terrenal concomitancia bajo el mismo axial de coordenada que se sustenta geológica. Es decir; convivirán mientras se instituya el templo pero a trescientos ocho metros de antípoda en basa submarina del Prophytis Ilías. El contrapunto del rasgo es lo constatable que se edifica en los alzares de aquellos sucesos verticales donde la fisonomía del hombre es totalmente impugnable de liderar e ir conteniendo la germinable fécula del crecimiento del ergonométrico estribo de la Saeta de Zefian, que desde la elevación cero hasta las 308 metros sobre nivel del Egeo conformará una mega bilocación extra de la sesión parapsicológica que se gestará en la destacada y uniforme numeración cronológica vertical con representación cristiana pitagórica, post-cristiana en la coronación de Carlo Magno mencionada con reales visiones del Apóstol Santiago en versada apología de Pitágoras como entidad supra divina, avizorándose del depositario escenográfico y de estimar fragmentarse de estos tres componentes en este arranque de magna helénica en la cuenca hidrográfica terrenal geológica y residencial de las Almas de Trouvere.
El tapizado de la Pithya de Herófila embiste la sub tendiente del arbotante que se sostenía de oquedades de las volcánicas del Patmos indicando su avenencia con las Almas por la desorientada disonancia cognitiva que iba generando paradigmas, que rastreaban las piedras que formulaban sonidos acuarianos en su tonalidad dominante por el minúsculo maquinal de luz, más distante en la inconmensurabilidad que se evadía de su eclipsada en la nota mayor resplandeciente que se hacía monárquica por la hipotenusa del rectángulo en los tres ángulos subdominantes. Esto quiere denominar que la Sybilla estaba en alto observar de sus premoniciones hacia la creación que nacía de otro fin para terminar en el reciclaje de creación ante la escasa luz de claridad de los destinos que iban a presentarse como el canto de recordación del Poielipsis, aventurando el nuevo reinicio o intento de los oraculares Délficos. Los cantos quedan en el hechizo en los banales deseos que dañarían a un mortal que se expandirá a la hipotenusa o lineamiento de la oración que marcaba un paso que va impeliéndose en recelos y perdón del pendón del riesgo.
Santiago de Compostela se dirigía a Estratónice con sus inclinaciones, como racconto geométrico sobajeando los temores que patinan por el velo del dogma del arco donde ninguna filosofía puede mirar más a lo alto si no le es permitido, propio de un vegetar o libertarse de lo que reverdece en temores que no hacen luz en la vida eterna, quizá de un mismo Matematikoi que duda de una base Ad finitas que se entere sin límites llevando a Pitágoras al suelo esposado de Crotona, siempre en su ignorado del poderío lingüístico que urde rebobinar esferas que todavía traman ángulos cruzados sitiándose en tanteos al considerar un pretérito que no es renovable, el Alma de Poielípsis adoptaba una concepción pitagórica en cabestros de las lívidas legiones de Orfeo cual si fuera su consagrado al hipogeo donde estaba la cota para rebullir al terraplén que se fusionará con la saeta de Zefian.
Poca la música que existía atonal en las moléculas en los periodos trigonométricos, en el que las medidas se unían a tiempo como un todo estacionario vivificando gran variedad de números fraccionarios como almas de un mismo numeral que finalmente aparentan ser dígitos pitagóricos. Las falanges militares de Vernarth en esta épica hacían el instante crucial oblicuo para romper las tropas de Darío como una dormita Elegía que iba a reflorecer lo que sabía de sus destinaciones sub-tratadas, que solo serán almas cansadas de tenerse así misma viva en morbilidad, y disociado del causal de la inmortalidad que se distanciará de prohibidas abstinencias en libertarios ejercicios de cualquier conteo que cavila en la viniente etimología de la Vita Pythagorae, en el diván de goces del servir a su doctrina que se salva así mismo, que nos salvará en el Messiah para cuales en el alma no les queda sacrificio de un cordero que apacienta, ni peana que por delante vaya en los siglos, apacentando de lo que nadie fue capaz. En la segunda triada de Apolo el oráculo de Apolo con Almas que revelan a Carlos Magno de ser su predilecto para el protectorado de Ruta de Compostela con su espiritual regencia, el convite en Carlomagno prorrumpe desde Aquisgrán de sus 33 años consecutivos en disputa a espadas manifestando que los sajones nunca cumplían con tratados y rendiciones firmadas. Carlomagno se puso en varias ocasiones al frente de su ejército para luchar con su espada contra el peligro sajón confiando también las tropas a los condes cuando otros asuntos requerían su presencia, el segundo cóncavo erial ascendente recto de Trouvere que iba coronando a Carlomagno emperador de Roma, y Francos elegido por León III predicho por el Apóstol Santiago en defensivos pontificios bregues y defensorías de la Cristiandad. En este paradigma figura un trasminar occiso de un mundo inasible que iba uniéndose desde aquí en nervadura de Poielípsis en aras de algunas épocas que sobrevinieron del mutismo anonimato que auguraba vincularles, para saber dentro del interminable tic de movimiento que era intrínsecamente orgánico también como un diligente cosmos activo del descubrimiento de Ruta Jacobea, anhelando ser una mejor comarca que Dodecaneso fusionada por doce apóstoles, ahora el hermano del hijo de Zebedeo; Santiago quien fuera hermano de San Juan Apóstol ennoblecido al 778 d.C., que se alza estribándolo a Hispania. En cruenta y constante lidia Carlo Magno sitiaba a sajones, se introdujo a Hispania atravesando los Pirineos como anticipo de la mencionada Ruta Jacobea, todo arreciaba de este modo atestiguando las avasalladas plazas en fueros de los Trouveres que eran soldados de elite Pitágoricos que se habían bilocado en esta era Cristiana antecedidos por esta pérfida Vasca en bosques, más subsistiendo separados aquí mismo de los progenitores de los Trouvers que señalaban ser los más fuertes para perseguirles hasta Pamplona con Carlomagno. Todos escapaban del Islam, no pocos cristianos se resentían por esta afrenta en la dinámica que traslucirá los Cantares de la Gesta Francesa, para adentrarse a la Ruta Jacobea del camino a Santiago de Compostela cuando el Códice Calixtino en su libro IV o la Historia Turpini cuenta la aparición del Apóstol Santiago a Carlomagno en sus sueños señalándole la Vía Láctea como manera de encontrar su sepulcro, que debe de librarse de los sarracenos para poder venerar reliquias con los medallones y esmaltes que se expedían en la cripta del Apóstol en Santiago de Compostela.
Este parágrafo anterior exhibe elocuencia de cómo interlineado de que Vernarth debía de crear un neo Código de Hermandad llamado “Códice Raedus” por la alta nominación pulimentada en el Infante Raeder como crispa del sacrificio de su alma joven, que librara batallas en pos de defensas puras libres con el pasto recién crecido de la primavera del mundo en el Génesis. Las Almas en la Trilogía III serán el compendio de Códices que se adentraran por el Túnel de Viento que será gobernado por cálido viento Meltemi, arremolinado por los vientos de Eolonimia ascendiendo a aquel debiera ser admitido no purgando entremedio aquellos que gozaron de una herencia pre- cristiana citatoria de la antigüedad Pitagórica detrás de los que debieron vestirla como Codex Calixtinus. Desde esta disposición Carlo Magno impulsará las almas con antífonas, el Apóstol Santiago vendrá lacerado a reunirse con su hermano San Juan Apóstol, de súbito su barcaza quedará abandonada en estrecho de Gibraltar para luego arribar a Santiago de Compostela, desde aquí hará tributos de nombradía para ascender a Patmos. Así como trascribe fidedignamente en el final de la Trilogía II de Vernarth, también Estratónice, la Primogenitura Hexagonal, Alejandro Magno, del Rey David, Elías, Malaquías, Isaías y el adquirente del fulgurado en Raeder y Pelicano Petrobus, como seres autosustentables defensores de la Fantasías Infantil que seguían en esta obra compleja tras una hallazgo que hartaba en Vernarth como lo concernido a su liberación e investidura para decir que todos los caminos conducen a Patmos, como Locus Sanctus de todos los pastores que sanan a sus ovejas que no son de otras que se ven pobladas de almas blancas, para bien de otros cascarones a 308 metros bajo el Prophytis Ilías con las anuencias de Estratónice que estaría llegando a Macedonia donde el pasar de siglos les hablarían de la Ruta Jacobea instruida de confrontes, concordancias con los airones de los Trouvere amparados por un rectángulo de tres ángulos subdominantes Pitagóricos en las disipadas tinieblas del áureo ambages astrológico de Theoskepasti entre el meridiano de Kímolos. Se irá así diciendo explícitamente que las tinieblas se convertían en nieblas visibles donde nada había que encubrir desde la Rada de Psathi en Kímolos, hasta próximo a alcanzar el Agia o Capilla de Theoskepasti que se feudaría visible para el fenómeno de Fe aludiéndose a un portentoso deseo de que todo estaba atado a un mismo sentido de compresión del cual la imagen o el sonido de creación, a ratos se hacía invisible poro entendible precisamente como lo era al imaginar palpable la realidad de lo que permite al ojo humano sentir por un instante que es real imperceptible, presente de lo que puede ser detectado por superiores sentidos más que humanos, dando paso contiguo al Códice Raedus.
Desde Ios o de Nios, lindante de Psathi se desata la Trilogía de la asociación de espaciadas Cicladas de Vernarth vendrán los equinoccios a relucir la esmerada siesta de aldeanos de las Cicladas, próximo al sopor de Thira, levantará a cada Hoplita del ponto de Nios con el arrastre de un abandonado cuerpo que nunca pudieron recibir los caminos que se dirigían a Chorá en distancias infinitesimales, en los puntos blancos de cicládicos fantasmas que intentaban encumbrarse asimilando a los aldeanos de Psathi. Según Plutarco, se cree que el nombre Ios o Nios deriva de la palabra griega antigua para violetas «Ία» (Ia) porque se encontraban comúnmente en la isla, es la etimología más aceptada. También se postula que el nombre se deriva de la palabra fenicia iion, que significa “montón de piedras”. Se llamaba «Φοινίκη» (Phiniki) nombrada así por los fenicios en el siglo III cuando la isla se unió a la Liga de los Isleños que probablemente se llamó temporalmente Arsinoe en honor a la esposa de Ptolomeo II. Hoy en día los habitantes de las Islas Cícladas llaman a la isla Nio con un nombre derivado de la era bizantina, el nombre Pequeña Malta que se encuentra en textos de viajeros durante la dominación otomana, está relacionado con presencia permanente de piratas en la isla de idiomas con escritura latina, el nombre de isla es Nio Io que suele también Vernarth mencionar en aperturas del equinoccio como Aerse cuando los Hoplitas llegan en grandes colonias a reposar de sus espíritus Vagos buscando a Lochnith.
Magnus Volumine I
Paraps LIII
Códice Raedus
Desde la intersticial bilis del Profítis Ilías se emanaba la inaugural armadura de los códigos de euritmia de Raedus, con la traza tipología de las tres áreas requebradas de energeia purpura que ascenderá desde su basa elemental del contrafacto de la melodía del Raedus. Primero con parágrafos del Profeta Elías en la porción de los primeros 103 metros más otorgando al contrafacto melódico mismo con texto del Raedus, que serán epígrafes de la rítmica del aleluya y comienzo del Kiria discantado. La polifonía será la elevación de liturgia que se entregará doblemente para en el conducto que lleva a prolífica ascensión a faz de la superficie del Prophytis Ilías. La Hipóstasis será la sustancia, más de un ser a de modo de verdadero unificado al todo de la realidad del Áullos Kósmos.
A 1,7 años luz la cuarta saeta de Zefian iba compareciendo para ordenar el Áullos Kósmos, clasificándose del Vas Auric que concluirá en la retina que queda del afirmamiento de trayectoria como saturado extra terrenal. La cuota de profecía en la tectónica surgirá del acantilado y fallas de masa rocosa sobre bloques superiores desde este afloramiento hasta las capas inferiores. Desde el inicio de materiales aloctonos sobre el boquete de erosión donde entrarían las Sybilas y Profeta Elías hasta los 103 metros de la cota.
Códice I –Tectónica Nihil
La honra Cuenta la Regresiva Leyenda de esta buena pieza de Carne Corpulenta y cerebro también, naciendo para escribir de su astrágalo su terminal sílaba entera agonizante con la sangre de Corceles Etruscos y Macedónicos, que cada cual teniendo sus dorados piercing colgados internamente en uno de sus seis senos paranasales, sellando la vida de este sanguíneo celante franciscano atemporal espadero, que con sus últimos cuatro molares cederán su luz amalgamada Cristalina desbordante en encías del lapso que se empapa de sangre en los campos ecuestres. En este códice la Sibila Pérsica ingresaría por la cilíndrica bóveda, ella avanzaba con una luz encerrada pisando una serpiente bajo las aceradas pezuñas de Alikantus. Ella misma con su velo y candil que anunciaba la llegada del Messiah, aquí mismo en semblanza despertativa se invoca por el honrar de su venida a Padres y Madres. Las Almas de Trouvere comparecen junto a Estratónice, Lochnith y Wonthelimar.
Dice Lochnith: “El mundo abdicó el pontificio, se han corrido los cortinones para que ingrese la luz, Moisés ahí ha de venir con las verdaderas cortinas que albergan los lunetos, los tronos de las Sibilas y Profetas que nos avenaran milagrosas salvaciones que nacen de su entelequia, para quien es prohijado en milésima porción de luz que prorrumpe como asunta señal, testamentaria del Apocalipsis al Poielipsis en su creación estamental donde habitan en los bisbiseos de Emmanuel, en versos bruñidos y oraculares de Sibila, hija de Dárdano y Neso, con exiguas diferencias y metrajes entre del Helesponto y Dardania, como Jerusalén y Bethlehem, ésta última entre lo que va crecidamente en Ein Karem, más en correspondiente bifurcación que va aproximada al baptisterio. La Primogenitura Hexagonal mandatará trances de hexámetros, ante hectómetros que harán evidencia del Iscatón, “Tercer mundo como realidad consistente real que nos llevará a la esperanza de una vida colmada adiestrada”
Códice II – Tectónica Supra Litosfera
Tres águilas blancas decapitadas volaban por Tel Gómel, llevaban sangre en sus zarpas retorcidas de espinas turgentes. Traían el vaticinio de su doble muerte pronosticada con su doble coraza puesta de doble casco que transmutará las sortijas del pútrido Thanatos por las heces, por sus labios deslucidos débiles en Él. Vernarth les había enviado una misiva con las Águilas en vuelo bajo; todas ellas eran vestidas del hedor de campo de niebla amarilla y negra batalla. Sobre la limosa pezuña de Beelzebub que se erguía en las de Alikantus, hipaban sobre el linfoma del tamaño de sueño de seis décadas en su crisol caballón, que resollaba purgas por su hocico lleno de restos de linfa quedándose en intersticios de sus dientes Bruñidos caninos-alanos. Su corazón se reconvertía en una coraza roja ad limitem con el azul del endocardio floreciente, al ponerse en el crepúsculo del reventón tumbado del viento Eolionimi y del Shamal cuando iban rompiendo la vertical con la Jáquima de su brioso y codicioso corcel esculpiéndose helicoidales esteras volátiles de catacumbas de Markazí, donde los residentes de su estirpe que forjan en moradas, en abominaciones de vidas que renacían vencedoras desde el fuego culto a una ciudad que alberga su verdadera Vida y Alma en la Sibila Pérsica.
Canto de Wonthelimar: “ Ya los velos se han recogido, llevaremos cirios que alambran Almas liberadas de Trouvere. Gritos de prosperidad nos esperan, desde medrones que renacerán de la presencia inmanente de ella misma. A metros sobre el nivel de la litosfera se asomaran Anillos Ibicos hacia el encuentro de una terciaria trotaconventos en la Saeta de Zefian. He aquí donde se interpreta la ley, futuro nos da el gallardete de justicia en demasía de la Luz más allá de la caverna que nace en los turnos del tercer mundo. Dícese de Meturgeman o Rabí que desglosan avatares de avances por fines descentrados si han de ser verticalidad de las Sibilas con la mente de Dios. Así vamos coronando por este axón de fatiga espiritual centrando en nerviosa excesiva que sale del cuerpo de conciencia del cosmos, trasmitiendo impulsos del mismo por ligaduras de Elías donde su motora estructura de maestro urde el testamentario de Leví, griego Arameo Leví en Qumram, subsistiendo a gran velocidad del cómo y cómo ha de transcurrir? El Messiah sacerdotal interpretará la palabra del Mashiaj en el Áullos Kósmos de su orden motora, he aquí el Messiah Sacerdotal y patriarcas como Set, Enoch e Isaac teniendo ingentes labores de desentrañar ilusiones y misterios del cosmos de la misma manera que el ángel intérprete con las nocturnas visiones en relatos Apocalípticos de San Juan Apóstol”
Códice III – Tectónica Cuarcita
Los desleales Fantasmas provenían desde 70 km de la ciudad iraní de Shiraz provincia de Fars, cerca del lugar en que el río Pulwar desemboca en el Kur (Kyrus). Su construcción y destrucción serian provincias que serán sometidas hasta la conquista del Imperio persa sometido en octubre por Alejandro Magno. Persépolis quedó convertido en salas del Harén y sexo de imán bizarro entre Dioses masacrados. Las transiciones de pórticos por los lados son unidas por torres angulares en la Apadana y nudos profanos. Las dos grandes puertas quedaron abiertas en la eternidad gimiendo de sales con interminables haberes de predefinición y recargo en su malogrado grado.
Aquí estaban los camaradas de Vernarth atosigados de preparativos y atuendos de las losas de Marte sobre sus hombros, tras tempestades de oráculos del calcinado sol en sus cabezas. Anahita; diosa de la naturaleza escancia las aguas benditas de la naturaleza que lavaba con morbosas lluvias los cuerpos de los caídos en traposas batallas con los gallos de Zoroastro, rebanando el palanquín donde están sentados y embelesados en politeísmo de Ahura Mazda casi como su claustro y capota, ad portas de calzar atuendos monárquicos de Macedonia, ante su reino vencido por la sojuzgada constitución de sangre dorada de Alejandro y Vernarth ligado a su Macedón o Zeus, plenamente Helénico que corría vastas sendas zancadas por los filones de las calles enmudecidas de piedras adoquinadas basálticas, y obsidianas entre paraísos de vendimia y avienta. La sibila Eritrea muestra su velo no solo recogido, sino significativamente anudado sobre el vientre que alude el estado de gravidez de Virgen en la Encarnación (escena de la Anunciación). Los metrajes de ascensión se ven determinantes en los primeros 103 metros de escalada insinuando los apelativos de Erqia, Eriflam Herifle y Riquea.
Canto de Estratónice: “En el mármol pernocto de blanco ápeiron de materia infinita, indeterminada exenta de la cualidad que se halla en el eterno movimiento del Eolionimi, que ha de morar en su vientre un salvador níveo desde el Áullos Kósmos o paraíso de Vernarth, el vocablo dirá lo que ha de rescatar la vida de los mortales, las facetas de Katapausis desagraviarán de los efluvios hebreos en ponderación del puntal de la virola que abraza la saeta de Zefian cayendo desde la altitud. La bi-faz solitud, traspasará el terraplén rocoso de la cima del Prophytis Ilías, así con tiernos metros atravesará el Fero o ejecución de absorción de su Santidad y Salvación de la Humanidad”
Códice IV – Tectónica Cenozoico
Desde Rodas la escala temporal geológica, nos aportará el marco de la evolución del manto rocoso, y superposiciones en pasar del tiempo. Registro fósil de organismos que subyacen en capas o endodermis de prehistoria del Dodecaneso. Vernarth tras lograr cruzar el Helesponto transgredió el grueso Arroyo sucedáneo a Sudpichi como el manto ingrávido de una Machi rogando al Kósmos de Negechen por su desvencijado Rehue, profetizándole sobre sus desmembradas manos, sobre valentía con la gran asistencia en 300 años de almas Nge-Nge Mapus de furiosa nariz que propulsaba su ira; substituta similar con la cual se desató el nudo de Champollion de alguna esfinge que iba destapando alegorías de Pandora desde los Valles de los Reyes.
Canto de la Sibila Líbica: “Las bujías se inflamarán, Iridiscentes ojos del Mashiaj centellearan en el probable asentamiento mortuorio de Alejandro Magno en el oasis de Siwa: “Oh mi cálido viento de Libia que lisonjea mis mofletes, con mis hombros que se estrían en luz de la callosa convivencia cerebral de Zeus”. Canto aquí por ti mi Didaskein; tratando o enseñando al desconcertado rebaño que confunde los menajes que nacieron a. C. ¡No habiendo reminiscencia de Irradiación en maestría del continuo tiempo de no contravenir de ignorancia, pero sí de encontrarle avenido y refulgente!”
Códice V – Tectónica Brisehal
Por infecundo desierto Dasht-e-Lut de Brisehal, la descomunal sombría estructura le movía cuando se revestía, hasta la totalidad del medio oriente aun desobedeciendo a los patriarcas; entre dividido de los despoblados seres de sitios de contemplación que estaban emergiendo de su gran montaña con su desierto encantado. Rebosaban lémures deambulando vacíos como queriéndose asir de postrimeras centellas de astucias que quedaban por rendir en su propio destierro desencontrado. Brisehal era un eminente alcor con cabezal de can similar a Anubis, más sinnúmero de veces del tamaño hacia a lo alto, así mismo del atributo del clorhídrico como perspectiva de feligreses para entrar al jardín-reino de Los Cielos y sus regazos. Antes de temblar el día con el movimiento de sus estremecidas pisadas, Brisehal estuvo dos años moviéndose día y noche en la superficie que le hacía atrayente de lux Solaris, Brisehal en este quinto códice se licuaba en la capa negra de los túneles de viento que se cuenca por Dash-e-Lut, hasta la capa sensorial de Dasht-e-Kavir atrayéndose por el túnel de la gruta de 308 metros de altura en Patmos geológico, todas las esculturas e imágenes de las cúspides se hacían cercanas a los 103 metros de altitud inicial en este subterráneo vertical en acoplamiento con paralelos que replegaban en cúbicas toneladas, taladrando dolinas o las depresiones geológicas en la extensiva de Lut, para un gigante que nace de lamentos y laceraciones de Vernarth cuando era tutelado por saetas en medio del campo del sitio beligerante Gaugamela, incluso descomponiendo a Maceo. Cuando se movían estrepitosamente las dolinas de las menores serranías se concebían deducidas con el mayor efecto de sus nervios giratorios, apareciendo inmensos tronidos que incluso se refregaban hasta los nimbos esferoides enrojecidos por la algarrada de Dasht-e-Kavir. Giraba de izquierda hacia la derecha pretendiendo proscribir el Desierto de Dash -e- Lut entubado pro generación por sendos haces de cuerda óptica o fibras de alta densidad que el energizaba, que podría cohabitar junto a Vernarth habilitándolo en la odisea del Horcondising (Paraíso de linaje de Vernarth a Gaugamela).
Canto de Brisehal: “El velo cobija la indiferencia se ha anudado del abdomen eclosionado de la tierra, la dolina me protegió del folio que permuta que hubo o ha de acaecer. La gesta de todos los que sufren de pie y recostado tienen tres rutinarias abortivas en su gravidez de blanca relativa, que hizo anidarme en el amor hacia mi señor Vernarth. La Sibila Eritrea ni en griegos ni latinos ha de sortear breviarios del pontífice máximo que habla mientras dormita con anilinas noches donde nadie perece despierto.” Sibilino por el saudí, desde el vórtice se encaminan los golfos que se esconden desde donde renacen como coros de Esquilo detrás de las primaveras de Agamenón, donde Clitemnestra abre llanuras que hacen correr el Shamal por su seco talante de rocío, pero húmedo de la savia en Eritrea en la afrenta de manantiales subtropicales que desecan lagrimeas del recio cuerpo caído en lágrimas que no se oirán por el tenaz cáñamo…
Al-Haffar, terciado está con las saetas en sus muslos, brazos y pectoral donde la estrella se hace abierta brillando para quien muere por ella en los primeros fucilazos de la noche en Thorayya con violentos abrazos para recibir a quien desde un códice recibe la quinta escudilla, para los violentos vientos de pescadores que se zanjaban de viento y polvo fino de hendidas manos de Aldebarán, mirillas de sentinas de ogros que nacen infernales para morir como piadosos en brazos de la Sibila Eritrea, en prólogos de Brisehal con tantos metros de envergadura no obstante que ningún centeno en grado mayor haya de hacer ceremonias en gajes de una revivida Sibila Líbica.
Códice VI – Strigoi Astenosfera
En la primavera de 331 a. C. Alejandro Magno dejó Egipto regresando al puerto de Tiro, donde estaba su flota. De allí se dirigió a Antioquía cruzando el valle del río Orontes, y llegó al Río Éufrates a la altura de Tapsaco donde fundó la ciudad de Nicéforo para que fuera una plaza fuerte y depósito de los suministros del ejército. Aquí supo que Darío se encontraba en Arbelas por lo que cruzó el Tigris y se dirigió hacia el norte bordeando la ribera oriental del río. La sibila Cumana se encontraba en la cota 97 del túnel de viento al auscultar estas ondas, muy cerca de las dolinas en avidez de la Pitia Délfica con estos adivinatorios prosélitos que recorrían los pliegues de su atuendo en plises de su caterva adivinatoria cerebral. Su relatividad Cumana se distendía de la entalega del Mausoleo, profetizando vida para todos en pasión del vivir juntos con cuerpos abandonados por las almas del Devotio, la inopia del alma que se escurre así amilanada por no quedar desolada entre medio del pergamino de Lilith, ofrendas del Strigoi por incumplimientos de turbadas visiones en oscuridad de la caverna de Chauvet, al sacrificar senso-emociones competitivas del Votum maléfico de Lilith. Solo uno puede existir como parte inviolable de tradición del castísimo Wonthelimar, tanteando la Xiphos con humanas badanas en ofrendas tectónicas frisando la altitud 103 del túnel de viento del Strigoi.
Vlad Strigoi Canta: “Mardiath, noble y leal húsar del mar de Vernarth, Jefe de las flotas del Golfo venía por la cubierta, al dar la vuelta por el bauprés se ve recogido impactado por maromas en parasitosis que brillaban como extraviados remos de dioses en súplicas que se sentían en chiflidos del viento. Se acerca y desciende por oscuras escaleras tingladas con dirección hacia el pistón del agua, de cuya herejía se resplandecía en una nave Vladiana que se pendenciaba. “Cuando me adiestro en escribir al decir quién Soy o el que no Soy, solo recibo los abscesos de los multitudinarios Saecula Saeculorum, no acertando fundamento para confesarme. Dicen no saber que revelar debido a que no hay contenido que se compare a quien no tiene Edad, Vida ni Compasión, que solo he de comunicarme como mensajero Strigoi? Ahora sé que nadie cantará mis pensamientos, no hay tinta que ose untar un comparable cálamo que resista mi palabra de amonio Strigoi, usurpado de un navío Balinger a unos piratas flamencos secundado al lateral por una barcaza de Panescalm que tiraba a 64 mil cuerpos masacrados de la Peste Bubónica. Mardiath, egresa del Balinger y le deja su espada a Vlad junto a una tabla geográfica para reencontrar destino en alguna doncella que atienda sus trastornos, más que un ganglio supurando de su postración. Remonta el rumbo hacia Tiro para encontrarse con Vernarth, y secuaces para dirigirse finalmente a los campos bravíos de Gaugamela”
Prensiles Ctónicos se referenciaban a dioses de los espíritus telúricos del inframundo tectónico, por la oposición a las deidades celestes apareciendo en la tubular ascensión de viento cálido que coronaba al consecratio, que estaban arriba esperándoles. Las oblaciones de luz iluminaban partículas de carcoma que se suspendía expeliendo las que se imantaban de la materia fosca. La inconexa sintaxis se hacía periódica en palabras de Strigoi desde el Capite Velato o cabeza velada desde el Balinger Strigoi que lograba resituarse. En doble aumento de savia lo hacía menor para resistir su vida, y cerrazón yaciendo mínimo ante Wonthelimar, y Mardiath que le colmó de compañía del cáncamo que sostiene la vía de su hosca vida.
Canta Mardiath: “Mis tropas cerriles partirían desde Tiro, en donde se encontraba su flota, provenía desde Sudpichi desde el Imperio del Horcondising. Cuenta la leyenda que en las alturas del Golfo cuando su ejército venía navegando, prorrumpe sobre sus escuadras una misteriosa tempestad de calientes aires de Ormuz a la altura 665 en millas de Um Kasar, habían encontrado un navío procedente de la actual Rumania. Al divisarlos e intervenir dentro de esta frígida nave, nada había, solo crujidos de mástiles, y de la verga mayor que estaba espoloneando, más si iban presentando telones de los empalizados que provenían de Sighisoara/Transilvania; donde el semejantísimo Vlad Tepes se constaba sentado detrás de un aposento de capitanía escribiendo en su escritorio. Cada cierto intervalo el sacaba un pañuelo para secar su sangrienta nariz, como pizca de tinta gelatinosa, umbrosa y mancillada”
Canta Isaías: “La presencia del versado folio correspondiente hace relativo de la profecía del Emmanuel nacido de una virgen, que se asocia a similar profecía Virgiliana de la Cumana justificando su simbolismo profético. He aquí la amonestación que ennegrece los cielos donde su luz se retracta, miles son encadenados durante la anunciación de un milésimo que trepa abismos como el fatídico Strigoi, solo son los pasturajes tribulados que habrán de trasplantar las rebeliones que yacen dormidas para aviento del ideal de la incipiente dominación de su espiritual vestida de execración. ¡Se ha desatado conflagración del corazón que resiste su muerte y agoniza varias veces en el! Las condiciones aguardaran por apóstatas al negarse del agua que no les hace optima, haciendo el elíptico el radio de la obediencia del corazón Vernarthiano, colmado de gránulos de la Physconia grumosa cuya frecuencia se enquista en cuerpos de traicioneros, reinados y fúngicos linajes. El reinado de los santos juzgará pluralidad en los tronos con la devastación en fatuas beatificaciones en Pérgamo, ya amonestada por Mí.
Códice VII – Báculo de Sheesham
Vernarth sosiega su recostado sobre las literas del fuego de Sheesham, viga e Incienso con ultra poderes olfativos y sensoriales delineaban los núcleos elementales y fenomenales albergando y adaptando híper conectividad con probidad hinduista, akasha ejecutaba el fundamento esencial en las cosas de cosmovisión material; el primer elemento material palpable y concreto era creado por el dios Brahmá (aire, fuego, agua, tierra). Se trataba de uno de los elementos clásicos del hinduismo, pañcha-majá-bhuta o de los ‘cinco grandes elementos’; su característica principal que es el sabda (sonido), en sánscrito esta palabra significa «espacio”. Es la sustancia física eterna Akasha, del éter que fluye por los Akasha-Nautas por Vernarth en cada regresión parasicológica, Vernarth se coge de un báculo que era llamado “Bastón de Sheesham” lo adquirió una vez ansioso por entregarlo a su amada Toscana en la Catedral de Santa María dei Fiori en unas de sus Vidas Regresivas, lo esperaban atónito por Tiranizada impulsividad de los nobles en Florencia la cual una vez más venia retrasado de labranzas de la cebada y dioses fatuos próximo hacia el Porcellino. Esperó largas horas hasta que saliera su amada Maddalena de eucarística ceremonial, mientras el portaba en su mano derecha su báculo, en la izquierda una caja rectangular asible para su mano, dentro portaba esencias de potpourrí de lavanda y vellorita, una sortija con piedra de amatista revestida por un bolo cóncavo de oro, en el contorno supra circular llevaba adornos medievales de plata de Etruria de la Fiesta de la cebada pasada. Ante este aquiescente, la Sibila Samiense seguía portando clarividencia donde el profeta Isaías había desatado la conflagración del corazón que resiste la muerte, que agoniza varias veces en él. Desde hoy desde Kafersesuh en Ein Karem se abre el sello de pernoctación en la cuna donde Mariah se posa junto a su hijo, ya siendo parte de la litosfera de Getsemaní y Vernarth en el corazón de Maddalena.
Filogenia en Getsemaní: “El Homo Erectus se cruzó con múltiples evidencias de los seres que evolucionaban pro evolutivos-adaptativos, Neanderthal/HomoSapiens. Hijos de Israel se escribieron parábolas, epístolas, versillos, historias y libros, su tracto vocal y fonético hablaba de tempestades, factores ambientales entre cielo y tierra del “Gran ruido fuera de nosotros, pero poco silencio en nosotros”. Lo elemental es laringe que pronuncia la imagen que denuncia conceptos evocativos mínimos del sonido en distintas colocaciones del melisma en mega sonido, hablándonos cómo el lenguaje varía según la historia, el medio cívico-climático instruyéndonos a su umbral, y de su descendencia al desprenderse por las efusiones aéreas del lenguaje en asiduos niveles traqueo-laríngeo, que rige cobrando autoritariamente los intervalos de la vocalización y relación del entronque con la agricultura, y toda su dimensión descendiendo por internas paredes pero subiendo por parietales sobreexcites fuera de ella misma. Del poco aire que queda al mundo para proseguir digiriendo transitoriamente, se auto asume dejando fluir su extra-aire que es poseído en partículas mecánicamente que eran inertes, no en sus santificadas profecías con inferencias milagrosas e Inherencia que innova el factótum en súper existencia de los que aún no perecen por mano de un mandato monárquico. Así el mundo deglute aire en mitades asfixiantes y contaminadas enteras, mientras que otras la redistribuyen para quien necesita sentarse a la mesa a recoger el Pan y compartirlo con los demás a medias. “Aquí resuena el eco de cuerpo Cristológico”, que en arameo sindicará mucho más que un lenguaje en su sangre, grafema y fonemas de estilística de conmoción vibratoria más allá de su profundo tramo, repercutiéndose con la gracia de su enunciado divino” Joshua, digiere las espigas y las hojas de olivo simultáneamente disponiéndonos en sus brazos como hijos de olivo-lactantes, arriesgamos un borrego en sus brazos dándonos de lactar hidro-leche del sustento de un verbo creador.
“Hecho terminante de preservar el arameo y no extraviarlo con girar vueltas de las hojas en la historia” el arameo debe incorporarse para las veces que Joshua nos pastoree después de más de dos mil años aun. El que está caminando de un lado a otro para decirnos que todavía está aquí solo el sugerente confortar de su andar irá plagiando con su laringe el sonido de expresión, el borrego es mamífero, más mamífero que el hombre pues su enunciado formula balidos siempre reflejados en bases de su cráneo, para el resto de sus crías como lenguaje bíblico bajo los arcos iris de Querubines berreando junto a niños rodeándoles en idéntica intención. Homo habilis-Homo Sanctus en proceso que posee ortodoxa base, y capacidad anatómica periférica, atajo pitagórico lingüístico del devaneo del esternón al confundirlo entre sí no alterando su complejidad estructural ni funcional. Del potencial de Lepidópteras e insectos alados, surgirá el fenotipo que relacionará y relativizará la mecánica aramea o método arámico para no extraviar la lengua divina, así como también es sublime torque laríngeo de quien posee sangre y cuerpo arameo, pues su mecanizada mística devora mínimas palabras con máximas en un todo de gamas de cacofonías y campo prototipo: “Ven a mi campo aquí hablaran las espigas y los insectos más que el propio potencial mecánico de tu Voz”.
El túnel de viento se llenaba de Lepidópteras que volaban ascendiendo en forma helicoidal, todo se sensibilizaba con inminente advenimiento de la Saeta magnánima de Zefian que venía cruzando el perihelio desde el alto Áullos Kósmos, dialécticamente con abundancia credibilidad en el interior del túnel geológico del Prophytis Ilías, aliste a la turgente de su lactancia doctoral teológica. Timoratas y aluengas justicias se entornaban en quienes eran aun fatigados entreabriendo el colofón de los días que comenzaban con la identificación del báculo Sheesham, nombrándose regente de tribulaciones que se escurren por longitud de desplazamiento hacia su basal estática, enfocando idiosincrasias e inquietudes del Profeta Elías que les recibía en la cota 103 con pasajes de Corintios “Que los santos van a ayudar en la administración de santos milenarios. Su capacidad no tendrá los límites de su anterior vida terrenal”
Códice VIII – Ultramundis Alikantus
¡Alikantus, arquetipo de su viaje astral a escasos tres días que se coronaba en Gaugamela…! Bulle en escondites desazones después de aligerar sus ígneas pezuñas por las resbaladizas lerapetras de Lasithi, en pisadas que parecían ser los mismos influjos de los cometidos que trajo Kanti de Creta que se pirograbaron en el suelo Traciano antes de llegar a petición de su alocución. Recurre a Medea, antes de arribar a Tracia tras errar por distintos lugares en busca de protección y consejos para proteger a su amo Vernarth, mientras se sometía a ultimas libaciones opiáceas de sus vívidas liliáceas, angiospermas encapsuladas en su pectoral derecho en el anónimo de Alikantus pidiéndole a Medea una pócima para poder suministrarle a su amo y desinflamar su pectoral, para así poder usar su coraza Áspis Koilé en combate pues restaban sólo tres días para el duelo. Medea llegó a la ciudad de Atenas en un día tempestuoso con el fusco gris dantesco sobre la palma del acantilado escapando anteriormente, ahora cerca de Abdera, cual de oriente procedía evacuando fuliginosos plectros al poniente. Medea mientras miró al cielo tomó un pedazo de antracita de feldespato para crear jabalinas con aluminio que tendría que llevar Alikanto a su regreso junto a pociones para deshinchar su pectoral infectado, pintó el cielo con grises líneas entramadas alojadas posteriormente en su torcido bucle. Se divisaban desde el infinito señales que venían acoplándose en rayo de aleación, cuyo semblante parecía ser un rey, era Egeo que no sólo le ofreció hospitalidad sino que se enlazaría con Medea con la esperanza de que sus hechicerías le permitieran concebir un hijo pese a lo avanzado de su edad. La hechicera desempeñó sus expectativas, teniendo un hijo al que le llamaron Medo. Cuando Teseo, el hijo secreto de Egeo llegó a Atenas dispuesto a que su padre lo reconociera como heredero, Medea lo tomó como una amenaza al futuro de su hijo e intentó envenenarlo, pero Teseo la descubrió acusándola de cometer horribles crímenes y brujería, Medea tuvo que huir de nuevo. En esta cruzada tuvo la asistencia de Alikantus que la transportó volando desde Abdera, para no ser capturada y poder suplementar los potajes que le había solicitado Alikantus, también con alabardas que tenían que llevar a Vernarth para escoltarle de la esplendorosa injuria.
La convulsa Sibila Cimera adiestraba los símbolos del ceremonial dispuesto, forjando clásicos gestos de prodigalidad, nada menos era una cornucopia dada a los céfiros del Ultramundis que revolucionaban los mangoneares que se estremecían en piquetes de las dermis pétreas que vestían las murallas del túbulo final de 103 metros. El canal que lactaba referidas inclinaciones de Likantus que acosaba disciplinando en la discreción final de Teseo, para terminar con el folio del Egeo descendiente incumpliendo la sentencia de su hijo, evadiéndolo de su madrastra. En este coliseo se arraigó Teseo junto a su madre Etra que no le reveló el nombre de su padre hasta que cumplió dieciséis años. Llegado a esta edad, Teseo pudo levantar la piedra calzarse en las sandalias y espada de su padre e iniciar su viaje hacia Atenas para ser reconocido como hijo del rey. Desde en esta obviedad Vernarth en el ruedo de Gaugamela le vistió en sandalias Persikaia, que hacían de él quien jamás fuera y si muriera las llevarías asentadas hasta el altar de las comedias de la Tristanía, donde todo aquello surrealista sobrepasa facundos estrechos de realidad más que nada en trasegadas musas en sintomatología forzada de paranoia o heroína Sibila, que intermediaba en las Armas de Christi en la iconología del Códice Raedus.
Vernarth se sentó en el borde del Ultramundis, se quebró ante el cosmos y soledad que escondía a todos los seres que flotaban en reguera que le colectaba en su hipado, en tal juzgar que rehusaba todas las creaciones al sentir sus lamentos donde demonios le miraban desde la oscuridad que frágilmente acuciaba su magro occipital, atentándole de frente a Medea, evadiendo la sátira circunscripción Satánica para contravenir lo pactado con Egeo. La perjura reinaba en dudas de tragedia auspiciada de Komedia que acudía desfilando en la procesión victoriosa, cantando los triunfos de su dualidad paranoica trágica que se asimilaba entronada en mártires de tribulación, en la simiente de quien no cesa del Ubis Tragediopático, en hechos que hablan del hambre de soledad en todo hombre sumido del Ultramundis como único dimensional de quien arde en dudas y de Anastasis frustrada. Vernarth dice “ekáthisan” el Duoverso en consecuencia del Universo se sentó para secar sus lagrimeas, entonces Vernarth recibió desde la oscuridad del Ultramundis una luz dorada del Hippeis con aura de Tesalia adonde la krima o criminalidad era acaecida en tres cuartos acechando desde Maceo al confrontarle en la hora media de Arbela, Vernarth se auto-comprime desistiendo ensayos que procrastinarían ir reconstruyendo cuerpos cercenados ahí más que ir aislándose de sus propias almas, y pecados con almas hebreas de raíz Néfesh que asían fantasmagóricas en zozobra decapitación de quien vive en el exponencial en soledad del Ultramundis, Inexorablemente la infra terrenal santidad de éste que surrealismo sobrepasa a cualquier versículo, si es que Lázaro aquí en el túnel de viento que se levanta ante Vernarth abrazándole, alivianando la congoja de Alikantus de cumplirle su misión.
Códice IX – Ultramundis Phalanx
Los lábaros de la Phalanx se veían desde Asia en algunas de las cuadrillas fieles de Alejandro Magno. Comparecían úrsidos y Anfibios que venían por el paso cercano desde Gorgan. «La Serpiente Roja» que era una construcción defensiva, desde aquí venían los palafrenes de Alikanto provistos de grandes camadas de animales para el ente adherido a la caballería de Alejandro El Grande, esta increíble barbacana comienza en la costa del Caspio al norte de Gonbade Kavous, continúa hacia el noreste y desaparece en las montañas de Pishkamar. Proseguían los contrafuertes junto a Osos y Leviatanes, ellos formaban parte de los sueños totémicos que tenía Vernarth cuando asumía las alucinaciones dopado por las regresivas giras de espacios hieráticos al despeñarse en los trances e incorporarse en conexión con sus animales mascotas en ritmos y valses del ovacionar de los atabales. Alikantus venía raudamente volando casi sin detenerse sin distraerse, traía las pócimas e instrumentos de armería de la panoplia, venia ya dispuesto para las horas que venían a diligenciar pormenores antes de tomar la partida junto a la infantería Pesada, Ligera y Tesalonicense. Dentro de lo más elemental de su misión era hacer el protocolar de la pócima, retransmitir la prédica junto al Leñador y distribuir las jabalinas a los Hetairoi de Vernarth, al ancorar las cerúleas pezuñas del fuego ignoto de los Dioses, logra vislumbrar como a Vernarth le sacaban del dorso de un Elefante acometedor, estaba además acompañado por el astuto perro guardián de Alejandro llamado Péritas, que le insinuaba aprestarse y después levantarse con ventoleras de belicosos estratagemas. Vernarth venía de su última frugal sesión Opiácea para instituir sus lianas vegetales nervudas que comúnmente permanecían con algunas de ellas, quedando tronchadas en su vena cefálica y yugular atosigando su cerviz que siempre cunde en laureles de Capullo, promedios de intríngulis que tenía que engullir por algunos días. ¡Seguiría cotidianamente estando unido al infinito que le vio nacer como el Comandante más grandioso de Alejandro Magno ni imaginado, ni cotejado! La muralla Gorgan, poseía una longitud de al menos 200 kilómetros superior a cualquiera de muros romanos que se perfilaron en la arqueología como obras de baluarte, fue extenuante sobrepasarla tomando rumbo con fieras ya que se inquietaban al estar cerca de Tel Gómel al presentir que se estaban acercando al lecho de Vernarth; debido a que eran sus mascotas muy adoradas junto a los Cocodrilos Tupa. Los Alazanes eran prescritos por un vigilante del muro de Gorgan, siendo del ejército persa que fue seducido por los osos para combatir junto a Vernarth y casco Corintio.
Próximo al Bumodos, ya se veía a Vernarth jugar con sus mascotas, Osos, Cocodrilos, el can de Alejandro Magno. Más allá sumisamente se acercaba cimbrando su cuello escarchado, Alikanto o de Alikantus que procedía con donativos y fármacos para su amo traído de las falanges prestidigitadas por Medea. Vernarth se apreciaba casi emancipado de siegas de ramales y cepas venales, que mayormente poblaban su pectoral, ambos brazos llenos de tatuajes pestilentes que le habían colonizado. Casi al anochecer sobre los rebrotes y vellos de Zeus que comienzan a rebasar con las falanges de Vernarth, la Phalanx de macedonia que era formación de infantería creada y usada por Filipo II, más tarde utilizada por su hijo Alejandro Magno con la conquista del Imperio persa. La falange de Macedonia surgió de hecho de un plan y de la respuesta ante las holísticas modificaciones de las tácticas helenísticas estrategas tebanos, Epaminondas y Pelópidas de fuerzas de tierra que desplegaron a principios del siglo IV a. C. para oponerse a la superioridad aunque ya era decadente en formación hoplítica espartana, que se había ejercido en los combates terrestres entre las polis griegas hasta esa fecha.
La Sibilla Europea portaba la Gladius en su mano, más la intercambiaba con la Xiphos en alternancia por la muerte de inocentes encomendadas por Herodes el Grande, y de la evasión de la Sagrada familia a Egipto. Esto confirma la agrupación litúrgica del Triduo Pascual; aludiendo pasión de Cristo, perpetrando el dolorismo propio del Devotio a su muerte triunfante a su resurrección. El gran trasentido del surrealismo transporta a San Juan escarbando en las capas y hordas de Fe, su componencial de tribulación se movía en la cartografía egipcia y griega movilizando áreas de los triangulares de la Phalanx que se movían en bloque geométrico alcanzando los bordes de la hipotenusa gradiente del túnel de viento que les elevaba acorralando a la bestia que les visitaba fingiendo estar débil e imprecisa. Las dolinas se colapsaban en miríadas substancias en suspensión mientras las dos espadas Gladius y Xiphos se colmaban de sangre greco-romana. Aquí vegetó el verbo de Elías en la resurrección corporal con la similitud del cuerpo observado triangular Lazarino que se veía arrastrándose por la potencia de remolque de la iónica Phalanx en su aquistado. Eran Seres Equis que se abstraían en un arranque del Ser equis en su contrariado algebraico; una incógnita o algo que podría tomar cualquier cuantía en otras palabras o algo desconocido, para que son algorítmicos de enlace, y que provean corporalidad resucitadora en Lázaro de Betania dentro de ángulos de Geometría Sagrada. Las airones de oscilación presentaban vivíparos porvenires en observancia de visiones y perplejidad de conciencia, rigiendo la fisicalidad que se hacía resurgida en mundos rabínicos desde lo más alto, ocupando tronos en paréntesis más de tres veces ignorando el creer por medio de mayores incredulidades que la verdad directa y breve. Elías el profeta era magnetizado por el Cinabrio que ponderaba en un apocalíptico judío en el cuarto de Esdras, al final del reinado mundano disuelto que se muere en el Messiah mismo. Satanás no se cansa de atacar credibilidad de la Phalanx en colectores de dispensación estando fuertemente sujetado del Carmelo e infieles que nunca reviven en mismos cuerpos inconversos.
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