Mi vida es tranquila y así es como quiero vivirla, estoy en último año de preparatoria y soy aquel que no destaca con su presencia, dicho de un modo simple soy el que esta ahi pera nadie logra verlo, no los envidio siempre tuve la mala suerte de caer en las desgracias, tener un amigo en mi modo de vida solo seria poner ha aquel desgraciado en el mismo barco que esta a punto de hundirse, me gusta ir a lugares alejados y comer viendo a los demás vivir su vida normal, quien sabe si algún día viviré una vida con aventuras
Hoy es lunes el primer día de clases, conozco a cada alumno de esta aula, pero cuando me dirigí a mi mesa comencé a oír balbuceos como: ¿Quién es el nuevo? ¿Parece ser alguien nuevo? ¿Creo haberlo visto aquí el año pasado?. Actúan como si no me conocieran, idiotas yo estuve con ustedes desde el comienzo, ojalá y se olvidarán de sus propios nombres.
Todo el horario de clases fue una mierda, he llegado al punto donde deseo golpear algo. el timbre de salida comenzó a sonar, guarde mis cosas en mi mochila y me dirigí al baño.
Mientras seguía mi camino note a una pareja que estaba saliendo del baño, acaso se saltaron las clases para hacer sus cosas pervertidas ahí adentro, despreciables, como sea mientras sus cuerpos desaparecían al bajar las gradas seguí con lo mío y entre. A un metro de la entrada habían dibujado un circulo de invocación a su alrededor unas velas que estaban a poco de ser solo cera derretida, en la esquina de la puerta había un frasco con un líquido rojo, aunque solo tenía una pequeña porción sobrante el rastro que dejó marcado hasta la tapa daba la impresión de que era sangre, quise dejarlo ahí pero comencé a escuchar pasos y rápidamente entre al último cuarto de inodoros, cuando aquellos jóvenes se dieron cuenta de aquel dibujo en el piso, comenzaron a burlarse y a mencionarlos de diferentes maneras a los que hicieron aquel dibujo.
Siento pena por ellos, pero sería hipócrita de mi parte si dijera que no pensé casi lo mismo que ellos. Llevo un rato encerrado sin hacer ningún ruido, si salgo podrían pensar que fui yo quien dibujo aquel círculo y podría terminar siendo el centro de atención luego, prefiero evitar eso.
Aquellos jóvenes se retiraron del lugar, mientras escuchaba sus pasos alejarse poco a poco di un suspiro de tranquilidad, mi corazón está acelerado pero estoy feliz sin razón, aunque no sea el criminal siento que fui yo quien cometió el delito.
Una vez que el sonido de sus pasos comenzaba a ser menos audible salí de aquel cuarto metálico, el dibujo y los objetos ahí seguían en su lugar, me dirigí al lavabo, me lave la cara y el cabello, me mire al espejo y note que estaba un poco pálido.
-que rayos estoy haciendo, jaaaa solo quiero irme a casa y seguir igual.
No había ninguna toalla para secarme, exhale y metí mis manos en los bolsillos de mi pantalón para buscar mi pañuelo, pero sentí algo duro y recordé que había puesto aquel frasco en mi bolsillo, su tapa era algo extraña ya que tenía a un lado una especie de púa como la punta de un bolígrafo.
-acabare con esto ahora.
Intente abrirlo de varias maneras sin éxito, parece una tapa normal pero me parece raro que gire en ambas direcciones y no se abra, también intente jalar la tapa hacia arriba, me dio un poco de irá y lo tiré al piso, este al hacer contacto contra el suelo acabo rompiéndose.
-como si ya no tuviera suficiente, (suspiro) bueno que más da.
Comencé a recoger los pequeños pedazos de vidrio regados por todas partes, cuando encontré la tapa al tomarlo uno de mis dedos termino siendo pinchado por la púa.
-waaahh mierda, duele.
Solté la tapa y puse mi dedo en mi boca para calmar el dolor, volví a tomar la tapa teniendo cuidado de la púa.
-bien con esto he terminado.
Una vez que termine de reunir todos los pedazos los tire en el bote de basura, eso estaba resuelto pero por alguna razón mi dedo no dejaba de sangrar, abrí la llave del lavabo y dejé que el agua caiga sobre la herida pensando tal vez que así podría calmar el sangrado, pero aún había un hilar de sangre cayendo.
-esto no es bueno.
Ya me está preocupando, decidí ir a la enfermería, aunque estoy con una fe baja de si aún está abierto la enfermería, me dirigí a la puerta pero este de improviso se cerro.
-waaaa.
Que rayos la puerta no se abre, mire el círculo y note que esté poco a poco comenzaba a oscurecerse como un agujero negro, presione el interruptor para encender los focos y ver mejor, rastros de sangre, he dejado un rastro de sangre que al parecer cayeron unas cuantas gotas al circulo.
-¡Ay mierda! Esto es una escena cliché de las películas y mangas.
Dirigí mi mano sobre mi rostro terminando con una palmada en mi frente.
El círculo que ya parecía un agujero ya estaba a poco de terminar, de ningún modo quiero quedarme en este lugar para saber cómo termina, le di patadas y golpes a la puerta pero este parecía no haber recibido ningún rasguño, este es mi fin, no quiero terminar así, volví la mirada al círculo y una mano hacia su debut desde el interior, tengo miedo, corre, tengo miedo, corre, eran las palabras que escuchaba desde mi corazón, sentía como si me fuera a dar un paro cardíaco, aquella mano oscura como la noche parecía querer agarrarse de algo, se detuvo y su otra mano hizo su aparición, mientras aquella cosa salía, mas y más iba desapareciendo mi esperanza de vida terminando por resignarme a lo que pueda pasarme, con el último deseo de poder reencarnar y tener una suerte alta para no volver a pasar por esto de nuevo.
De aquel agujero salió una forma humanoide completamente negra, se podría decir que una sombra tomo una forma física, sus ojos rojos como la sangre se movían dando un recorrido por el lugar, algo sobresalía de su cabeza hacia su frente decir que era parte de su cabellera sería incorrecto, ya que al ser todo de negro lo que veo no podría decirse que fuera cabellera sino como púas grandes, pero estos oscilaban como algas en el mar, pero aquello que permanecía por su frente solo era inmóvil.
-¡Son cuernos!
Al instante de soltar aquellas palabras, eso que permanecía ignorándome fijo sus ojos en donde estaba, mientras que yo me encogí los hombros, mi cuerpo comenzó a temblar mientras mi corazón parecía detenerse poco a poco, mi mente solo soltaba, la jodiste a lo grande, tenías que hablar, tenías que hacer que el se fijará en ti, ya está nos llegó la hora, eso se quedó ahí solo mirándome, como si tratará de ver cuánto miedo me causaba.
-¡este fue quien me invocó! ¿No parece ser fuerte?.
-ehhh.
Eso comenzó a hacer comentarios hirientes, era más mi miedo por lo que me pasaría que mi enojo por lo que decía
-supongo que podría servirme de alguna manera, jaaaa.
En serio dijo eso exhalando como si no le quedará más opción.
-¿Sino te sirvo déjame ir?
Dije eso sin pensarlo mientras que eso inclino su cabeza como si no hubiera entendido lo que dije, me agarre la cabeza con las manos mirando hacia el piso, mi rostro mostraba un aire de miedo y desesperación, mientras gritaba en mi interior -aaaaaaahhhh que demonios dije. -oh no ahora sí la jodi a lo grande.
Eso comenzó a acercarse hacia mi, y se sentó en mi delante.
-para estar asustado, no, aterrado aún puedes hablar me haz sorprendido un poco niño.
-kykykykyky.
-Ki.
-kkyyyyyyyyaaaaaaa.
Mi visión se puso borrosa y sentí como si mi cabeza tocará algo duro.
-¿………….?
EL VACÍO
Este lugar es insoportable, no hay nada más que oscuridad, desafiar al supremo para salvarlos quizás no haya sido una buena idea, y pensar que todo haya acabado así, una eternidad en este lugar sin poder ver nada y tampoco morir es el castigo correcto para este traidor, cuánto abra pasado, ¿quizás décadas o Siglos?, Llevo tanto aquí que el tiempo se volvió algo inexistente para mí.
Mientras me encontraba dentro de mis pensamientos sentí como si el viento recorriera mi cuerpo aunque sea leve, quizás mi cuerpo ya está tan atormentado por no sentir nada que recrea lo que sintió alguna vez.
Escuché un sonido de golpe de madera, ya he llegado a ese estado eh, mire hacia arriba y note una apertura circular, solté una sonrisa irónica como si no creyera lo que estaba viendo, y otra vez el sentimiento del aire chocando contra mi piel se sintió, estire mis alas que no usaba desde hacia tiempo he intente alzar vuelo pero estos estaban tan fuera de práctica que solo llegué a sujetarme de la superficie de la apertura, moví mi mano buscando algo con que subir pero no había nada, me impulse otra vez y solo logré alzar mi mano pero ahora solo me quedaba subir.
Una vez que salí de ahí aquel agujero se cerró, estaba en una especie de casa pequeña que emanaba un olor a azufre pero de alguna manera sentí un poco de felicidad de poder utilizar mis sentidos de nuevo, di un vistazo al lugar y me parecía extraño las cosas que había, era silencioso pero como decirlo de alguna manera era reconfortante a comparación del vacío en el que estaba.
Estaba contemplando el lugar cuando una voz me interrumpió, era un niño humano parecía estar a punto de morirse del susto, ya había olvidado como se veían, pero se asemejan mucho a nosotros exceptuando las garras, colmillos y el estado de no poder volar, sus vidas también son cortas y solo crean caos, pero aún así siguen siendo los preferidos por el supremo, comencé a criticar su apariencia y aquel niño pareció enojarse pero aún así mantenía un rostro de miedo, me acerque un poco hacia el para verificar algo y en el instante en qué lo hizo el se desmayo.
Ya lleva un rato así supongo que aún siguen siendo frágiles, como si acabarán de nacer, una parte de su cuerpo comenzó a mostrar rastros de sangre así que fuiste tu quien me libero, jajajajajajajaja ¡Nada mal niño!, tienes mi agradecimiento.
Puse mi mano sobre su pecho y me fusione con el, al ya no tener un cuerpo físico terminaría muriendo en poco tiempo, pero al fusionarse con el mi vida dependerá de la suya, aunque es una mala jugada aún tengo un objetivo que cumplir.
-aaaaaaahhhh.
Me desperté y solté un grito sin querer, mire por todas partes pero no había nadie, aquel dibujo en el suelo era solo eso, el agujero negro no existía, sentí alivio pero a la vez una incomodidad, tome los objetos que estaban alrededor del círculo y los tire a la basura, saque mi pañuelo y con un poco de agua borre aquel dibujo, una vez que acabe salí de ahí y me dirigí a la salida del colegio.
Cuando me disponía a salir recordé que tenía que ir a la enfermería, vi mi dedo y no presentaba ninguna herida, acaso todo fue un sueño, no, no, no, sino como explicaría que me encontraba tirado en el suelo, mmmmm, debo estar cansado solo haré como si esto nunca ocurrió.
Desde ayer por la tarde he tenido el presentimiento de que alguien me vigila, no pude dormir bien por las pesadillas que aparecían en cuanto me quedaba dormido.
Estoy que cabeceo de sueño, tengo la cabeza acomodada en mi mesa, la mesa es dura pero ahora lo siento como si fuera una almohada, unos pasos llegaron hasta donde me encontraba.
-ajam.
-¿…….?.
-ajam.
Volteé la cabeza hacia su lado y levanté la mirada, era la encargada de la clase, la mirada que tenía era la de alguien que fue chantajeada.
-¿Tienes un momento?.
-pues en qué puedo ayudarte.
Lo dije sin ninguna motivación, pero en cuento ella escucho eso cambio su mirada a una de asesina, levanté mi cuerpo y me puse recto, ella me al mirarme hacer tal acción se sorprendió por un momento y termino dando un suspiro.
-nuestro maestro tutor te espera en el salón de asesoría y quiera que vayas en la hora de salida.
-¡Ehh!.
Ella se alejo de mi lado y se dirigió hacia donde estaban sus amigas para seguir con su conversación.
Tenía dudas del porque el maestro tutor quería verme, pero el sueño que siento ahora es algo que no puedo evitar.
Han pasado ya unos veinte minutos desde que tocó el timbre de clases y el maestro a cargo no venía, es un poco raro pero si el maestro no vino entonces eso me da tiempo para dormir.
Me he despertado por un ruido que provenía de la nada, el sonido era como la de una tuba desafinada, no pude reaccionar bien, ya que estaban aplastándome, algo era seguro, algo que estaba afuera les llamo la atención y por eso estaban como moscas pegándose a la ventana. Me levanté y mire hacia afuera, una especie de remolinos de veían en el cielo, las nubes comenzaron a teñirse de rojo, verlos me recordaba los algodones con sangre que las enfermeras botan en los tachos reciclables luego de una operación, el cielo mantenía su aspecto, mientras aquel sonido iba deteniéndose de dentro de los remolinos comenzaron a salir aves en gran cantidad o al menos eso creo.
Estaba equivocado, a esas cosas ni siquiera podría considerárseles aves de ninguna manera, cuando uno de esos se apareció frente a nosotros.
-aaaaaaahhhhhhh ×23
-una gárgola.
Mencioné a ese monstruo de cuento, pero nadie me oyó por los gritos que hicieron todos al unísono, comenzaron a correr hacia el pasillo sin importarles siquiera que eso estaba afuera, la gárgola soltó un grito y en un instante choco contra la pared de atrás de mi, me quedé quieto con el alma en la garganta, comencé a girar mi cuerpo hacia atrás mientras trataba de pensar en algo, aquella bestia comenzó a quitarse las mesas de encima, la entrada estaba tapada por algunas mesas que salieron volando cuando la gárgola impacto contra las mesas del otro lado, la único opción de salir era aventarme por la ventana, lo malo es que estoy en el tercer piso.
La gárgola al deshacerse de lo que tenía encima, fijo su mirada en mi mientras estaba sacando las mesas atascadas en la entrada, se avalando hacia mi y por instinto me agache, y este volvió a impactar sobre la pared, está vez se fue de lleno hasta el otro salón de clases, aproveche esto libere la entrada y salí rápidamente de ahí.
Estoy en el primer piso y lo que estoy viendo ahora es algo que casi me hace llorar, cadáveres por todos lados, la gran mayoría estaban despedazados, quise gritar pero habían gárgolas por los alrededores que aún no notaban mi presencia, me di la vuelta y me dirigí al segundo piso.
Estoy aterrado me oculte bajo la mesa de maestros, los sonidos que provenían de la ciudad me daban una idea de la situación en la que se encontraban.
-¿Qué te tiene tan aterrado?
-¿……..?
Oí una voz, un rayo de esperanza iluminó mi ser, salí de debajo de la mesa y me asome por el costado de la mesa pero no había nadie.
-¿A quién estás buscando?
Mire por todos lados pero no había rastro de que haya alguien mas aquí.
-hey es descortés dejar a alguien hablando solo.
-quien eres y dónde estás.
-soy a quien liberaste ayer.
-Liberar¿……..? Así que no fue un sueño.
-no lo soñaste eso fue real.
-bueno que me hables ahora significa que me ayudaras.
-lo lamento niño pero no puedo serte de ayuda, pero puedo prestarte mi ser.
-eh ¿a qué te refieres?.
-obtendras mi fuerza.
-¿………..?
-te voy a prestar mi poder de demonio.
-eso significa que obtendré poderes como en los mangas.
-no se a que te refieres, pero si hablas de magia lo lamento pero eso no existe en este universo.
Decepcionado estoy decepcionado, mi fe de conseguir un power up se fue a la mierda, de que sirve ser un demonio sin magia, debo estar soñando si eso es lo más seguro.
-oe no muestres decepción a mi ayuda, soy un demonio y eso no significa que deba tener algo inexistente de tu universo.
-¿Y de que me sirve un ser que no me pueda sacar de este lío.
-eso quiero preguntarte, ¿En qué lío estás metido?, Tratándose de un humano no habrá límite en el que no pueda ayudarte.
-vez la situación en la que estamos, estoy, como sea.
-Veo lo que tú vez después de todo estoy dentro de tu cuerpo.
-mmm tiene sentido, espera, waaa, waaaaaaaaa, sal de mi cuerpo, no quiero tener un demonio en mi interior, en qué parte estás, te alimentarias de mis órganos, o de mi energía.
-oe ¿acaso quieres enfrentarme?, eres despreciable, no vuelvas a compararme con un parasito, soy un demonio sin cuerpo físico, al salir del vacío tome prestado tu cuerpo y ahora tu alma y la mia comparten el mismo cuerpo, dicho de esta manera si tú mueres yo igual, mi vida es tu vida.
-mierda que daño le hice a dios como para merecer esto.
-hey cálmate no es que vayamos a estar juntos por siempre, bueno retomando lo anterior en qué lío estás, muéstrame.
Me levanté y me acerque a la ventana pero como nada ha cambiado a excepción de que ahora la ciudad está hecha un caos.
-oh no, dime qué esto es normal por aquí.
-eh, esto no es para nada normal, los remolinos en el cielo no son normales, se supone que las gárgolas son solo bestias o monstruos que uno cuenta a los niños para asustarlos.
-he de que hablas si los estás viendo, además todo pensamiento en la mente de que cada ser son visiones de razas que existen en otra realidad.
-eh eeeeeeehhhhhh, no me jodas mi cabeza está por explotarme.
-no entres en confusión, necesito que te concentres para solucionar este problema.
-bueno y que es lo que debemos hacer, ……….. esto señor demonio.
-oe dirigite a mi como, ………. Esto, ajam llámame dante.
-a mi solo dime Daniel.
Luego de más de una hora Dante me enseñó algunas cosas sobre como manipular la energía de un demonio, aprendí a como agudizar mis sentidos y a como manejar la energía cero, la cuál es una energía que utilizan los demonios para su conveniencia de acuerdo a su recepción física.
Esto no es como tener magia, pero se asemeja a las habilidades de un demonio de los mangas, diría que peor es nada pero sentir que mi vitalidad es alta me hace sentir que soy indestructible y poderoso.
Estuve haciendo algunos movimientos como los boxeadores en práctica y en uno de esos por la emoción termine golpeando una mesa que termino chocando con las demás de su línea, lo cual provocó, que varios de esas gárgolas vinieran a observar al causante de ese ruido.
-Esta bien que estés emocionado pero porque tenias que llamar de inmediato a las gárgolas.
-no es que lo haya hecho porque quería solo fue un accidente.
Las gárgolas se acercaban a mi como tratando de rodearme, corrí hacia uno de ellos y al mentalizarme mi mano se torno de un color negro he incremento su tamaño, le di un golpe y este termino en el suelo, al ver esto me emocioné aún más y me dirigí hacia los demás, uno a uno las cinco gárgolas cayeron al suelo.
-tomen eso malditos desgraciados.
-nada mal para alguien que acaba de volverse un semidemonio.
-siiiiii espera que acabas de decir.
-que ahora eres un semidemonio, asi es chico una vez que utilizas este poder pierdes la mitad de tu humanidad, pero si logras absorberlo por completo dejaras de ser un humano y serás un demonio completo.
-este ya es un caos al menos se lo que me espera al final de mi vida ja.
Estoy viendo el atardecer ver está escena me hace sentir que todo está perdido, las balaceras que provienen de la ciudad hace que tenga esperanza de ver a mi familia, pero también siento que estoy mintiéndome y por ello ahora tengo sentimientos encontrados, ya no tengo nada que hacer aquí, tengo que ayudarlos o sino terminaré solo.
Estoy en el primer piso, tengo algunos vidrios rotos en mi mano, al ver qué las gárgolas pululaban si darse cuenta de mi presencia lance los vidrio hacia el piso, el sonido de vidrios rompiéndose hizo que las gárgolas dirigieran su mirada hacia mi y las gárgolas que estaban volando por los alrededores comenzaron a descender para unirse al ataque con sus camaradas.
El número que se acumuló en total eran de 10 gárgolas, estoy listo para enfrentarlos.
-vengan a por mí malditos.
-¡Huye! Si no lo haces te mataran.
Una chica apareció de la nada y comenzó a gritarme, eso ocasiono que uno de esas bestias apareciera de detrás de ella con su mano derecha la tomo del cuello y con la otra le arrancó la cabeza.
Siento náuseas, siento irá, me siento alguien pequeño, mi mente está en blanco, mis manos comenzaron a temblar, siento que mi cráneo quiere partirse, solo quiero asesinarlos destruirnos como si fueran de porcelana.La gárgola viendo mi reacción, lanzo el cuerpo de aquella chica hacia mi eso hizo que mi irá sea aún mas.
Solté un grito de furia tan fuerte que sentí como si mi garganta se partiera en dos, las gárgolas hicieron lo mismo y en ese momento corrí hacia ellos, y ellos vinieron en mi encuentro, al más cercano de un golpe le atravesé el estómago los dos que estaban a su lado lanzaron un golpe saque mi mano de su estómago y lo moví hacia la derecha evitando el golpe de uno y esquivando el golpe del otro, el cadáver de la gárgola que se encontraba tirado me sirvió como impulsor y de un salto tome la cabeza de la gárgola me gire hacia su espalda y con un movimiento de mis manos le rompí el cuello, y me abalance sobre el otro haciendo lo mismo, al caer al suelo recibí un golpe que me hizo dar vueltas por unos metros, me levanté y corrí hacia el desgraciado que me dio tal golpe, este juntó sus manos y las levanto, me di cuenta de lo que trataba de hacer cuando se disponía a bajar sus manos juntas me detuve, y al no poder detener su ataque sus manos recibieron el impacto del suelo, su cuerpo estaba inclinado y aproveche esto para darle una patada en el rostro, al recibir mi golpe el cuerpo de la gárgola cayó hacia atrás, los demás al ver eso dieron un paso atrás y dos más vinieron hacia mi, solté una risa y me prepare para recibirlos, cuando de pronto algo cayó al suelo, mire hacia arriba pero no había nada ni nadie. No tuve tiempo de ver qué era ya que las gárgolas pasaron por encima de eso, los esquive y me dirigí a aquel objeto, era una espada negra, me preguntó que hace algo así en este lugar no importa esto me facilita las cosas, las gárgolas estaban de regreso, uno se adelanto y se avalando hacia donde estaba, salte a un lado y este cayó al suelo, levanté la espada y se la clave por la espalda, volví a levantar la espada y de una sola movida le corté la cabeza, las demás gárgolas al ver esto alzaron vuelo y huyeron del lugar, solté la espada y dejé caer mi cuerpo hacia atrás de cansancio.
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