Siento desde mi aliento Que mi día a día es como aquel Condenado a la guillotina que le quedan Escasas horas de vida sintiendo el Frio de la hoja que cercena su alma Se lamenta en un mar de lágrimas escarlatas su sufrimiento no para como Las gotas de lluvia que caen sobre la tierra en un aguacero que inunda su vida de tristes lamentos y desespero Al saber que esta puede ser su último respirar su último parpadeo que contemplando la muerte venir por el No encuentra consuelo en los recuerdos de las dichas pasadas y de esta manera no le queda mas que resignarse a su cruel miserable destino. Destino que no pudo jamas controlar siquiera desviar pues estaba escrito desde el día que nació Esta melancolía que carcome su ser es algo con lo que aprendes a vivir que no puedes evitar que no puedes dejar jamas pues las malas horas siempre están allí acompañando al ser.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS