Oh amanecer, sol destellante
Corres sin que nadie te detenga
Te levantas en tus fuerzas
Nunca esperas, avanzar es tu lema.
Puedo oír los llantos de donde te alejas,
Son los sollozos de los hombres tratando que vuelas
Son los jóvenes que viejos se han vuelto
Y tardemente se vieron a oscuras en lamento.
Pero para mi amanece,
¿Soy acaso afortunado al verte desde temprano?
Me encandila tu brillar, me enceguece ver tanto
Juventud mira con sabiduría, que ya pronto será mediodía.
Sol del medio día, presente como ninguno
Todo lo abrazas, y sin alientos dejas al mundo
No hay sombras, solo claridad,
Y yo despavorido contemplo tu avanzar.
Sol del atardecer, de roja cabellera al viento
Ya eres sabio, y me miras lento
Me impresionas, pintas el horizonte de fuego
¿Te vas? No por favor, me he vuelto viejo.
Nose si volverás, que retroceda el tiempo
Se me olvido vivir mientras brillaba el cielo
No me di cuenta que te ibas luego
Quédate, se me va el aliento.
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