Agonía.

Todo a mi alrededor esta frío y aun así mi pecho se siente caliente…

Mi mundo gira y el mundo también, aun así me siento detenido, enjaulado o abandonado… lucho contra mi mismo todos los días, siempre estoy exhausto…

Busco incansablemente el amor, la amistad o el ruido para evitar quedarme atrapado con mi mente, pero existe la noche, la bella noche nunca falla, siempre llega mirándome a los ojos, sonriendo y manteniendo su distancia… mostrándome que ni ella ancia mi compañía

La noche llega y mi alma se seca… la desilución, el odio y el rencor empiezan a lanzar sus primeras mordidas y el arrepentimiento me somete y terminó a merced de mis monstruos, la noche, tan hermosa como puede ser se convierte en mi verdugo, mi cuerpo busca desesperado la luz, mi mente se retrae y huye de todo escondiéndose en las profundidades de mi pecho, buscando algo que hace tiempo me abandono, encontrándose con nada más que un cascarón vacío

El frío se entierra en mi piel y lucha contra los vestigios de mi calor… NO, no son suficientes…

Termino congelandome, el silencio se apodera de mi habitación y la agonía cierra la puerta.