Adiós

Debia despedirme…

¿como no hacerlo?, Si fueron tantos años de historia que simplemente hoy ya no existen.

Debía despedirme, por amor propio, por salud mental, para dejar atrás el orgullo y comenzar a sanar.

(es suficiente)

Debía despedirme, porque ha no es necesario recordarte, los años han pasado y todo lo que queda son recuerdos, algunas fotos, algunas cartas y ese sentimiento de ausencia en el alma.

Debo despedirme porque este amor tan inmenso ya no lo siento, al menos ya no es tan intenso.

Debo despedirme por este desamor que cala profundo los huesos que por las noches largas son tortura mis pensamientos.

Por lo que fue, por lo que es, por lo que será tomo lo que queda y vuelvo a caminar, vuelvo a sentir (con miedo), vuelvo a soñar, vuelco a imaginar una vida donde tu ya no estás.

El corazon sigue roto, algunos me dicen que ya vendrá otro, otro que compondrá, más yo no deseo nada, nada que me pueda dañar.

Hoy dejo ir lo que a mí corazon hacia desistir, dejo ir lo que me detenía mi andar, me quise despedir así porque ya no tengo miedo de volver amar, porque tú amor enfermizo me enseñó que ya nada puede quebrar mi corazón, que la vida da un nuevo lugar para comenzar a sanar.

Tan solo digo adiós, porque si no es hoy …