Quisiera que todo fuera un sueño
y que al abrir mis ojos
pudiera ver tu rostro de nuevo.
Aun no entiendo por qué los abuelos no son eternos.
Me faltaron muchas cosas por darte; más amor, comprensión y de besos poder llenarte.
La distancia me impidió un último abrazo entregarte, tomar tu mano y escuchar tu risa constante.
Que falta tan grande haras
sin tu presencia nada será igual.
Que honor me dio Dios ser tu nieta y privilegio llamarte abuela.
En la otra vida nos volveremos a encontrar y tomadas de la mano en el Paraiso caminar.
Te amo y te amaré de mi corazón nunca te sacaré y tu luz por siempre seguiré.
OPINIONES Y COMENTARIOS