La televisión en Venezuela se ha convertido en el medio de comunicación más importante del país, el de mayor penetración y de más movilización económica. Sin duda alguna, es este el medio de distracción e información más extendido entre las familias venezolanas, ya que en cada hogar se puede encontrar al menos un aparato de televisión para disfrutar de la programación que transmiten las distintas plantas televisivas.
En la actualidad nuestro país se encuentra sumergido en una crisis político-económica, donde los medios de comunicación no escapan de ella siendo las televisoras una de las más afectadas por esta, creando problemas de presupuesto para realizar nuevos proyectos. La censura por parte del Estado se ha evidenciado en los pocos programas de opinión que aun logran tener al aire los distintos canales de televisión.
Muchos programas y telenovelas se han dejado de producir, actores y actrices han tomado la decisión de irse a países como México, Colombia y Estados Unidos para trabajar en diferentes producciones que se realizan en estos, ya que en nuestro país no tienen la posibilidad de mostrar su talento, para suerte de ellos han logrado tener éxito.
En nuestro país, la producción nacional en los distintos canales de televisión ha disminuido considerablemente, llegando a tener que retransmitir programas que fueron transmitidos en años anteriores o colocando programación extranjera.
El cierre de la planta televisiva Radio Caracas Televisión (RCTV) en el año 2007 por la no renovación de la concesión por parte del gobierno del presidente Hugo Chávez, propicio el éxodo del talento que laboraba en este canal hacia el extranjero y a otras plantas televisivas en el país.
Hace falta renovar en la medida posible la programación en todas las televisoras, incentivar la producción nacional, crear programas que no caigan en la mediocridad sino que transmitan valores a la sociedad, dramáticos que contengan una trama interesante y dejen algo útil al televidente, programas de opinión que reflejen la realidad del país de una manera objetiva e imparcial, esa es la televisión que necesitamos en Venezuela.
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