Teoría del caos, efecto mariposa.

Muchas personas no creen, no saben, no piensan, o no entienden la llamada Teoría del Caos o Efecto Mariposa.

Todos, seguramente, habremos pensado en algún momento de nuestra vida qué o cómo sería el mundo si no hubiéramos existido o qué pasaría si morimos. ¿Cambiaría algo en el mundo? ¿En las personas? Lo cambiaría absolutamente todo. Si piensas en algo, haces un movimiento en vez de otro, dices una cosa en lugar de otra, afecta a la siguiente acción que hagas, y ésta acción a la siguiente, con lo cual afectará a lo y los que están a tu alrededor y, a su vez, a los de su alrededor y así continuamente con todo y todos.

Una persona en Australia que escoja beber un vaso de agua en vez de una coca-cola afectará en la vida del resto del mundo y, eso pasa con cada acción de cada individuo, animal, cosa u objeto de este universo. Es como las fichas del dominó; todo está conectado y si se mueve una ficha se moverán todas las demás.

Si escoges ahora terminar de leer esto en lugar de dejar tu lectura a medias, la acción que hagas, independientemente, de cada una de las dos opciones será diferente. Por lo que todo tu futuro será distinto.

Por este hecho, el azar no existe. Pongamos que lanzamos una moneda al aire esperando que salga cara o cruz. Dependiendo de cómo la pongas al tirarla, qué pienses en ese instante, con qué mano lanzarás, cómo corra el viento en ese momento o desde qué ángulo lo hagas, podrá salir cara o cruz.

Lo mismo pasa si tiras una pelota por un tejado. Dependiendo de cómo lo hagas, puede caer por un lado u otro. Por lo tanto, el azar no puede existir, la casualidad.

La teoría del Caos dice que; el aleteo de una mariposa en China puede provocar un huracán en Nueva York. Volvemos a lo mismo, cada acción, ya sea de algo o alguien, vivo como inerte, afecta a cada cosa existente.

Si yo de pequeña no me hubiera parado a mirar una piedra que apareció por mi camino y haber pensado en romperla para ver su interior, o si no se hubieran cruzado por mi camino montones de hormigas, las cuales tuve que saltar para no pisarlas, no me hubiera hecho una brecha cuando tropecé. Si esa piedra y esas hormigas no hubiesen aparecido en mi vida, seguramente ahora no estaría escribiendo nada de todo lo que pone en este texto. Mi vida, la gente que conozco, personas a las que quiero… Todo sería distinto. Por este hecho, nunca se debe arrepentirse, porque si esa persona no hubiera cometido X acto, dicho individuo, pudiendo ser cualquiera, no estaría donde está ahora mismo, y el resto del mundo tampoco. Por lo tanto, la buena o mala suerte no existe debido a que todos y todo dependemos de todo y todos. ¿Nunca te has parado a pensar que el mundo tiene un orden?