Siendo de noche, 

divagando entre pasillos,

con los bolsillos vacíos,

un teléfono viejo,

un paquete de chicles, 

una herida en la rodilla, 

un zapato sin suela, 

y la lluvia encima. 

Sigiloso en la oscuridad, 

espera a la víctima asaltar, 

ojos brillantes,

atracaban desde la espalda.


«Dame todo lo que tienes, después te haré gozar, obedece o recibirás el puñal» 

Mis bienes con gusto he de entregar,

pero mi cuerpo no te puedo dar,

es lo único que me queda,

lo único a lo que puedo llamar hogar,

siendo como es, 

si es tu deseo acribillarme,

libremente puedes matarme. 

Se llevó el teléfono viejo, 

me regaló una bofetada

y una patada en las entrañas.

«Es todo lo que puedo contar señor policía,

era un ladrón, solo que se equivocó 

trató de robar a quién nada tenía, 

más que la convicción de respeto por el cuerpo».

Creado por: Ema UB

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