borrador

La noche caí yacía la esencia de la oscuridad pero dentro de todo solo eres un espectador más de la belleza de un simple resplandor, una luz que a lo lejos parece la salida de tu propio abismo. Miras a tu alrededor brotan los recuerdos de un alma que ya no habita en ti-se detiene te observa fijamente como lo solo ella lo sabe hacer corres hacia ella pero no la puedes acariciar, viene a tu mente lo suave que era sus manos lo delicada que era al hablar parece tan real ella sigue su camino sin detenerse rasga su vestido con la fuerza de 10 hombres y la desesperación de un vehemente contrastando con la paciencia de un cazador asechando a su presa. Intenta hablar pero no hay sonido en sus palabras logra señalar un aviso de precaución en todo el tiempo que llevo en este lugar no me había detenido a verlo, reparo con un gesto de confusión intento hallar la conexión con sus señales, fracaso en el intento alzo mi mirada y ella ha desaparecido el pánico se va apoderando de mi me asfixio en las miles posibilidades de no encontrarla de perderla nuevamente exploro todas las rutas del edificio, accedo a un par de batientes pero no la hallo- la soledad se ha vuelto mi compañía el silencio mi consejera el miedo mi protección la ignorancia mi felicidad mi mente se resiste a la absurda idea de dejarla ir, me estanco en cada pensamiento puedo permanecer horas entre una idea y otra total todas acaban en una misma dirección ella