Soy el prisionero
que odia y ama los barrotes,
doy cuerpo con rencor y pena
a los días en el muro.
El lobo que ansía
la Luna y se esconde,
con miedo a las alas
que le hagan llegar a ella.
El náufrago
que nada mar adentro.
La sirena del desierto.
El despertador,
verdugo de mis sueños.
La pira y la antorcha.
Los clavos de mi cruz.
Soy todo aquello que soy,
por lo que me impido ser.
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