Ya pase por eso una vez. Una terrible depresión con la cual llegue a pensar que mi vida no valía la pena y que era mejor acabar con ella, en lugar de seguir aguantando todo el dolor que sentía.

Recuerdo que fue en vísperas de navidad, casi llegando a enero para ser más exactos. Caí en la peor depresión y tristeza por la que haya pasado y no era algo raro para ese tiempo me encontraba bastante mal de mi apariencia física. El acné que tenía se había infectado provocando que se esparciera por todo mi cuerpo y aparecieron llagas en mi pecho brazos y espalda lo que me imposibilitaba moverme o hacer lo habitual sin sentir un espantoso dolor por todo mi cuerpo.

Ya no sentia mas motivaciones para seguir viviendo, sentía que mi vida ya había acabado por lo que tome la pésima decisión de finalizar con ella de una vez por todas.

Un dia por la tarde mientras todos mis hermanos estaban ocupados con sus asuntos yo estaba apunto de tomar la ducha que me daba diario, por mi situación, pero en esta ocasión iba a entrar para ya no salir con vida.

Había preparado una carta para esa ocasión despidiendome de mis seres queridos y dando la razón por la que tome esa decisión tome una toalla y la ropa con la que me cambiaría fui a la cocina y tomé un cuchillo en particular, no lo se pero ese cuchillo en especial siempre me había llamado la atención. Lo tomé y escondí en la toalla asegurandome de que nadie me viera mire hacia el cuarto de mis padres el cual estaba cerrado, como eran vacaciones y acabamos de volver de un viaje a la playa, en el cual sufrí demasiado debido a mi condición, mis padres estaban encerrados en su habitación; no me preocupe mucho porque ellos me vieran tomando el cuchillo y entrando al baño con el.

Ya estando en el baño puse el cuchillo junto a la tina y procedí a llenarla hasta que el agua cubriera todo mi cuerpo lastimado por esa maldita infección que tenía atormentandome ya bastante tiempo. Puse algo de musica en mi teléfono para tod se viera más natural, y coloque la carta junto a la puerta del baño.

Ya estaba preparado para cortarme las venas y acabar finalmente con ese sufrimiento pero…

Me vi atraído por una canción la cual no recordaba haber escuchado antes y no me sorprende no haberla escuchado, pues hace poco pase muchas canciones del celular de un amigo al mio y seleccione reproducción aleatoria en ese momento.

Decidí esperar un momento más para acabar con mi vida, me sentía realmente atraído por esa cancion la cual se llamaba «Rompase vidrio en caso de emergencia».

Al terminar la canción salí de la tina y la volví a reproducir una y otra vez, la misma canción me había hecho reflexionar, y tomar una mejor decisión, así que tomé la carta y la rompí en pedazos y la tire a la basura puse el cuchillo devuelta en la toalla, vacíe la tina y procedi a bañarme decidido a que seguiría viviendo y a que jamas volveria a caer en esta situación.

Si podía sobrepasar este problema podría con todo y jamás me rendiría eso fue lo que me prometí, sería una nueva persona más fuerte y con más valor para afrontar todos los problemas que se avecinan.

Cuando caigo en una depresión siempre recuerdo esta canción y recuerdo que «hoy no es el final, no se acaba aquí, los golpes te dan la fuerza para poder seguir».

Si yo no acabe con mi vida ¿Quién podría?

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