Comúnmente observamos en la televisión o el internet guerras hambrunas; Los ricos cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres. Todo es una lucha donde me salvo yo y los demás ¡Qué se jodan! Pero ¿Por qué la humanidad ha llegado a pensar de esta manera?, ¿Por qué preferimos darle de comer primero a un gato o a un perro antes que a un mendigo?, ¿Por qué despreciamos tanto la vida huma? Hemos avanzado tanto en tecnología, pero tan poco en humanidad.
Desde mi óptica hay muchos problemas que juntos conforman la humanidad individualista del siglo XXI.
Entre ellos podemos encontrar: El consumismo, la tergiversación del amor y por ende la falta de amor en cada ser humano.
- Consumismo
El consumismo moderno nos plantea que para ser felices necesitamos comprar objetos tales como celulares, carros, casas, etc. Que simplemente acumular riquezas nos hará felices, no importa como las obtengamos o a quien se las arranquemos.
Este consumismo nos involucra una lucha constante con nuestros iguales por buscar un ascenso en nuestro de trabajo o un reconocimiento, pero olvidamos a las personas que destruimos para alcanzar nuestros objetivos o peor aún no nos damos cuenta de que estamos condenando a las siguientes generaciones.
Este consumismo se basa en algo tan irreal como el mismo capitalismo: “Recursos ilimitados”. Sin estos recursos no podríamos suplir la demanda del mundo, pero cabe aclarar que estos recursos son limitados.
Pues bien contamos con recursos limitados, pero vivimos como si fueran infinitos, queremos cambiar cada rato de celular, vestir siempre a la moda, desechar nuestro carro porque hay uno mejor en el mercado en fin realizamos tantas estupideces para satisfacer nuestros caprichos. Cuantas veces no hemos condenado poblaciones enteras para satisfacer nuestras necesidades. Muchos dirán “Es que no sabía”, pues te digo hoy querido lector, ¡Estamos matando personas como tú o como yo!, solo basta realizar una pequeña búsqueda en internet.
Hoy no podemos hacernos los de la vista gorda, tenemos que recuperar nuestro sentido humano, para tomar conciencia de nuestras decisiones de consumo. Cabe añadir, además, que el consumismo nos somete a un círculo vicioso de donde se nos es difícil salir el cual es trabajar-ganar dinero-gastar.
Se puede ver reflejado así: se trabaja arduamente todos los días de sol a sol para obtener un sueldo. Después de trabajar llegamos a nuestra casa donde nos bombardean de publicidad por televisión o por internet para comprar y poder así “tener felicidad”, pues bien compramos y nos quedamos sin un Kopek (en honor a Dostoievski) y repetimos el ciclo volviendo al trabajo.
Cabe concluir que el fin último del consumo es llegar a una felicidad, la cual nunca se alcanza.
Sabes ¿Qué es el amor?
Alguna vez te has hecho esta pregunta, sabes ¿Qué es?, tal vez la definas como un sentimiento, una reacción hormonal, un deseo carnal, puede ser, la gente del común suele identificarse alguna de estas definiciones.
Todos estos pensamientos son equívocos ya que existen cuatro tipos de amor los cuales tienen diferentes definiciones.
Esta idea de amor se ha dañado gracias al machismo, al feminismo (que es el extremo opuesto del machismo), la pornografía, entre otras cosas como el porno auditivo.
De manera especial quiero hacer énfasis en la pornografía ya que tergiversa el amor al reducirlo simplemente al acto sexual. Un amor irreal, que solo busca la satisfacción personal y donde poco o nada importa la otra persona. Desencadenando que el ser humano se convierta en un objeto sexual que sirve exclusivamente para satisfacer mis necesidades corporales.
Tenemos que ser críticos en nuestra forma de pensar o si no donde iremos a para, ¡él es un ser humano igual que tú o yo!, hay que vernos, sentirnos y respetarnos como iguales, mirándonos siempre en la otra persona, para palpar sus dolores, angustias y tristezas.
Estas cosas y muchas otras desencadenan una falta en amor en los seres humanos, y no hablo del amor eros (el cual es entre dos personas, este amor es uno de los cuatro tipos de amor) hablo de un amor philia, el cual nos invita a ver a todos los seres humanos como son ¡Seres humanos!, qué fácil es odiar y que difícil es decir te amo con amor philia.
No somos cosas, no somos objetos que satisfacen nuestras necesidades económicas o sexuales, no son herramientas para escalar en nuestro trabajo, somos hermanos, debemos cuidarnos respetarnos y amarnos.
¡Qué diferente seria el mundo si nos interesamos en las otras personas como nos interesamos en los gatos o los perros!
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