Los ciclos de un Año Nuevo

Ya está un nuevo ciclo en la puerta de nuestra vida, esa vida que decidimos dividir así, en ciclos, nos gusta tener la idea que cada 365 días algo mágicamente cambia, ya sea por los fuegos artificiales o el champán de media noche, y hace de los próximos días unos totalmente nuevos y diferentes a los pasados, como si no fuese así cada nuevo día, claro, otra división de 24 horas, pero estas no todos se las toman tan en serio, un cambio de aires es para todos el inicio de un Año Nuevo, 365 nuevas oportunidades de cambiar, de mejorar, de conseguir lo que no logramos en las fracciones de vida pasadas, ¿que tan real es el cambio? Eso solo depende de cuánto creas en él, tú mismo, el cambio de año, de fecha e incluso de hora solo será relevante si tú haces que lo sea.

El tiempo siempre puede ser tanto un amigo como un enemigo y eso no cambiará ningún año, el reloj siempre va a verte con desdén desde una pared o desde tu propia muñeca, pero ya será tu decisión si lo haces tú amigo y cómplice, es una de las principales cosas para aprovechar en estos curiosos ciclos de vida.

Todos deciden hacer una ronda de “nuevos propósitos a conseguir” y siempre cada persona tiene uno que decir, pero admitámoslo NADIE, absolutamente nadie dice su anhelo más grande, su propósito más real, porque esos te los guardas para ti, como todas las cosas importantes ¿o no?, solo espero que esta vez tu nuevo ciclo sea como deseas, a veces ni tú mismo sabes qué es lo que más quieres, qué es lo que necesitas o si realmente deseas proponerte algo en específico, y es allí donde las nuevas oportunidades de 24 horas cobran vida e importancia, recuerda que tienes infinitas por el resto de tu vida, esas siempre están y muchas veces son más importantes que la gran fiesta anual, así que ¡por el señor tiempo!, solo recuérdalo, siempre recuerda que cada objetivo o propósito no caduca en esas próximas 365 oportunidades.