Te escribo como siempre, a la misma hora, desesperada, inquieta y más triste que nunca…
Aveces siento que le escribo al viento, otras que le escribo al mar y casi siempre siento que le escribo al cielo, tan inalcanzable e imposible, puedo estar cerca, pero nunca lo suficiente para sentirte mía…
Esto me está matando, me asfixia, me inunda, pero a la ves es lo único que me mantiene con vida. Te acercas para luego alejarte, me elevas para luego dejarme caer dulcemente, ¿ qué clase de juego macabro es este ?, ¿no te das cuenta?, no claro que no, nisiquiera se te pasa por la mente… Tú llegas tan tranquila a mi vida, para luego convertirte en el huracán más fuerte, no arrasas con todo, pero si das vuelta a todo. Así es, acá me tienes, enamorada de ti y tú estás allá contando estrellas…
Te anhelo, te espero, te cielo…
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