2020 para la historia

Un año de adversidades que nos aleccionó a poder ser felices con lo esencial, eludiendo las tradiciones y novelerías. Un año excéntrico, doloroso y de muchas transiciones, pero con eminente capacidades humanas para enfrentarlas (admirable).

2020 es:

• Un año donde se perdió seres amados. Doloroso al no poder verlos y tocarlos, pero maravilloso al poder sentirlos porque están vivos en el corazón.
• Un año que el presumido no logró pavonear sus ínfulas.
• Un año que aquel Inteligente competitivo no tenía con quien competir, y sentir ese ego.
• Un año donde se aprendió cosas que quizás no se atrevían hacerlas.
• Un año que ese trabajador incesante, dio pausa y aprecio más a la familia y recordó lo maravillosa que es.
• Un año que nos reinventamos para adaptarnos y vivir.
• Un año que nuestro planeta respiró.

Es sustancial la reflexión de esta amarga experiencia para poder aprender de ella. Si no lo hacemos ¿de qué sirvió?.

365 días para ser mejores. Pero, mejores como persona, familia, compañero, amigo, etc. Mi deseo es que la palabra de nuevo año sea el amor.