Vivo preso
del insomnio cada madrugada
vivo preso
en un rincón de la consciencia
vivo preso
donde tentaciones y deseos
son la misma dama
ahí, ahí vivo preso.
Me siento preso
de tu pestañeo y tu mirada
yo soy preso
de la ilusión de tu boca
mordiéndo la almohada
de tus suspiros, tus labios
de tu lengua, tus mamadas
de tu falda por el suelo
de tus pechos asomando
por la blusa desabrochada.
Vivo preso de tus miedos
de los todo y de los nada
de la amistad que nos une,
cobardía que nos separa
vivo preso de silencios
que aprietan tus muslos y
besan tu espalda.
Y sin cadenas que me aten
sin carcelero, ni barrotes
a los que aferrarme al
asomarme a la ventana
vivo preso
en una celda hecha
con mis propios huesos
donde agonizan mis ganas
de robarte un beso y hacerte
gritar en un polvo de esos
que reparan heridas
devolviendo corazones ilesos,
pero….
Yo sigo preso
amarrado a la seguridad
de la verdad silenciada
en una estúpida danza
de miradas de la que sólo
escapo para escribirte versos.
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