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QUETZALCÓATL NO FUE UNA PERSONA; ES UN ESTADO DE CONCIENCIA QUE PODEMOS LOGRAR.

Es la Idea Universal para superar la superficialidad del ego y de nuestra materialista modernidad”.

Quetzalcóatl es una concepción del ser como participante social, y predispone a escuchar la conciencia antes de actuar. La conciencia es el ámbito de la cultura del Quetzalcóatl interior.

Solo la evolución constante da cultura a la conciencia individual. Y puede llevar la concepción del ego a la visión de su participación social como un todo universal.

Quetzalcóatl no es un Dios sino un camino místico para abrir la conciencia a la Mente Universal y recuperar la divinidad perdida con nacer. Entender El Misterio de Quetzalcóatl es liberar nuestro ser del mundo y participar en la visión universal del ser cósmico.

Desde el siglo uno antes de Cristo Quetzalcóatl gobernó en las culturas mesoamericanas. Fue ruta y camino a nuestra verdad. Sus iniciados fueron gobernantes y educadores de sus sociedades.

Su regla: el gobierno perfecto es enseñar al ciudadano a gobernarse a sí mismo.

¿Método? Desinvolucrar al Alma de sus pensamientos y hacer de la voluntad un espejo del entorno y de las voces internas.

¡Pienso!; luego la Mente Universal está en mi. Y siendo esencia, origina nuestra conciencia de ser personas: “nuestro espíritu “. Esto nos lleva a aprender a “escuchar” a todas las fuerzas que internamente nos dan ideas y pensamientos.

La vida es ciclos. Y debemos evolucionar periódicamente pensamientos, ideas y la identidad que nos nos mueve: cada trece años los individuos, y la sociedades cada cincuenta y dos.

Quetzalcóatl es una metodología para evolucionar el yo, superando el egoísmo, para des involucrarnos del ego centro existencial. Para gobernar la vida interior y alcanzar una cumbre espiritual. Tal estado interno culmina en criterio la expansión de la conciencia y sus ideas.

Quetzalcóatl es el ser de la culebra, o personalidad, que mira al Águila o voluntad universal y actúa a favor de ella.