Remitente en Espera.

26 de Octubre del 2018:

Si el tiempo transcurre lento y el día se torna tedioso, pasa el rato aquí. Si te sientes sola, lee esto que mi texto te hará compañía. Si te encuentras en una situación difícil que te está orillando a tomar decisiones que no son las mejores, no te atormentes, respira hondo y despeja tu mente, deja que mis palabras te embriaguen, quizás estas te ayuden a encontrar una solución. Pero si el motivo de tú lectura es porque me recordaste por una canción, suceso o simplemente de manera efímera empezaste a extrañarme, tranquila, posiblemente yo esté pasando por lo mismo.

Lo sé, no nos hablamos y puede que nunca volvamos a hacerlo.

Sabes nunca comprenderé porque hacer tan especial la fecha de nacimiento, la considero de lo más hipócrita, pues no será distinto a la fecha en que muera, todos te aman el día que mueres. Sé que mi mensaje no lo pediste, que no lo esperabas, y es que no hay nada que no haya dicho, trate de que siempre lo tuvieras en cuenta y no sólo en tu cumpleaños.

Sofia, eres una gran chica, sumamente interesante, uno nunca se aburre de ti, no sientas eso, carismática, divertida, de apariencia introvertida, siendo que eres todo lo contrario, tienes un hambre por aprender, hacer muchas cosas, nunca dejas de soñar y eso habla muy bien de ti, porque a pesar del sin fin de metas que te pones y las ilusiones que estás generan, siempre has sido consciente de la realidad, un gran corazón de pollo, es chistoso recordar como a veces quieres hacerte la ruda y dura, terminas cediendo ante tu sentimentalismo, ojo, no quiero decir que por eso, termines siendo una cara bonita más, no permitas que te sigan tratando así, sabes mejor que nadie que eres muy hermosa, con muecas y gestos muy curiosos por no decir chistosos. Viene a mi mente la última pregunta que me hiciste, ¿Por qué todos dicen que tienes una linda sonrisa? Mujer, tienes razón, tú sonrisa es común, no posees la perfección, no tienes algo fuera de lo normal, y es que la impresión que me diste el poco tiempo que estuvimos juntos, es que brillas por tu forma de ser, es que sueles sonreír haciendo una mueca tan singular y linda, que cuando muestras tu verdadera sonrisa uno queda perplejo por aquello que sueles esconder. Isabel, se más segura de ti, no seas tan cobarde, que la raíz de tus problemas siempre es tu falta de valor para confrontar las cosas, sueles huir de ellos cediendo y permitiendo que se aprovechen de ti, sólo aplazas lo que realmente pasará. Siempre trate de decírtelo.

Mi Beia Dama, no ocupas que sea tu cumpleaños para recordar la excelente persona que eres, la maravillosa niña llena de sueños, tan linda. Siempre me encantó hablar contigo, escuchar tu voz, tu risa, tus imitaciones, chistes muy usados pero que siempre disfruté cómo la primera vez, ten más cuidado. Tienes un gran corazón, que aunque nunca pude estar dentro cómo quise y merecía, siempre consideraré lo mejor que alguien puede tener, eres digna de admirar, mereces tan sólo ser amada.

Si te preguntas que fue de la novela que aparece en la captura que te mande, se encuentra en este portal, aun es un borrador, pretendía ser ese mi regalo de cumpleaños, pero no quiero que se entienda forzada, nunca me han gustado las cosas así, más adelante comprenderás porque lleva ese título por nombre. Aunque, es obvio, se llama así porque siempre fuiste lo sustancial en mi día a día, siempre hablo de ti, bueno, hablaba. Lo más importante eres, por eso tanto cariño, por eso a pesar de todo te amo.

Dieciocho años estás cumpliendo, pensar que te empecé hablar cuando ambos teníamos quince años, duramos un año así y con dieciséis años por fin nos conocimos. Los días siguieron su ritmo y el tiempo nos trajo problemas, obstáculos provocando un pacto hecho en el momento más complicado, donde la tensión predominaba, la desesperación a flor de piel nos hicieron mártires del sentimentalismo, sin pensar en el gran camino que nos queda por recorrer, aunque francamente, con el respaldo de dos años de hablar constantemente contigo, donde cada charla era un gran regocijo, es que a pesar de tener diecisiete años de existencia, al menos para mí, los ultimo dos fueron lo mejor de mi vida, gracias a ti, llegaste sin esperarlo, la inmadurez de la mano nos acompañaba, un mar de incertidumbre y miedos al acecho nuestro, muchas cosas por experimentar, varias caídas por tener, un sin fin de errores por cometer y la inseguridad de nuestro ser nos carcomía, sin buscar motivos tú me los diste, nunca me cansaré de decirlo, por ti soy lo que soy, pues con una gran distancia entre los dos, siempre fuiste y serás la persona más cercana a mí, a quien nunca le tuve temor de mostrar mis ideas, a quien admiro por todo lo que pasó y sigue de pie, a quien con su chispa incendió mi alma y por más azul que fueras, tu mirada me decía que todo estaría mejor. Eres lo mejor que me pudo pasar, no me arrepiento de todo lo que hice por ti, de las lágrimas, de las decepciones de todos los momentos que tuvimos juntos, fuesen malos o buenos. Cada día de mi vida despertaba y le agradecía a todo por conocerte, nunca deje de verte como la primera vez que nos conocimos, como la mejor casualidad de mi vida. Sé que la consistencia de mis palabras no son las mismas,

Quién diría que después de todo lo vivido un día decidiste alejarte de mí, todavía me preocupo por ti, sé que hago que parezca que no, pero si lo hago. Sinceramente, no creo dejar de admirarte, adorarte, quererte y amarte como lo hago. Siempre tendré una canción para dedicarte. No eres mala persona, a pesar de que sólo me ilusionaste y al final fuiste una culera conmigo, el tonto fui yo que siguió y en el fondo, sigue de aferrado. Total, la esperanza al final muere. Si algún día quieres regresar, te recibiré, si en algún instante dejas tu miedo de lado y decides intentarlo de nuevo, no soy nadie para negarte esa oportunidad, o simplemente deseas hablar para decirme que me extrañas, adelante, corresponderé el sentimiento, pero, ten en cuenta, que así cómo te amo y te considero lo mejor que me a pasado, también estoy seguro que no te volveré a rogar ni mendigar cariño, atención y tiempo en esta vida.

16 de Noviembre del 2018:

Sí, estoy de nuevo aquí. No vengo con lágrimas entre líneas para reflejar la inercia de tu ausencia, es que claramente te extraño, aunque la ansiedad de querer expresarlo, gritarlo a desaparecido y no es por demeritar el sentimiento deteriorado que aun conservo. Te soy honesto, bajar las expectativas que tengo sobre los demás me a servido mucho, el hecho de que haya tomado esa decisión no es por ser un pretencioso como muchos lo son. No espero nada, ni mucho ni poco, es que ni espero, me cansé de esperar para terminar con un gran penar, mejor aprendí a aspirar para lograr, y francamente estamos haciendo bien en no buscarnos, pues corremos el riesgo de encontrarnos, aunque no puedo negarlo, me quede con ganas de un último abrazo pero es mejor así, para no derramar el vaso.

¡Oye! No se te ocurra mencionar mi nombre con despropósito, no te atrevas a pensar en mi sin razones aparentes, somos tan susceptibles a cometer errores, aunque fallar resulta ser selectivo, no vas por la vida estimando una falta que puedas cometer, somos conscientes de las consecuencias y eso por instinto nos hace precavidos… ¡Hey, cuidado! No olvides el peso de tus actos, cada decisión que tomes debe tener su propia premisa, pues la responsabilidad que recaiga en ti debes tomarla en cuenta. ¿Por qué? Simple, todo tiene causa y efecto. es que las cosas no pasan simplemente porque sí, somos un eslabón y como tal, los momentos que poseamos nos permiten cambiar un poco el objetivo, quizás acortemos o alarguemos el camino a este, pensándolo bien, somos la reacción de una interacción anteriormente cometida, una reacción en cadena… Espera ¿Error Selectivo? ¿Precaución? ¿Causa y Efecto? ¿Eslabón? Lo que trato de decir es lo siguiente; no fue una casualidad conocerte, no existe un destino marcado, somos eslabones que en un momento oportuno donde no fuimos precavidos, por causa y efecto, terminamos equivocándonos para terminar entrañados uno del otro, algo que perfectamente se pudo evitar, un error selectivo. aunque suene rebuscado, la negativa de lo sucedido, dio noches de largas charlas, una correlación de honestidad destinada al fracaso, dando como resultado lo que hoy estamos pasando.

No me recuerdes sin tener un motivo, no me pienses sin querer y no me refiero a que no estés segura de hacerlo, hablo de sentirlo.

18 de Diciembre del 2018:

Hola, es bueno volver a saber de ti. ¿Me has echado de menos? Me dejaste anonadado con tu mensaje, pero no es momento de saber las impresiones que dejó. Querida Sofía, se que las fechas nos ponen sentimentales, quiero recalcar algo, nuestra ultima llamada antes de que dieras punto y final, tu mencionaste que era momento de cerrar un ciclo (cual yo argumente que nunca existió, pero equis), nuestro ciclo, diste vuelta a mi página, aun con espacio para escribir en ella. Es curioso que el escritor sea yo y tu hayas sido la primera en volver al pie de mi página, a leer sobre quién a sido la mejor persona que conociste. Y no, no es una afirmación soberbia, son tus palabras. Aunque claro, puede que hoy Christopher me haya destronado. Pero te haré caso, creerlo esta en mi, si soy o no soy. Si no has cazado el hilo, querida, me refiero a que tu fuiste la primera en contactarme, en buscarme, eres quien siempre inicia el ciclo en el que estamos, no te sorprendas de que me cueste cerrarlo, francamente, me dió mucha rabia tu mensaje de septiembre, por eso aquella vez conteste tan altanero, tan enojado, era un mensaje que sobraba, que no faltaba, que no pedí ni quería. fue una burla. Ya no seas el espejismo, haz valer mis lagrimas, mis enojos, mis risas, mis sonrojos, mi amor y odio, todo el nudo de emociones que me hiciste sentir, que nunca he sido de piedra, que siempre he sido blando contigo, que siempre pierdo contigo. Aunque me cueste aceptarlo, me tienes aun en tus manos, nunca me has soltado, soy aquel pájaro que quisiste dejar libre con las alas maltrechas. Que no te sorprenda que mi vuelo nunca pudo despegar y hoy me encuentre aquí, cantándole a quién pensó que me hizo un bien y tan sólo me hirió más.

Perdón si me sigo luciendo con metáforas, comparaciones, analogías, etc. Sé que no tienen importancia para ti, que te dan lo mismo, que te doy lo mismo en cada aspecto que me haga brillar, haré mi mejor esfuerzo por ya no hacerlo.

Querida, no para nada estoy feliz, ni mucho menos realizado, quizás más sereno pero eso no siempre es sinónimo de que este todo bien. Dicen que soy bien pinche mamón y me da igual, que tengo un carácter ególatra aunque ya no tanto el temple. Estoy menos frustrado, pero sigo inconforme conmigo, ya no lloro, no me enojo ni mento madres porque no me hablas, y es que sigo siendo una mierda para ti, porque quizás sea quién más impacto tuvo en ti, pero da igual eso, pues nunca fue suficiente, a pesar de que te di más de lo que fui, más de lo que soy. Por supuesto que me sigo dando golpes de pecho, quebrandome la cabeza pensando en que me hace falta, pero con la gran diferencia de que ya no estoy frustrado. Mi hambre por ser mejor me impide seguir con la derrota, francamente mis objetivos siguen siendo los mismos, todos siguen.

Y no, no me voy a preguntar si me haces bien o me haces mal, si todo el tiempo que pasó me fue acercando a estar mejor. Si tu intención es que regresemos a hablarnos, no es el momento.

Vaya, las cartas… Pensé que te habías deshecho de ellas, cómo te has deshecho de mi, no me sorprendería saber que ya no tienes el saxofón. La neta no te entiendo, porque dices quererme, dices que soy la mejor persona que conociste, eso suena más a un consuelo desesperado que a un hecho. No comprendo. Pero gracias por guardarlas, conservarlas. aunque me hiciste sentir mal, llorar cuando vi la foto, gracias simplemente por escribirlas, aunque… Pensándolo un poco, no somos tan diferentes que las personas en tiempos de guerra, amores que vienen y mueren a una velocidad escalofriante, el pensamiento latente de no saber que debería hacer en este preciso momento, y el tratar de guardar siempre un registro, con tal de alargar un efímero momento.

Perdona si con anterioridad me referí a ti como culera, era el enojo que te tenía y se muy bien que no lo justifica.

Querida Sofía, yo también leo el mensaje de cumpleaños de hace un año, y sigo pensando lo mismo de ti, sigo sintiendo lo mismo, lloro cada que lo leo, lloro al recordar tu reacción de aquel día. Cada mañana te pienso y pido lo mejor para ti, hubo un tiempo en el que te soñé constantemente, pero ya no considero mis sueños como un presagio. Te adoro a pesar de todo lo sucedido, te extraño, te quiero mucho, aunque el cielo este en llamas, los mares se sequen o el mundo esté en contra tuya y pienses que no hay salida para el hoyo en el que te encuentres, siempre iría a rescatarte, siempre cruzaría el vendaval por ti, porque yo sólo quiero que estés bien. Y no mi querida, no es un sofismo lo que digo.

18 de Abril del 2019:

Cuatro meses me tomó volver a este punto, el sentimiento cambia, pero el motivo sigue siendo el mismo, habrá mil razones para buscarte. Soy una víctima más de ti; a pesar de las amenazas latentes, siempre ignore los focos rojos que me advertían, no fui precavido contigo y terminé sufriendo como no tuve idea, pues en mi escala eres a quien más amé, porque cada palabra tuya provocaba un temblor en mi ser, ingenuamente siempre pensé que eras aquel desastre que me movía el suelo, inocente