-Disculpe señor, ¿por aquí pasa la vida?
-Así es, pero dicen que no se detiene.
-Caramba, ¿y no hay forma de hacer que pare aunque sea unos instantes?
-No, que yo sepa. Sólo puede aspirar a seguirla a buen ritmo. No es larga asi que deberá apurarse si no desea que se le termine antes de exhalar su último suspiro.
-Qué tragico, que no le alcance la vida como para querer seguir corriendo.
-No es trágico, es normal. ¿O quisiera correr un poco y luego quedarse a esperar el último vagón?
-¿Por qué no? Si ya hubiese visto todo lo que necesito, si ya hubiese llegado a donde hubiese querido…
-Me sentiría un total fracaso si me sucediera tal cosa.
-Pero… ¿qué espera ver más allá del horizonte? ¿qué espera conseguir más allá de lo que busca?
-No lo sé, pero justamente por eso seguiría corriendo.
-Me suena a ambición desmedida.
-No quisiera responderle con algo que lo ofenda o que suene a contraataque, pero a mi lo suyo me suena a chatura.
-También me han dicho conformista, pero creo que me planto objetivos que luego pueda cumplir.
-Muy conveniente, asi jamás quedará decepcionado de sí mismo.
-O frustrado.
-¿Y para eso quiere seguir a la vida? Hombre, párese aquí a verla pasar hasta que no quiera más. Usted decide y le pone fin a su viaje. Dé la espalda y no vea hacia el último vagón cuando esté por pasar.
-No lo había pensado, ¿usted cree que con eso lograría evitar la muerte?
-No. Sólo quiero decirle que si hace eso, simplemente jamás habrá vivido, y ni se dará cuenta de cuando llegue su final.
-Me tienta a evitar ese padecimiento.
-La tentación supone abandonar un equilibrio, no seguir en la quietud total.
-¿Dice que debería anhelar saltar a lo desconocido, largarme a una carrera que no se ni cuando ni donde termina? Disculpe pero de verdad no me tienta eso, me siento muy bien así. De hecho, esperaré a la vida hasta verla pasar en plenitud, y hasta donde quiera, como bien me ha dicho.
-No hace falta.
-¿Perdón?
-Mientras hablaba, la vida ha pasado por completo, casi como en un suspiro.
-Pero, no lo entiendo… ¿es posible? ¿y ahora que me sucederá?
-Nada, no tema. Tal como lo planeó ya hace rato que está usted muerto. Y no ha sentido nada.
OPINIONES Y COMENTARIOS