EL PORQUERO DE AGAMENON II

EL PORQUERO DE AGAMENON II

EL FILOSOFOY EL PORQUERO HAN COMPARECIDO A RENDIR CUENTAS EN LA CORTE – DESPUES EL REY AGAMENON LOS INVITA A UN BANQUETE.

LA COMIDA Y EL BUEN VINO LOS PONEN PARLANCHINES

FILOSOFO.

La verdad es la verdad dígala quien la diga.

AGAMENON.

Conforme.

PORQUERO.

No me convence.

FILOSOFO.

La realidad es la realidad,lo objetivo es lo objetivo,las cosas son las cosas, lo que hay es lo que hay.

AGAMENON.

Conforme.

PORQUERO.

No me convence.

FILOSOFO.

Explica tu insolente incredulidad porquero. La verdad de la verdad, por definición es una y única para reyes o porqueros, como uno y único es en su reino el rey Agamenón. Estás ante tu rey ,¿O es que acaso pones en duda su poder?.- ¿Su poder no te convence?

Cómo es que administras dos mil puercos y vas a presentar cuentas de mil.

AGAMENON

Si, a mí también no me convences con tu parca explicación, quieres que te lleven las parcas, recuerda, soy dueño de tu cabeza y de los puercos.

PORQUERO.

Soy parco por los años y daños de la vida, pero ante cosas importantes como esta no se debe ahorrar palabras.

La fuerza de la verdad no deriva de la verdad misma, del propio carácter verdadero de la verdad.

La verdad no es independiente de quien la diga, observen, no tengo cabeza, ni puercos, ni fuerza, entonces, no tengo verdad, soy un don nadie, Sé que la verdad del poder es la única verdad y la verdad verdadera, LA VERDAD ES EL PODER, es la verdad de los vencedores y esto ha sido así a través de la historia de la humanidad. No es el sentido de las palabras lo que importa; lo que importa es saber quién manda, quien maneja el poder tiene más posibilidades de que su opinión predomine. Será siempre una sucia invención del poder.

Entonces, la fuerza de la verdad está al servicio de la verdad del poder, no me inclino ante el poder de la verdad, sino ante la verdad del poder, pero conservo la dignidad de no dejarme convencer por el poder de la verdad, su majestad puede disponer de mi cabeza.

AGAMENON.

Nunca antes había escuchado palabras tan sabias,

! Que claridad conceptual!, como es que estás de porquero de mi corte, no había reparado antes en ti, de ahora en adelante serás mi filósofo de cabecera

y tú filósofo a la porqueriza.