Dependencias.

Estamos de nuevo cara a cara golpe a golpe espalda con espalda quizás, en este juego de la vida en este intercambio de roles indefiniendo los patrones, estabas escondida en algún rincón de mi cuarto cruzando la puerta del placard, entre las sacudidas de mi ropa, no existe nada que nos divida nos revolcamos en el barro frío y pegajoso, abrimos la canilla y terminamos las frases al mismo tiempo

Ah…como me hacías falta, mi pasta de dientes te extrañaba en las mañanas nuestro reflejo ahora esta completo para poder desayunar. Te abrazo y lloras…tanto tiempo ha pasado que puedo oírte vibrar, tiemblas me tomas la mano y tiemblas ¿Porque no has venido antes? Nos merecíamos volver a mirarnos a los ojos sentir este placer, mezclar y tamizar los ingredientes en la cocina.

Soledad quédate…soledad no te vayas que el mundo es cruel que los puños duelen y las palabras no tienen orden ni juicio, que mi cama me escupe y me condena al exilio, un poquito mas por favor, luego te acompaño a tu casa de la mano como a vos te gusta…quédate que en compañía no quiero, me da miedo y no se cómo estar.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS