Cara o cruz al amor

Que los gustos intangibles,

Se definan irresistibles,

Y se despedacen apenados,

Y te devoren tus latidos.

Que el amor plagiado,

Sea una señal para conocerte,

Para que tengamos una condición,

De estar siempre y para siempre.

Brincos de emociones,

Palmas de pasiones,

Brillantes de ilusiones,

Transparentes de amor cristalino.

Estúpidamente enamorados,

Al punto no neutral,

Al punto de olvidar el pasado,

Al punto de amarte eternamente.

Clandestino amor,

Sujeto de furia,

De plantearnos mezclados,

Y desatar el amor infinito.

Buscador de sueños,

Tal vez juntos ¡que genialidad!,

Y ojalá nos alcance la vida,

Para explorarnos hasta llegar al punto neurálgico.

Detestablemente intrascendente,

Nuestra vida separados,

Solo el encontrarnos,

Nos da sentido a todo lo bonito.

En la búsqueda de amor inmortal,

El amor real,

Detalles primordialmente perdidos,

Te encuentro diferente, única y brillante.

Lagrimas de tristezas y felicidad,

Se desvanecen en el sentido,

Plagiando el amor sin notarlo o talvez si,

Deducirlo, toda una utopía.

¿A dónde va el amor?, pregunta seria.

Ni en las pulsaciones más extrañas,

Nos imaginamos donde podría estar,

Pero nos gustaría atarlo y domarlo.

Tiramos la vida escudriñando,

Pisamos nuestros dichos,

Nos buscamos perfectos,

Nos completamos en el otro.

Pálida tu vida, pudiendo vivirla,

Nos enamoramos del amor,

Omitiendo su significado,

Pensando tenerlo controlado.

Claro sentimiento,

Amor por amor,

Luces al alma,

Besos que llegan al cielo.

Cada sutil sonrisa,

Nos emociona a miles,

Olvidamos que sobrevivimos,

Olvidamos y nos perdemos las emociones.

Pensamos sin entregar el corazón,

Sería la mejor opción,

O seria regalar vulnerabilidad,

Sin embargo, el amor se decanta.

Correcto o no ya no importa,

Lo correcto sería absurdamente incorrecto si no lo intentáramos,

Seria oscuramente temerario no pretenderlo,

Seria ultramente cobarde no apostar al AMOR.

Seria inhumano que nos vayamos de aquí sin sentirlo,

Sin visualizarlo,

Sin regalar el corazón y el alma,

Y sin que nos hagan sentir importantes y plenos,

Y también que todos aprecien esa sensación de plenitud eterna.