Nombre: Betsy Hilary
Evidencia: 8
Fecha: 30/10/25
Periodo: 2
La muñeca que no guardaba silencio
Cuando mi mamá era pequeña, tenía una muñeca que era su juguete favorito. Le tenía un cariño muy especial, pues había sido un regalo de cumpleaños y la acompañaba a todas partes. Cada noche dormía con ella entre los brazos, y antes de cerrar los ojos le hablaba como si fuera su mejor amiga. Aquella muñeca tenía una voz grabada que decía algunas frases cuando se le presionaba el pecho, y eso la hacía aún más especial.
Una noche, mientras todos dormían profundamente, un sonido extraño rompió el silencio de la casa. Era la voz de la muñeca, que había empezado a hablar sola, sin que nadie la tocara. Al principio, mi mamá pensó que lo había soñado, pero la voz seguía repitiéndose una y otra vez, cada vez más fuerte. Asustada, se levantó y fue a despertar a su mamá y a sus hermanas.
Entre todas intentaron entender qué pasaba. Tomaron la muñeca y, aunque nadie la presionaba, seguía hablando sin parar. Decía frases en un tono inquietante, y no se callaba ni un momento. La desesperación creció en la familia, así que decidieron quitarle las baterías pensando que con eso se detendría. Sin embargo, para su sorpresa, la muñeca continuó hablando incluso sin energía.
El miedo fue tanto que la sacaron del cuarto y la dejaron en la sala, cubriéndola con una cobija. Al día siguiente, revisaron el instructivo del juguete, que estaba completamente en español, sin ningún mensaje extraño ni instrucciones fuera de lo normal. Nadie pudo explicar lo que había ocurrido aquella noche.
Desde entonces, mi mamá nunca volvió a dormir con esa muñeca. A veces dice que quizá fue una falla eléctrica, o tal vez algo más… pero cada vez que recuerda esa historia, todavía siente un pequeño escalofrío al pensar en aquella muñeca que no guardaba silencio.
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