1000 pedacitos de cristal

1000 pedacitos de cristal

Kirsten v.

06/06/2025

Escribo porque me gusta o porque me desahogo a través de las palabras? Las emociones cada día se vuelven vanas y mis ganas de escribir aumentan. Cada día soy una persona nueva, predispuesta, que al salir a tomar un rayo de sol siente que vale la pena. Los fines de semana me encierro en un capullo, no salgo de mi cuarto, y si lo hago, no me aguanto.

Pero la predisposición me está agotando y siento que cada día menos avanzo, me siento consumida por el sol y la lluvia llama a mi nombre cada vez que escucho una gota caer al suelo. Quizás solo es mi imaginación, quizás nadie me llama. Quisiera pensar que he perdido mi brillo para empezar, yo nunca tuve aquel brillo. 

La gente me dice debes cambiar, así no puedes llevar una vida normal, y me gustaría responderles estoy haciendo lo posible por cambiar mi vana manera de vivir, pero lo cierto es que solo quiero encontrar un lugar y esconderme allí.

¿Desde cuándo el cielo ha sido tan gris? Los truenos alardean sobre la gran tormenta. Mi mente es un caos y no sé cuándo todo esto acabará. No puedo mirar hacia abajo y últimamente tampoco hacia arriba, no tengo un lugar de escape y, como en una avalancha de nieve, parece que seré aquel animal que queda enterrado bajo la frondosa y espesa nieve de mis sentimientos. 

La vanidad me ha enseñado a no pisar suelo tembloroso, sin embargo, ¿qué hago si la que tiembla soy yo? Entonces, con mi cara y mis sentidos de responsabilidad, manejo cosas que debería olvidar.

Pienso todos los días por qué me sucedió esto y por qué soy yo la más afectada. Espero algún día recuperar los 1000 pedacitos de cristal.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS