Escribiré tu nombre en mi alma,

Permanecerá siempre presente para contemplarla.

Tú inicial y la mía

Serán símbolo de pleitesía.

Que fuiste mi más grande hazaña,

La fuerza que me impulsaba cada mañana.

Mas un maldito día llegó

Y me robó la paz interior.

Mi inocencia de niño, no distinto

A un degüello en sacrificio,

Donde roban sangre adrenalina…

Asi sentí yo.

No me hago preguntas nocturnas,

No me lacero con cuestiones absurdas.

No me arrepiento de no haberte auxiliado;

No tenía control, al fin y al cabo.

Es una situación complicada,

De seguro, mucho más para el que manejaba.

Solo te pido que me dejes ir,

Que reconozcas, al fin, que no estás aquí.

Pero hicimos una promesa,

Y cómo me encantaría que se rompiera.

Noviembre 2024

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS