Con la cabeza fría y el corazón ferviente
va una mujer guerrera,
hondeando su bandera,
a defender de a su patria,
su soberanía y su dignidad.
Con la cabeza fría y el corazón ardiente,
Sin estratagemas, sin doble filo,
defiende la verdad y la honestidad
de esta nación gloriosa.
De esta nación grandiosa
que hondea su bandera,
ante la tempestad.
Con la cabeza fría y el corazón valiente,
va esta mujer sonriente,
mirando el horizonte
de un pueblo maravilloso.
De una patria rica en historia,
de una tierra prospera y viva
que defiende con mucho orgullo
su soberanía y libertad.
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