Otra vez que camino mirando al suelo como lo hacía en el pasado, que por desgracia se volvió a hacer presente.
Otra vez veo tintilar la luz que me iluminó, la veo querer apagarse justo cuando casi la logro agarrar para acercarla a mi pecho, para que vuelva a prender mi propia luz y no tenga que estar pendiente de si alguna otra luz se apaga.
Otra vez que me encierro en mis pensamientos y trato de exprimirme el coco pensando lo mismo de ayer y lo mismo que mañana.
Otra vez que te veo pasar por mi vera y no sé ni si lo volveré a hacer más veces… Ojalá que sí.
Otra vez que me encierro en el cuarto y me prendo el quinto para ver si llego al octavo; restando que no vuelva ni al primero.
Otra vez que me desangro en una pantalla sin saber siquiera si doy la talla para cumplir mis sueños, al menos los sueños que tenía ese niño que fui hace ya mucho.
Otra vez quiero escribir algo que sea feliz o mínimo, no tan triste, pero no puedo.
Y… ojalá sea la última vez… que digo «otra vez».
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