REENCUENTRO DE ENERO
Era celebración de la fiesta del distrito, yo fui con mi tía y mi prima ya que quería pasarla bien llegamos por ahí de las 3 p.m el cielo estaba gris y las gotas de lluvia caían como anunciando lo que iba a pasar, vimos un poco de las danzas, tradiciones asta llegar en la noche. En la noche cuando tomábamos con los grupos musicales que habían llegado me dispuse a tomar y ya medio ebrio Salí de grupo a comprar un cigarrillo, fumaba tranquilo en la glorieta y de pronto se apareció ante mí, la note un poco mal así que se acercó hacia mí, me miro y se sentó a mi costado, la verdad me sorprendí por que era una forma no habitual de su comportamiento.
Soltó la primera palabra que es “Estas bien ”, yo con la sonrisa le dije que si y que más bien a ella la notaba un poco mareada , de ahí empezó hacer un gesto como quería vomitar , agarre su mano fuerte y la lleve a un lugar sin persona para que pudiera vomitar , la cual le dije que me esperase y que le iba a comprar agua con sal de Andrews .Cuando volví estaba ahí le di el agua con un vaso ya mezclado con sal de Andrews, cuando termino de tomar me dijo, “Aún sigues siendo el mismo no? ”, yo la mire a los ojos y le pregunte a que se refería, ella respondió a que seguía teniendo un buen corazón, aunque intentaba ocultar mis sentimientos y tratando de ser frió, de repente se me izo un nudo en la garganta por que tenia mas o menos la razón , empezamos a caminar le pregunte con quien estaba tomando y me dijo que con su tía , y que salió a despejarse un poco, seguimos caminando y de pronto sentí un escalofríos en todo mi ser como si una sensación saliera del subsuelo y me envolviera todo mi ser, ella me había abrazado por mi espalda , el tiempo se congelo , me dijo que se disculpaba por ser tan orgullosa , que en el fondo cada día me extrañaba , que esperaba que yo diera el primer paso y de pronto volvió a encenderse una chispa dentro de mí , voltee y sin dudarlo la bese, era un beso tan mágico ya saben cómo es el amor, fuimos a un lugar mas tranquilo, entre risas y miradas que hablaban más que las palabras, sentí cómo el tiempo se detenía. Esa noche, bajo el cielo que aún guardaba gotas de lluvia, nos encontramos de nuevo, no solo como dos personas, sino como dos corazones que, a pesar de todo, nunca dejaron de buscarse…
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