CUANDO TOCO MI ALMA (ensayo # 1)

CUANDO TOCO MI ALMA (ensayo # 1)

Voy a decirlo, es cuando pienso en ti

Cuando despejo mi mente que por lo general esta sumergida en la confusión de mi espíritu agitado y desorientado, porque es grande la avalancha, no sé si las fuerzas o acaso la decisión tenga que ser más firme.

Me he conformado con quererte sintiendo amor por ti

¡Cómo me di cuenta de esto!

No es una exageración lo dice mi temperamento, libre, osado, independiente. De seguro el espíritu Roquero o la pasión por sentirme YO, es un esclavo conducido al degüello.

Espero estar sentada para apreciar tu silencio, tu mirada y tu gran amor.

Tenía una puerta literal en mi corazón y ansiaba el sonido de entrada. Tu figura andante con permiso del viento, destilaba perdón a la vida por tus años de aprendizaje. Y el dolor que cargabas ¡DIOS! Y yo te añadía uno más. En ti encontré mi raíz de inicio con el que todos nacemos siendo buenos, inocentes y sinceros.

Mi condena no es tangible como el hecho de que tenga que suspirar sufriendo, contaminando el aire, ensombreciendo el paisaje con mis culpas y dolores.

No es amargo el amor, pero descubrí que era amargo el camino.

Mis fuerzas no están en mi cuerpo, felizmente, y perdona por quererme es que de allí saco la endereza de la vida. Y es con esa fuerza indeleble que a veces me quiebro

Finalmente

Tu nombre es seco, no me hace gracia lo cual sigue sorprendiéndome. Eres TU, ¡TE LO HE DICHO! Un espíritu más interesante y si te miro frente a mí, no me resisto ¨tengo que tocarte¨. Has envuelto a Sofia en tus brazos largos y delgados y aun de lejos me has hablado, es cuando pienso en ti – que toco mi alma-.

Sandra Mantilla