En tus ojos lo vi

En tus ojos lo vi, claro que lo vi.
Sin esperarlo, en ese pequeño brillo de tu rostro, supe que me ibas a hacer pedazos.
Oh dulce dolor! tan dulce y cortante, tan doloroso como desde un principio supuse. 
Esa primera chisma, primer mirar y primer sentir.
Tan perfecto tacto y hablar, tan singular caminar…
¿Cómo no caer ante aquel primer flechazo ?
Tan hermosa sonrisa. Sonrisa que desde un principio no me pertenecía.
Singular melodía que de ti salía. En cada uno de tus instrumentos escuchaba tu nombre, tu voz, tu presencia.
Oh hermosos colores del mundo!!, colores que en mi permanecen mediante tu recuerdo.
En tus ojos lo vi, claro que vi mi hogar, mi familia y nuestro caminar. Claro que lo imaginé y por un breve monto lo creí.
Amaba ese café!! Ese hermoso color que no me dejaba dormir, ese interminable recuerdo que en tu cara permanecía.
Esos alocados torbellinos que tenías por cabello.
En tus ojos lo vi, claro que lo vi. Mas en tu corazón jamás lo sentí…
Y todo ese amor que en ti habita, jamás estuvo destinado para mi.