Las palabras se rompen en mi corazón / con el estruendo de una tormenta singular / se convierten en navajas peligrosas que cortan este silencio estos susurros escondidos en mi sangre mientras navego en este río de soledad / este mar que se agita interminable en la costa que es tu voz / como los barcos infinitos que brillan en este horizonte gélido que no puedo más evitar / ya soy parte de esta quietud donde el cielo y el mar se unen infinitamente y me invade una nostalgia antigua y muy personal a pesar de las barcas que pescan amores sumergidos en el olvido / en la penumbra de este día que muere lentamente en mis manos, enamorados desconocidos se prometen un nuevo día a pesar del frío en sus huesos / y yo sigo respirando recuerdos y risas / la noche atrapa mi voz / La Punta brilla como una estrella y palpita una y otra vez y las barcas retornan tristes envueltas con el amor de todos los corazones rotos que alguna vez se ahogaron en este mar / sin embargo, la luz siempre volverá / sin importar ninguna herida sin cerrar que te aqueje / el día siempre volverá
Escrito el 08.09.24
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