Tres recuerdos han recorrido mi espalda, solo tres

Han acariciado mis impulsos, dejando un cosquilleo agradable, sutil, profano.

La suavidad de tus labios acariciando, quemando mi inútil resistencia, adormeciendo mi conciencia.

El aroma de tu cabello a fresca mañana, a inquietante caricia…

ensortijada sensualidad.

La tersura de tu mano como ágil paloma vuela entre las ramas de mi intimidad.

Tres recuerdos han recorrido mi espalda, solo tres, acariciándome, adormeciéndome…

poniéndome a mil.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS