Dicen que los mejores se nos adelantan,
También dicen que somos cenizas,
También que somos alma,
Simplemente nadie lo sabe.
Cuando nos preguntamos ¿por qué?, nadie nos contesta,
Cuando nos limitamos a saber porque respiramos,
Cuando nos hacemos preguntas sin respuestas,
Cuando todo el infinito nos envuelve.
A veces nos pasamos la vida buscando los sueños,
Perdemos tiempo en lo no importante,
En lo banal, en lo sin sentido compresible,
En la exploración de mundos paralelos.
Ojalá pudiéramos regresar el tiempo,
A cosas con sentidos, y no flotar en las nubes.
El tiempo es aliado de nuestra vida,
Y solo nosotros sabemos cómo lo utilizamos a través del mismo.
Solo necesitaríamos cinco minutos para el amor,
Para retornar a aquel momento antes de verte por última vez,
Y darte una mirada, una sonrisa, un beso, un abrazo de amor;
Y destinarnos a despedirnos uno pegados al otro.
Ese momento donde todos quisiéramos volver,
Y que solo podemos imaginarlo,
Y tal vez visualizarlo a través de momentos que quisiéramos que ocurriesen,
Lo pensamos y esperamos alcanzarlos al cielo.
No podemos perdernos en ilusiones,
Debemos dejarlos volar para que la vida les otorgue una segunda oportunidad,
E intentar sobrellevar la tristeza inmensa de almas devastadas de dolor,
Y buscar de esta manera la felicidad en todos los sentidos.
Solo nos queda agradecer por disfrutarlos,
Por amarlos, por estar siempre,
Por contagiarlos de vida, por ser felices todo el tiempo,
Por recordarlos así mismo.
Ellos quisieran que los recordemos y los dejemos ir,
Y también estarán agradecidos por cada momento vivido,
Y nos verán desde donde les toque,
Nos cuidaran y nos guardaran un lugar hasta nuestro siguiente encuentro.
No nos sintamos tristes, porque nuestras lágrimas son las de ellos,
Ya volverá el momento del reencuentro y podremos estar juntos,
Y ahora si por siempre y para siempre.
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