Seguí escribiendo a pesar de que mis letras mueren sin voz, yacen inertes en mi mente, vagan solitarias en mi corazón, escritas sin sentido ni rima, amargas de dolor y olvido punzante y sangrante cual destierro del destino, mi mente escribe con delirio, anochece y la penumbra nubla mis ojos, mis labios extrañan tus besos, mis brazos huérfanos por tu cuerpo se estremece por la gélida briza que congela mi alma. Todo mi ser te extraña, te necesita cual agua que llena el oasis de mi vida, porque sin ti mi desértico corazón moriría sin amor y olvido
OPINIONES Y COMENTARIOS