El alba

Mira! ya llega la alborada, esos son tus ojos que me hacen sentir de mañana con alegre al trinar los pajarillos.

Huele al preticor del suelo de tu piel que enloquece mis sentidos, olor a gloria matinal tu ser y alma.

Las estrellas se van dando paso a la luz de tu rostro. oh! impío soy! de tocar la brisa con mis labios, la inmaculada frescura de los tuyos.

Que mañana tan linda! amado mio! entre tus brazos de sol, no existe tinieblas ya más, al contrario es calor que me quema de amor.

Quiero que pueda broncearse mi alma en tu sol y así poder sentirte en mi suelo que es mi corazón.

Ya de mañana contemplar tu radiante ser en donde la obscuridad se acabó has amanecido tu mi amado sol!.

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