Hemisferio derecho
Dentro de la magia que ilusiona,
los ramos de flores caen
y el palpitar solar desvanece,
dejando desnudo al pasto mísero.
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En el encuentro de carretas,
quienes guían al pueblo
otorgan sus pases húmedos y pútridos,
parece que el cielo estuvo en desacuerdo con ellos.
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Finalmente, en el ascenso mágico,
el coro francés retumba en el tímpano hasta del sordo,
con la epifanía del canto se brotan sonrisas y en el cierre de ojos
veo tu cuerpo tendido, pero tu alma ahora es tu único reflejo.
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