El Chico del Corazón Prohibido

El Chico del Corazón Prohibido

El chico del corazón prohibido

1.- Que tan grande es mi corazón

Hola, mi nombre es Octavio, soy de Santiago de Chile, y me gustaría compartirles mi historia. Antes de entrar en detalles sobre mi deseo prohibido, quiero contarles quién soy, comenzando por mis padres, Alondra y Gustavo.

Ambos se conocieron hace más de 15 años en el colegio; mi madre estudiaba en un liceo mixto, y mi padre llegó el primer semestre del segundo año medio. En ese momento, mi madre se enamoró de él, y comenzaron a salir. Gustavo, proveniente del sur junto a mis abuelos, escapó de los colegios con mala fama, ya que no se llevaba bien con la autoridad y tenía una banda de música que tocaba rock progresista, una variación del rock con distintas formas musicales. Mi padre formó una banda y mi madre se convirtió en su especie de manager, presentándose en diversos establecimientos educacionales.

Yo nací de ese amor, con mi madre de apenas 16 años y mi padre de 20. Después de mi nacimiento, todo cambió. Se fueron a vivir juntos, pero las discusiones comenzaron porque mi papá quería seguir con la música, mientras que mi mamá deseaba ocuparse de mí y de todo lo que eso implicaba. Sin entender que ser padre a veces significa renunciar a ciertas pasiones, mi papá decidió irse un día y nunca volvió.

Mi madre, a pesar de seguir amándolo, decidió luchar por mí. Entendió que era imposible volver con él, pero optó por dejar de amar. Esta decisión tuvo consecuencias en sus futuras relaciones, las cuales nunca despegaron. Así fue como la melancolía se convirtió en un aspecto importante en la vida de mi mamá.

Cuando yo nací todo estaba bien, mi madre se fue a vivir con mi abuela, pudo terminar la enseñanza media y en un control con el médico pediatra se dio cuenta que algo pasaba con mi corazón, hicieron algunos estudios y notaron que este crecía más de lo normal y lo esperable para mi edad que en ese entonces era de 3 años. Mi mamá luego me explicó que tenía un pequeño “daño” cardiaco que hacía que el corazón se debilitaba y provocaba una dilatación y se inflara, según el doctor esta afección podía ser algo temporal o permanente y que la persona podía vivir con esto, solo que tenía que evitar algunas situaciones de estrés y que tenía siempre estar en controles médicos.

Ahora tengo 16 años y, a esta edad, es inevitable experimentar estrés, ya que mi cuerpo está en pleno desarrollo, tanto a nivel cerebral como físico, cognitivo y emocional. Este proceso a veces provoca que en las noches me despierte con dificultades para respirar. Una de las consecuencias más significativas afecta mi desempeño en el colegio, ya que no puedo participar en educación física ni en actividades deportivas debido a que mi ritmo cardíaco se vuelve irregular, y mi corazón late sin cesar. Además, esto ocasiona que mi abdomen se hinche, a veces de manera tan notable como un globo. En ocasiones, me ha sucedido en plena clase tener que correr al baño mientras mis compañeros se burlan de mí. No es fácil vivir con un corazón tan grande.

El hecho de tener un corazón tan grande ha llevado a que mis compañeros se alejen de mí, considerándome raro. No tengo la culpa de ser así ni de las burlas, risas o incluso intentos de agresión que he enfrentado. Lo único positivo que extraigo de esta situación es la presencia de Nicolás, mi mejor amigo desde tercer básico hasta ahora, tercero medio. Siempre que alguien intenta lastimarme, Nico interviene y se enfrenta a ellos. Creo que tiene un talento innato para enfrentar situaciones difíciles, le he sugerido que podría ser parte de la WWE, pero él solo se ríe. Además, me dice que debería estar orgulloso de tener un corazón grande, ya que eso amplifica mi capacidad de amar. Y creo que tiene razón, porque toda la sangre que bombea mi corazón, haciéndolo latir fuerte e incesante, contribuye a que mi amor por él sea infinito. Cuando hablo de «él», no me refiero a Nicolás, sino al hombre más hermoso que he visto en mi vida, aquel que hace que mi corazón lata con fuerza sin cesar y que paralice todo a su alrededor.

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