ESPÍRITU ERRANTE

Lo que soy

P.S.M

Espíritu errante

Eso es lo que soy, un espíritu encadenado en diferentes avatares, diferentes épocas, diferentes escenarios. Camino por la vida dejando a mi paso ilusiones, esperanzas, amores, odios, tristezas y, añoranzas.

Soy el espíritu de la mujer que rompió corazones, soy la causante de grandes tragedias, de confrontaciones y de grandes batallas.

Soy el espíritu del niño que no nació gracias al miedo que despertó, soy el espíritu de aquel aventurero que conquistó tierras y sembró terror.

Soy el espíritu de aquel viejo marinero que se embarcó en su viejo navío y se perdió en las profundidades del mar.

Soy el resultado de los pecados, de las manchas ocultas de avatares anteriores. Soy el conjunto de experiencias recopiladas en el gran libro de la vida.

Soy el espíritu de aquel hombre sin sombra que transita fugaz por los cabarets en busca de caricias compradas y amores vendidos.

Soy el espíritu del anciano que murió esperando la llegada del hijo que se fue a la guerra para nunca más volver y quedó sumido en la más profunda soledad y tristeza.

Soy el espíritu errante que cabalga en las llanuras llenando de espanto y de leyendas.

Soy el espíritu indomable que quiere ser libre y seguir su paso por el mundo en busca de nuevos avatares, nuevas sensaciones, nuevas vidas.

Soy el espíritu solitario que habita en la oscuridad de decrépitos lugares, de sombrías formas.

Soy el espíritu viajero que observa desde lejos la podredumbre del ser humano y mira con compasión el espíritu puro de los animales.

Sólo soy el espíritu de la madre, del padre, del hermano, de la víctima y del verdugo. Del niño que con inocencia busca respuestas, del que todo lo sabe pero nada recuerda.

Sólo soy el cúmulo de conciencias y conocimientos adquiridos a través de los diferentes personajes de la gran obra que es la vida.

Sólo soy…el espíritu que desea ser liberado y como aquel caminante, ir en busca de nuevas aventuras, nuevos lugares, nuevos amores.

“El alma viviente del hombre una ves consciente de su poder, no puede ser sofocada ” -Horace Mann-