Me
cansé de esperar, y de esperarme.
Troto
ligero, sobre pasatiempos o versos,
dibujando
una estela, de rencores y remordimientos.
Que
me exasperan un rato, para luego, dejarlos
inmóviles,
quietos, en la memoria distante, lejana:
olvido,
y me olvido, de ti, y de mí; y de quiénes fuimos.
©
OPINIONES Y COMENTARIOS